El f¨²tbol le debe una al Glorioso
El f¨²tbol tiene memoria y le debe una al Glorioso. Aquella m¨ªtica final del 16 de mayo de 2001 dej¨® un gran sabor de boca entre la afici¨®n babazorra, pero tambi¨¦n la amargura de gente llorando en el centro del campo o de 10.000 aficionados suspirando tras el 5-4 .
La clasificaci¨®n del Alav¨¦s no ha rozado la ¨¦pica, ya que el bombo ha sido ben¨¦volo con ¨¦l en casi todas las fases. Pero eso no resta m¨¦rito a un bloque muy solidario y conjuntado. N¨¤stic, Alcorc¨®n, Depor y Celta han sido los escollos, equipos como el Atl¨¦tico y Real Madrid se han ido liquidando entre s¨ª o por el camino. Cuando en el a?o 99, sin ir m¨¢s lejos, Man¨¦ meti¨® al equipo en semifinales contra el Zaragoza, s¨ª sac¨® de la circulaci¨®n al mism¨ªsimo Madrid. Aquello s¨ª fue realmente ¨¦pico.
Es posible que Pellegrino rinda su ¨²ltimo servicio a un club al que lleg¨® sin hacer ruido, aunque los m¨¢s optimistas conf¨ªan en que ma?ana anuncie su continuidad. Sea como fuera, gracias ¡®Flaco¡¯. Y gracias a toda esta magn¨ªfica plantilla que nos ha devuelto la ilusi¨®n, a 25.000 alaveses seis mil sin entrada, que disfrutaremos de una gran fiesta en Madrid.
?lava palpita ante su primera final copera en los 96 a?os de historia. La final ha condicionado todo desde hace tiempo, pero el equipo ha tenido la virtud de no desenchufarse de LaLiga. Por eso sali¨® a morder en el derbi ante el Athletic. Era como un ensayo general, a tres partidos para cerrar la temporada regular. A pesar de conseguir el objetivo de la permanencia (han acabado novenos en la clasificaci¨®n), han sido fieles a su estilo y no han levantado el pie del acelerador en la recta final del campeonato liguero, lo que les ha permitido llegar con tensi¨®n y buenas sensaciones a esta final. El espejo del baloncesto, con finales ¨¦picas y un idilio permanente a la hora de levantar el trofeo, est¨¢ ah¨ª.
Ibai, Toquero y Alexis deben ser los l¨ªderes en un d¨ªa como hoy. Y los Llorente y Theo tratar¨¢n de despedirse con un chupinazo. Adem¨¢s, el colombiano Dani Torres o el propio Pellegrino, en su ¨¦poca de jugador, ya han vivido en sus carnes la sensaci¨®n de disputar una final.
La pena es la ausencia de Laguardia, un ¨ªdolo para muchos en Mendizorroza por su pundonor. El t¨¦cnico argentino maneja dos alternativas t¨¢cticas y podr¨ªa plantear una defensa de cinco hombres, que tan buen resultado le dio en el Camp Nou donde los albiazules se impusieron por 1-2; aunque el contratiempo provocado por la lesi¨®n de Laguardia, podr¨ªa hacer que el ¡®Flaco¡¯ maniobrara hacia la habitual l¨ªnea de cuatro zagueros.
Frente a la frialdad del Bar?a hacia su torneo fetiche, en Vitoria hay hambre por alzar el primero. Cientos de aficionados despidieron en el Gran Hotel Lakua a la plantilla antes de volar hacia Madrid. La lluvia no impidi¨® la en¨¦sima movilizaci¨®n.
La convocatoria fue lanzada por la agrupaci¨®n de pe?as, Iraultza 1921 que se acerc¨® al lugar con bombos y bengalas para dar colorido y entonar los c¨¢nticos que han atronado en Mendizorroza esta temporada y que hoy se volver¨¢n a escuchar en el Vicente Calder¨®n. El equipo babazorro cen¨® en Vitoria y posteriormente sali¨® en busca del sue?o. Hoy parten 50 autobuses que desplazar¨¢n a numerosos aficionados desde las 7:00 horas. Otros han ido llegando por otro medios tras cubrir los 360 kil¨®metros que separan la capital vasca de la de Espa?a. Uno de cada diez vitorianos estar¨¢ hoy en Madrid. Ah¨ª es nada.