Alonso siempre me admira
Un octavo puesto es una clasificaci¨®n nimia para un piloto del talentazo de Alonso. Pero a m¨ª me ha vuelto a admirar. El d¨ªa en el que cumple 37 a?os me obliga de nuevo a preguntarme de d¨®nde sale su motivaci¨®n para continuar d¨¢ndolo todo un McLaren que jam¨¢s, en todas estas temporadas, ha estado a la altura de su potencial. El asturiano podr¨ªa tener un palmar¨¦s id¨¦ntico al de Lewis Hamilton, desde luego que no es peor piloto que el brit¨¢nico, deber¨ªa estar luchando por otro t¨ªtulo, como quien fuera su compa?ero tanto tiempo atr¨¢s en Woking y que ahora aspira nada menos que al quinto. No es as¨ª, muy al contrario. Sin embargo, no se rinde y sigue haciendo lo que puede para sumar unos puntos que s¨®lo le sirven como consuelo personal, para nada m¨¢s.
Para Alonso en la pr¨¢ctica es lo mismo acabar quinto que octavo una carrera, al igual que el Mundial. Lo ¨²nico que realmente satisface a un ganador como ¨¦l es justo eso, el triunfo. Algo que ya es un recuerdo demasiado lejano, tanto como para hacerle olvidar que merece la pena luchar por alcanzarlo. Pero no, Fernando se sube a ese monoplaza lamentable cada domingo con la intenci¨®n y el anhelo de dar lo mejor de s¨ª mismo, sin importarle mucho m¨¢s. Me parece admirable. Cumplir con cualquier trabajo sin ganas es una losa pesada, no imagino la sensaci¨®n de tener adem¨¢s que jugarte la vida para cumplir con tu parte del acuerdo, por mucho que los del otro lado del muro no lo hagan. As¨ª que, insisto, mi mayor admiraci¨®n para un personaje irreductible.