Ese Neymar bailando a la pata coja...
El roneo del Madrid con Neymar es tema recurrente en las conversaciones. Eximio jugador, extravagante ciudadano. El capo del PSG viaj車 a Brasil, de donde arranc車 promesas de fidelidad del padre del fen車meno, pero le han convencido s車lo a medias. El chico sigue all赤, alegre y confiado, y ayer hasta se grab車 en Instagram ensayando un baile a la pata coja, que a algunos nos recuerda aquel d赤a en que a Cunningham, prodigio malogrado del Madrid, le cazaron en una discoteca a los dos d赤as de haber sido operado del dedo gordo del pie. Hay jugadores por cuyo cuerpo corre una alegr赤a irrefrenable que compagina mal con el f迆tbol.
El Madrid quiere a Neymar, lo que importuna a Cristiano, que marca goles en proporci車n creciente mientras espera que Florentino se estire y le eche una mano (o un cheque) para sacarle del pantano de Hacienda. Pero Florentino le tiene echado el ojo a Neymar, ya lo dijo nada m芍s ganar Cristiano su quinto Bal車n de Oro. Neymar es un jugador prodigioso, el mejor tras Cristiano y Messi, pero trae contraindicaciones. Con 谷l viaja un circo, que son sus &toiss* y sus cosas. Sus cumplea?os, los de su hermana, sus fotos sin ropa en la nieve, sus evasiones frecuentes. Nada que ver con la sobriedad de Messi ni con el trabajo herc迆leo de Cristiano.
No veo a mi alrededor mucha gente feliz con la perspectiva de que el Madrid fiche a Neymar. El madridismo desconf赤a. Para el Bar?a fue como la solitaria: se meti車 en su intestino, le consumi車 recursos y prestigio, y cuando por fin se march車 lo que produjo fue alivio. Al cabo de los meses, el Bar?a tiene 222 millones que invirti車, &grosso modo*, en Coutinho y Demb谷l谷, de los que algo se espera, vuela en LaLiga, es finalista de Copa y es favorito en las apuestas en la Champions. Por su parte, el PSG no ha subido ni un pelda?o en el escalaf車n desde que le fich車. Y ah赤 le tienen, en Brasil, bailando a la pata coja, ajeno a la crisis de su club.