Sergio, el Pirri del siglo XXI
Cuando Florentino present¨® a Sergio Ramos el 1 de septiembre de 2005 tras desembolsar al Sevilla los 27 millones de euros que costaba su cl¨¢usula de rescisi¨®n, al aficionado le qued¨® la duda de si no iba a resultar una apuesta demasiado arriesgada en un chaval de s¨®lo 18 a?os. Pero un d¨ªa me cont¨® Joaqu¨ªn Caparr¨®s que desde que Sergio era un ni?o de 12 a?os ya se sab¨ªa que en su gen¨¦tica futbol¨ªstica iba dentro un aut¨¦ntico l¨ªder tanto dentro como fuera del terreno de juego. Ese adolescente melenudo sac¨® tres sobresalientes seguidos en sus primeros cursos en el Bernab¨¦u, adornados con dos Ligas que tuvieron much¨ªsimo m¨¦rito. El camero fue uno de los s¨ªmbolos del famoso Clavo Ardiendo.
Lo que ha llegado despu¨¦s ya se lo conocen ustedes de memoria. Sus goles ag¨®nicos quedar¨¢n para la Historia. Pero tampoco olvido uno heroico que meti¨® en el Coliseum de Getafe parti¨¦ndose el pecho contra el poste. Ese es Sergio Ramos. Un futbolista que no especula ni negocia con su f¨ªsico. A veces puede cometer alguna imprudencia innecesaria por su temperamento, pero todo lo hace con el coraz¨®n. Para el Bernab¨¦u es intocable. Sergio, blanco para siempre.