Mijatovic cambi車 nuestras vidas...
Mijatovic se merece con creces el premio a aquella d谷cada precisamente porque cambi車 las vidas de millones y millones de personas.

Un servidor naci車 en 1965. Por lo tanto, cuando Mijatovic meti車 el hist車rico gol de la S谷ptima uno andaba por los 33 a?azos. Y como yo, varias generaciones de madridistas que est芍bamos hartos y cansados de que nos hablaran de las seis Copas de Europa ※en blanco y negro§. Esa expresi車n nos quitaba legitimidad emocional. Es f芍cil de explicar. Por una cuesti車n generacional no vimos ninguna de las seis finales ganadas en la era dorada del Madrid de Bernab谷u. As赤 pues, no consolaba tener m芍s Orejonas que nadie pero no haber ganado ninguna estando t迆 en vida. Para el madridismo militante, la S谷ptima era tan necesaria como el comer...
Mijatovic se merece con creces el premio a aquella d谷cada precisamente porque cambi車 las vidas de millones y millones de personas. Todos entramos en la era en color gracias a su gol de pillo en ?msterdam (por cierto, legal sin discusi車n porque Pessotto romp赤a el fuera de juego). Pedja reinsert車 al Madrid en esa Copa de Europa que es el amor de su vida. Con la S谷ptima se reabri車 el mel車n y ya vamos por la Duod谷cima... Esa noche llor谷, como tantos miles y miles de madridistas en las gradas. De alegr赤a, de emoci車n, de orgullo de saber que por fin 谷ramos part赤cipes de la historia que nos contaron nuestros padres desde ni?os. La leyenda contin迆a...