La barra de Boca sigue mandando
Boca Juniors. La 12 son palabras mayores en La Bombonera. El nombre de la temida, consentida e influyente barra brava. Un grupo de hinchas con mucha hemeroteca detr¨¢s, casi siempre con menci¨®n en la secci¨®n policial o de sucesos. Van cambiando los jefes, pero no se reducen las fechor¨ªas. El s¨¢bado pasado, los capos de la banda visitaron la pr¨¢ctica de Boca Juniors, en la previa del duelo ante Sarmiento, para amenazar a los jugadores. Se hab¨ªa viralizado la conversaci¨®n por whatsapp de dos jugadores (Benedetto y Cubas) con unas f¨¦minas y los ultras decidieron intervenir. ¡°En Boca no se jode¡±, fue la frase que trascendi¨® sobre un episodio en el que los temidos macarras exigieron que los jugadores dejaran de salir de noche y que ganaran la Copa de Argentina para asegurar una plaza en la Libertadores.
Medel. Pero Kevin no Gary. El hermano peque?o del Pitbull. Tiene 20 a?os, nueve menos que el exfutbolista del Sevilla, y un trayecto en el f¨²tbol menos reconocido. La UC, la cuna de la que salieron ambos, no acaba de fiarse. Por eso le reparte como cedido por esos campos de Chile; primero al norte, en San Marcos de Arica; ahora al oeste, al Everton de Vi?a del Mar. Y es ah¨ª donde el domingo, en el cl¨¢sico porte?o ante Wanderers de Valpara¨ªso, Medel II cuaj¨® una actuaci¨®n sobresaliente, de las que marcan despegues y puntos de inflexi¨®n. Mediocentro aguerrido, del corte de su hermano, al que no conviene perder la pista. Monito lo llama el Pitbull.
Da Silva. El Polilla, pichichi de LaLiga espa?ola en 1984, ariete que jug¨® en el Valladolid y el Atl¨¦tico, se rindi¨®. Renunci¨® a Pe?arol. ¡°Me super¨® el entorno¡±, confes¨®. Y dice que no se refiere con eso al p¨²blico o la prensa, sino a cosas de dentro, la presencia de directivos en todos los entrenamientos, por ejemplo. El ox¨ªgeno de ser el campe¨®n de liga vigente, tras derrotar a Plaza Colonia en la pr¨®rroga de la final, aunque sin ninguna vistosidad, no le alcanz¨®. El nuevo Apertura termin¨® por sepultarle: Pe?arol estaba en la zona baja de la tabla, con seis puntos tras siete jornadas. Y el caso es que nada m¨¢s irse, Pe?arol volvi¨® a ganar. El s¨¢bado.
San Jos¨¦. Dos espa?oles en los extremos, principio y fin de la tabla de clasificaci¨®n del f¨²tbol de Bolivia. Por arriba, Be?at San Jos¨¦, el t¨¦cnico del Bol¨ªvar, l¨ªder s¨®lido tras ocho jornadas disputadas (con dos paisanos en sus filas, Juanmi Callej¨®n, otro hermano, y Capdevila, ambos canteranos del Madrid). Por abajo, Azkargorta, colista con el Sport Boys. Lleg¨® al rescate, pero, con un partido m¨¢s disputado que la mayor¨ªa de sus pares, sigue sin sumar una sola victoria. El Bigot¨®n esta vez no da con la tecla.