Bruno sac¨® la espina de Rom¨¢n
Nunca lo hemos reconocido de verdad, nunca hemos admitido que aquella fue una pu?alada en toda regla. Una de esas que cicatrizan con el tiempo, pero que no llegan a curar del todo. Por ello puede que ese recuerdo era algo que siempre estaba ah¨ª, pero en una nebulosa extra?a. Como si quisi¨¦ramos aceptar aquello y neg¨¢ndolo o rebaj¨¢ndolo, doliera menos. Y es normal, es doloroso tener una final de Champions en la mano y que tu jugador estrella falle un penalti. Es complicado que tengas a uno de los mejores del mundo, que veas la gloria en la mano y que se esfume en una jugada en el ¨²ltimo minuto. Por ello decidimos pensar que ya hab¨ªamos hecho bastante.
Pero con solo una imagen, un recuerdo, una frase, un detalle o simplemente sin quererlo, d¨ªa s¨ª y d¨ªa tambi¨¦n a la gente del Villarreal le ven¨ªa a la mente el maldito penalti de Rom¨¢n. Pero ayer otro de los buenos sac¨® de golpe esa espina que ten¨ªamos ah¨ª. Con un pase sacado desde el coraz¨®n. Era el ¨²ltimo minuto, era otra semifinal, eran 10 a?os despu¨¦s, y ese pase nos devuelve la opci¨®n de so?ar a lo grande. No s¨¦ qu¨¦ pasar¨¢, pero pase lo que pase, ahora recordaremos el penalti de Rom¨¢n, pero tambi¨¦n el pase de Bruno. Los dos hicieron saltar las l¨¢grimas, pero muy diferentes.