Cuanto m¨¢s voy contra Federer, mejor juega
Cuanto m¨¢s voy contra Federer, mejor juega. No s¨¦ por qu¨¦ me empe?o en aliarme con el rival del suizo, sea quien sea. La raz¨®n no es otra que evitar que Roger engorde su palmar¨¦s y abra a¨²n m¨¢s brecha con respecto a Rafa Nadal. Pero no se puede ir contra el talento, que en este caso es mucho, inmenso, tanto que no s¨¦ qui¨¦n se atreve a estas alturas a fijarle fecha de caducidad al maestro suizo.
Federer no s¨®lo gana. Lo importante en ¨¦l es c¨®mo juega al tenis. Dejo al margen los r¨¦cords, esa cifra de 19 grandes a lo largo de su historia, los cinco US Open, los cinco Abiertos de Australia, su Roland Garros, el hecho de que ante Cilic acabe de ponerle el lazo a su octavo t¨ªtulo en Wimbledon, un torneo en el que ha sido capaz de no ceder ni un solo set.
Uno ve jugar a Federer y es como ver bailar a Fred Astaire. Tan f¨¢cil... La c¨¢mara lenta retrata a todos. Los gestos de intensidad a la hora restar, por ejemplo, que contrastan con esa facilidad pasmosa de Roger a la hora de colocar su raqueta. Suavemente. Recuerda a aquello del aikido, en el que el secreto est¨¢ en aprovechar la fuerza del rival para ejecutar tu propio movimiento.
Palabras cari?osas para Cilic
Escribo esto mientras Federer levanta el trofeo de campe¨®n en la pista central de Wimbledon. Es su jard¨ªn, el lugar el que m¨¢s feliz ha sido. Ha llorado de alegr¨ªa, l¨®gico, al igual que una hora antes lo hac¨ªa Cilic al ver con impotencia que la final se le escapaba. Las del croata eran l¨¢grimas de ansiedad. "El tenis es cruel en ocasiones", reconoce Federer sobre la hierba de la central. "Debes sentirte orgulloso de ti mismo", a?ade, dirigi¨¦ndose a Cilic. Federer, campe¨®n con la Wilson en la mano, campe¨®n ante el micr¨®fono. Lo es y lo seguir¨¢ siendo. Por mucho que las nuevas generaciones toquen a la puerta, por mucho que yo trate de inventarme rivales que le puedan batir. Me rindo, me rindo antes de que sea demasiado tarde. Debo disfrutar del mejor tenista de la historia como lo hacen todos. Lo bien que suena ese viol¨ªn¡