La ilusi¨®n s¨®lo se llama Neymar o Mbapp¨¦
La sensaci¨®n de orfandad causada por la salida de Cristiano del Madrid hacia la Juventus s¨®lo puede ser compensada con una inyecci¨®n de ilusi¨®n. Ese cr¨¢ter dejado por el crack portugu¨¦s va mucho m¨¢s all¨¢ de los 44 goles marcados la pasada temporada (en 44 partidos). Cristiano eran sus tantos, s¨ª, pero tambi¨¦n la competitividad en la plantilla, la profesionalidad autoimpuesta y exigida a todos sus compa?eros, la palabra adecuada a los m¨¢s j¨®venes en situaciones de m¨¢xima presi¨®n y, sobre todo, el respeto que infund¨ªa en sus rivales, que sent¨ªan que part¨ªan con un gol de desventaja con su sola presencia en el terreno de juego.
Florentino est¨¢ ahora obligado a remangarse. M¨¢s all¨¢ de que Lopetegui sea capaz de sacar lo mejor de todos y cada uno de sus jugadores o del equipo en general, que es su sello como entrenador, ahora toca devolver la ilusi¨®n. En cincuenta d¨ªas se han evaporado la sonrisa ganadora de Zidane y la jerarqu¨ªa de Cristiano. El madridismo necesita una inyecci¨®n de optimismo. El presidente siempre alarde¨® de hacer posible lo imposible. Hubo un tiempo en que se atrevi¨® a dibujar un solo verano con Figo y Zidane como objetivos. No lo pudo hacer en un a?o, pero s¨ª en dos. Los nombres de Neymar y Mbapp¨¦ son los ¨²nicos que parecen compensar el enorme vac¨ªo dejado por el ¡®7¡¯. El brasile?o es buen¨ªsimo y responde como nadie al perfil de gal¨¢ctico, en su ecuaci¨®n de megaestrella y de rentabilidad, aunque el pack incluya su denostada teatralidad, los toiss o los cumplea?os de su hermana. El franc¨¦s ha demostrado en el Mundial su crecimiento y sus prodigiosas condiciones. Todo lo que se salga de ellos sonar¨¢ a baj¨®n, porque la sombra de Cristiano m¨¢s que alargada se antoja infinita...