Grandes protagonistas de partidos inolvidables jugados en Francia
Un libre directo para la historia de Platini. No pudo llegar Van Breukelen a aquel libre directo de Platini en 1981 que dej¨® a Holanda fuera del Mundial 82. Todo pas¨® en el Parque de los Pr¨ªncipes, donde Modric dio un nuevo recital ante Turqu¨ªa. No ha habido un gol de tiro libre m¨¢s importante en la historia del f¨²tbol franc¨¦s. Dej¨® a Holanda sin Mundial tras dos finales seguidas en 1974 y 1978 y coron¨® a la generaci¨®n de Platini, Giresse, Six y Bossis. M¨¢s tarde llegar¨ªan los t¨ªtulos.
Los milagros de Arconada en 1984. Revivo una y otra vez las paradas de Arconada en la Eurocopa de 1984 y cuesta creerlo. Aquella a Elkjaer Larssen en Lyon en la semifinal ante Dinamarca, las que hizo contra Alemania en Par¨ªs el d¨ªa del gol de Maceda, el cabezazo milagroso a centro de Se?or en el ¨²ltimo suspiro. El gol con el que Espa?a se veng¨® de la derrota dos a?os antes en nuestro Mundial. El recuerdo eterno a Arconada, la injusticia al recordar solo el error ante Platini en la final.
La Portugal de Jordao que roz¨® el milagro. Vibr¨® Marsella aquella noche en la semifinal entre Portugal y Francia. La noche del gol de Jordao y su disparo fallido que bot¨® en las narices de Bats para dibujar la trayectoria imposible, del golazo de Domergue y la aparici¨®n de Platini. Nadie pod¨ªa frenar a aquella Francia pero estuvo cerca la Portugal de Chalana, Diamantino y el gran Jordao. En Zaragoza a¨²n se acuerdan de ¨¦l. Dif¨ªcil que la actual Portugal repita una Eurocopa tan heroica.
El Zarpazo de Kostadinov. Nueve meses de vida ten¨ªa Pogba cuando el Parque de los Pr¨ªncipes vivi¨® uno de los partidos m¨¢s tristes de la historia de Francia. Con todo a favor y a segundos del final un gol de Kostadinov dej¨® a los franceses sin Mundial 94. Pelota que perdi¨® Ginola, contra fulgurante y un gol que clasific¨® a Bulgaria. El estadio mudo, incr¨¦dulo. Papin, Sauz¨¦e o Ginola ya no se repusieron, pero s¨ª Deschamps. Cinco a?os m¨¢s tarde levantar¨ªa la Copa del Mundo.
Zidane entra en la leyenda. Aquella tarde en Saint Denis los periodistas nos alarmamos al ver que no jugaba Ronaldo. Fue una primera alineaci¨®n luego rectificada. Ronaldo s¨ª estuvo en el campo pero no jug¨® aquella final ante Francia en 1998. Fue la final de Zidane y sus dos goles de cabeza, de Deschamps y su mando desde el medio y de Petit con un tercer gol apote¨®sico. La Francia del 98 no ten¨ªa tanto talento como la del 82 pero esta s¨ª pas¨® a la historia. Instalada para siempre entre las grandes.