?Prepar¨® Zidane el partido?
Cerca del desastre. Sali¨® vivo el Madrid de un partido que se preve¨ªa de car¨¢cter festivo. La faena se le complic¨® por falta de pegada y por reincidir su sistema defensivo en las frecuentes equivocaciones que le acompa?an durante toda la temporada. Pareci¨® que Zidane no organiz¨® a su equipo ante la ¨²nica v¨ªa de escape del Al Jazira.
Verticalidad rival. El Al Jazira no hizo nada distinto a lo que hab¨ªa hecho en sus dos encuentros anteriores. Ten Cate s¨ª cambi¨® el sistema, dando paso una zaga de cinco, pero no su propuesta. Dej¨® descolgados a Romarinho y Makhtoub y lanz¨® a Boussoufa en las transiciones. El Madrid se expuso a los contraataques ¨¢rabes.
El desorden. Los de Zidane atacaron con ocho futbolistas, con Achraf y Marcelo como extremos. Indefensos Varane y Nacho, se generaron varias situaciones de uno contra uno, que s¨®lo Romarinho supo resolver para el Al Jazira. El Madrid estaba avisado y se inhibi¨®.
Fluidez con bal¨®n. Sus concesiones atr¨¢s fueron rectificadas con un volumen de juego interesante. Apreciable primera media hora en la que la intervenci¨®n singular de Ali Khaseif sostuvo al conjunto ¨¢rabe. No se perdi¨® en el camino el Madrid y empuj¨® tras el descanso al hilo de Modric. Los cambios de Asensio, Lucas y Bale, fuera Isco y Kovacic del partido, ilustraron el gol definitivo, ese que dej¨® ir como casi siempre Benzema, tras bordear la cat¨¢strofe.
Uno para uno
Cada salida al ataque del Al Jazira denunciaba la precariedad defensiva del Madrid, con marcas descuidadas y ayudas inexistentes.
El cambio de Lucas
El Al Jazira ten¨ªa un agujero por su banda izquierda que Achraf no termin¨® de aprovechar. La irrupci¨®n de Lucas result¨® concluyente en el 1-2 final.
