Hamilton no deber¨ªa cuestionar a Alonso

Lewis Hamilton es un piloto tan excepcional en la pista como poco oportuno fuera de ella. Y mira que es bueno¡­ Con la edad ha modulado su car¨¢cter aunque de vez en cuando parece que echa de menos protagonizar alguna salida de tono. Justo antes de empezar el Mundial en Australia se?ala, sin mencionarle, a Fernando Alonso como un ejemplo que no deber¨ªa seguir Daniel Riccardo ahora que anda meditando sobre su futuro. Por supuesto que el brit¨¢nico puede tener la opini¨®n que le plazca sobre el espa?ol, lo que ya no es tan admisible es que falte a la verdad. Insinuar que el asturiano ha sido un elemento desestabilizador en los equipos con los que ha competido es una falsedad de dimensiones monumentales. Si alguien complic¨® las cosas en su momento fue Hamilton, mejor dicho tanto talento como atesora y que puso en una situaci¨®n delicada a Ron Dennis, hasta el extremo de forzar la salida de Alonso de Woking.

Desde ese instante, y con el par¨¦ntesis obligado y fallido de su segunda ¨¦poca en Renault, el espa?ol estuvo cinco a?os en Ferrari y logr¨® tres subcampeonato antes de marcharse cuando consider¨® que ese proyecto estaba agotado para ¨¦l (como as¨ª era). De su nueva etapa en McLaren qu¨¦ decir: soport¨® durante tres temporadas con paciencia y generosidad las fisuras de la sociedad con Honda, sin apenas torcer el gesto, sin una mala palabra, haciendo equipo y sufriendo la manifiesta incompetencia del motorista japon¨¦s. As¨ª que Hamilton no tiene derecho alguno a cuestionar a Alonso b¨¢sicamente porque falta a la verdad haci¨¦ndolo, por no mencionar que deber¨ªa mostrar algo m¨¢s de respeto por un rival que sabe le pondr¨ªa en serios apuros con un monoplaza competitivo. Y todo, para colmo, sin ninguna necesidad y sin venir a cuento¡­ Lo dicho, otra pataleta de ni?o malcriado.