En medio de las dudas y el caos, Sergio Scariolo ten赤a una idea
El d赤a explica, o m芍s bien simboliza porque seguimos sin explicarnos demasiadas cosas, la situaci車n kafkiana en la que se ha metido el baloncesto europeo: la Selecci車n espa?ola jug車 en Minsk, poco antes de un Barcelona-Real Madrid de Euroliga que se disput車 antes de una jornada NBA en la que ten赤an faena Ricky Rubio, Pau Gasol, su hermano Marc, Niko Mirotic y los Hernang車mez. A nivel de imagen, y de esas cosas que no hay quien explique a los menos aficionados al baloncesto porque ni los que lo somos terminamos de entender (o s赤, que es casi peor), la temporada est芍 perdida. La tercera Ventana tendr芍 refuerzos, en teor赤a y porque los calendarios acompa?an, pero la cuesti車n es si de cara al curso pr車ximo se elige repartir la baraja y no romperla.
Pero al menos no est芍 perdido el Mundial 2019 para Espa?a, y conviene volver la vista para recordar que era un temor real en noviembre, cuando no se sab赤a d車nde y c車mo estaban las cosas antes de jugar en Montenegro. Pero Scariolo ya hab赤a barruntado el escenario y en un loable ejercicio de realismo hab赤a empezado a preparar esta coyuntura, en Benahav赤s y con el grueso de los jugadores que han amasado este 3-0 que parece oro y que lo ser芍 definitivamente con un triunfo ante Montenegro el lunes. Quiz芍 esta victoria no cuente porque Bielorrusia apunta a cuarta de grupo, pero para que sea as赤 hab赤a que evitar que sumara victorias. Total, que hab赤a que ganar tambi谷n en Minsk. Por si acaso. Y Espa?a gan車.
Y gan車 en un mal partido, nada que ver con el despliegue ante Eslovenia en Burgos. Pero estas son las trampas que pod赤a encontrarse en este formato y esta situaci車n y ya ha salvado dos: en Montenegro y Bielorrusia. Con muchos errores y muchas ventajas desperdiciadas pero, en el lado positivo, aportaci車n importante de dos que no estuvieron en noviembre: San Miguel y Beir芍n. Con Fran V芍zquez y Quino Colom como obvios pilares, soluciones (a veces a duras penas, pero soluciones) y una idea clara y estable en mitad del caos: la de Benahav赤s. La de Sergio Scariolo.