Christian Alem¨¢n, el Barcelona y su legado

Christian Alem¨¢n tiene 21 a?os, es zurdo, juega en Barcelona de Guayaquil y es el ejemplo de que en la Copa Libertadores todo es posible. Suplente hasta hace un par de semanas, entr¨® ante Botafogo en Ecuador y la descosi¨®. Repiti¨® en R¨ªo hace unos d¨ªas y destroz¨® a un Botafogo incr¨¦dulo, incapaz de dar cr¨¦dito a c¨®mo Barcelona le despedaz¨® en un primer tiempo perfecto. No s¨®lo Alem¨¢n, tambi¨¦n Richard Calder¨®n y Jos¨¦ Ayovi. Y en menor medida el uruguayo Jonathan Alvez. Christian Alem¨¢n ha permitido que Barcelona crea de nuevo en esta Libertadores en la que la historia cada vez pesa menos, en la que los grandes sufren. Alem¨¢n es de la cantera de Emelec, el otro grande de Guayaquil y que tambi¨¦n se est¨¢ batiendo en esta Libertadores.

Pero quer¨ªa hablar de Barcelona, de su historia y de su legado. Fundado en casa de un catal¨¢n, de ah¨ª su nombre y las referencias al Bar?a y Catalu?a en su escudo. Cu?a de excelentes jugadores, roz¨® la cima con aquellas dos generaciones que alcanzaron la final de Libertadores en 1990 y 1998. Derrotas ante Olimpia y Vasco, m¨¢s dolorosa la segunda al jugar el partido de vuelta en Guayaquil. Equipo muy veterano en defensa aquel Barcelona, que adem¨¢s hab¨ªa vendido a Cruz Azul de Mexico al punta Agust¨ªn Delgado despu¨¦s de eliminar a Colo Colo en cuartos. 111 a?os sumaban entre tres de los defensores, Holger Qui?¨®nez, Luis Capurro y Jimmy Montanero. El ¨ªdolo Cevallos bajo los palos tras parar tres penaltis en la tanda de semifinales ante Cerro Porte?o y en punta el inolvidable Anthony De Avila, veterano colombiano que ven¨ªa de perder tres finales con Am¨¦rica de Cali en 1986, 1987 y 1996. Dos ante River y otra ante Pe?arol. De Avila perder¨ªa la cuarta porque Barcelona no pudo remontar los dos goles de Vasco en la ida en R¨ªo. El m¨ªtico Pedrinho sonri¨® en un equipo con una dupla ofensiva Donizete-Luizao y el eterno Mauro Galvao en defensa. Una final que dar¨ªa paso, claro, al m¨ªtico aguan¨ªs de Ra¨²l en Jap¨®n. Pero eso es otra historia. Esta forma parte de la maravillosa Copa Libertadores. Y Barcelona est¨¢ empe?ado en seguir luchando contra ella.