El Schillaci de Cornell¨¤
Gerard Moreno. Vicente del Bosque dio la sorpresa colando a Pedro en la convocatoria final del Mundial de Sud¨¢frica. No hab¨ªa sido internacional absoluto ni una sola vez. Seguro que recuerdan tambi¨¦n c¨®mo se col¨® ¡®Toto¡¯ Schillaci en el Mundial de Italia. Vicini lo meti¨® a ¨²ltima hora y acab¨® siendo muy importante. ?Ser¨¢ Gerard Moreno el tapado de Lopetegui? El perico de cuna se sale. Ha metido la mitad de los goles conseguidos por su equipo en LaLiga. No solo es la cantidad, sino la calidad y el momento. Determinante porque aparece cuando debe en un equipo que tiene problemas para generar ocasiones. En partidos ante rivales grandes, Real Madrid, Atl¨¦tico o Barcelona. Morata y Costa tienen plaza segura, Aspas oposita muy seriamente. Si el seleccionador opta por un hombre m¨¢s de ataque, Gerard podr¨ªa tener sus opciones. Suma de segundo punta, se busca la vida en solitario, si fuera necesario sale desde la banda izquierda. Es m¨¢s, me atrever¨ªa a decir que es ADN de La Roja, tira buenas paredes. No me extra?ar¨ªa que Julen quisiera verle en los partidos de este mes. Se merece una oportunidad.
El dilema de Zidane. El papel del entrenador el martes no es nada f¨¢cil. La baja de Neymar ha hecho que parte del entorno entienda que la eliminatoria est¨¢ hecha. Error. Siendo el brasile?o la baja m¨¢s importante, su sustituto Di Mar¨ªa ha acreditado un momento de forma excelente. Es m¨¢s, fue dif¨ªcil de entender que Emery no le diera papel en el Bernab¨¦u, por el momento en el que se encuentra y por el factor emotivo de querer demostrar lo que se pierden en Madrid. El argentino ya ha dejado bien claro que le hubiera gustado jugar en el Barcelona. Pero el principal galimat¨ªas de Zidane es determinar qu¨¦ hacer con los tocados. Marcelo estar¨¢. Pero si se da la baja de Modric y Kroos la cosa cambia. Crean y guardan el bal¨®n, ante un equipo que apretar¨¢ se puede hacer largo sin ellos. No dir¨¦ que la baja del croata es tan importante como la de Neymar pero en este Madrid es trascendente, m¨¢s en este tipo de partidos. Si no est¨¢n se me antoja a¨²n m¨¢s importante la figura de Isco, el m¨¢s capacitado para guardar el bal¨®n si la cosa se pone seria en Par¨ªs.
Respuesta del pueblo. Una ciudad a la altura del mito. Eso ha demostrado ser Gij¨®n esta semana. Una ciudad que ha rendido el homenaje que Quini merec¨ªa. Que ha conseguido que los que jam¨¢s vieron jugar a Enrique Castro lo sientan como suyo. Patrimonio popular. Desde la r¨¢pida respuesta del ayuntamiento, el calor inmediato del Oviedo, eterno rival deportivo, de esa afici¨®n que en un d¨ªa demasiado del norte acudi¨® para decir adi¨®s al estadio que ya lleva su nombre. Y sobre todo de los que fueron sus compa?eros en aquel Sporting que no estuvo nada lejos de salir campe¨®n. Nada m¨¢s emocionante que ver a esa cuadrilla de amigos levantando a Quini al cielo. Pipo Prendes canta el Ahora Quini, ahora, Gij¨®n se aplic¨® la letra y el cuento. Reaccion¨® pronto, bien y a la altura de su ciudadano m¨¢s querido.