Silva, Costa, Vitolo y La Roja de Lopetegui

Feliz estreno de Lopetegui. El equipo no present¨® m¨¢s novedad que Vitolo (y, ya sobre la marcha, Sa¨²l) y record¨® sus buenos tiempos, no tan lejanos. Con Silva al mando de las operaciones (en ausencia de Iniesta asumi¨® m¨¢s galones), La Roja se apropi¨® del bal¨®n, se instal¨® la mayor parte del tiempo en el medio campo rival y se llev¨® con soltura el partido. Las dudas s¨®lo duraron los primeros veinte minutos, anodinos por ambas partes, en un partido de ida y vuelta sin luz, gris. Pero luego apareci¨® la gran Selecci¨®n que conoc¨ªamos, s¨®lo que m¨¢s en¨¦rgica, con un saludable nuevo vigor.

Curiosamente, la irrupci¨®n de Diego Costa, que poco hab¨ªa hecho hasta ahora en este equipo, fue el detonante. Entr¨® por Morata, lesionado. Ante una B¨¦lgica que adelantaba la l¨ªnea, busc¨®, provoc¨®, le buscaron los compa?eros, alborot¨®. No finaliz¨® bien, pero desencall¨® la situaci¨®n. Coincidi¨® con que Espa?a descubri¨® un fil¨®n a la espalda de Jordan Lukaku, por donde llegar¨ªan los dos goles. El primero, tras excelente jugada colectiva, acelerada por Carvajal y Vitolo; el segundo, en penalti del propio Lukaku a Vitolo. Ambos los marc¨® Silva, la figura del partido. Ya lleva 26 con la Selecci¨®n, por cierto.

Como se ve, Vitolo aparece en los dos goles. Apareci¨® en m¨¢s cosas. El suyo fue un estreno formidable, en la banda derecha, con persistente inteligencia, velocidad, regate y juego cooperativo. Todas las cualidades que adornan a su Sevilla como equipo. Pero, Silva y Vitolo aparte, todos estuvieron bien o muy bien, dejando una imagen optimista para el futuro. B¨¦lgica, eso s¨ª, fue un desastre. Figuras de cart¨®n que se desconcertaron con el primer gol y no tuvieron rebeld¨ªa alguna. Italia, claro, ser¨¢ otra cosa, pero eso llegar¨¢ despu¨¦s de lo de Liechtenstein en Le¨®n, otra ocasi¨®n para cargar fe.