Aire fresco a nuestros r¨¦cords
El r¨¦cord de Bruno Hortelano el pasado jueves en Madrid (10.06 segundos en los 100 metros) ha tra¨ªdo un soplo de aire fresco a la tabla de r¨¦cords del atletismo espa?ol. ?sta a¨²n contiene marcas con una vigencia de m¨¢s de veinte a?os. Las hay de 1987 (Alonso en 400 vallas), 1988 (Mayte Z¨²?iga en 800 y Cristina P¨¦rez en 400 vallas), 1989 (Cornet en 400), 1990 (Sandra Myers en 200), 1991 (Sandra Myers en 100 y 400, y Equipo Femenino de 4x400), 1992 (Sotelo en jabalina), 1995 (Ana Isabel Alonso en marat¨®n) y 1996 (Julia Vaquero en 5.000). Sufrimos tal regresi¨®n en algunas pruebas, que ¨ªbamos mejor colocados para los Juegos de Se¨²l 88, Barcelona 92 y Atlanta 96 que para los de R¨ªo que comienzan el pr¨®ximo 5 de agosto.
Sangrante es el caso de los 1.500 metros, prueba estelar del atletismo espa?ol hasta que cay¨® en picado. Nuestros atletas est¨¢n corriendo en 3:36 minutos, cuando Ferm¨ªn Cacho lo hac¨ªa en 3:28 en 1997, y Est¨¦vez y Viciosa, en 3:30 poco despu¨¦s, marcas que Abascal y Gonz¨¢lez ya rondaban en los a?os 80. Es una tabla de r¨¦cords la nuestra que permanece anquilosada o, lo que es peor, donde figuran los nombres de atletas salpicados por casos de dopaje (Marta Dom¨ªnguez, Josephine Onyia, Bezabeh, Rey y Paquillo). Hortelano la refresca, como recientemente tambi¨¦n lo hizo Berta Castells en lanzamiento de martillo y el pasado s¨¢bado, Sabina Asenjo en el de disco. Bienvenidos sean. Falta nos hac¨ªan.