Trampas en el solitario
El atletismo ha cerrado sus rankings de la temporada de aire libre. Pese a la ausencia de r谷cords (s車lo aparecen los de Pablo Torrijos en triple salto y de Sabina Asenjo en disco), las marcas de nuestros atletas son notables. Tal es as赤 que esos mismos registros realizados durante los Mundiales de Pek赤n hubieran significado trece finalistas. Pero s車lo tuvimos dos: Miguel Angel L車pez y Ruth Beitia. Algo falla en el sistema de selecci車n. Tenemos buenos atletas, pero no lo son tanto en el momento de la verdad. Como tienen todo un a?o para hacer las marcas m赤nimas de participaci車n, las consiguen en condiciones 車ptimas; luego llega el campeonato y viene la decepci車n.
Es como hacerse trampas en el solitario. En Espa?a no les ponemos ning迆n tipo de requisito. El atleta puede competir durante todo un a?o cuando quiera, donde quiera y cuantas veces quiera, incluso en altitud si ello le favorece, en pos de esa fant芍stica marca que le abra la puerta de las grandes competiciones. Esto convierte la marca en el objetivo de la temporada. Una vez conseguida, las condiciones de repetirla, incluso mejorarla, no ser芍n las mismas. Tendr芍 que competir un d赤a y a una hora determinadas, quiz芍 bajo unas condiciones adversas y con la presi車n de los rivales. Su rendimiento no ser芍 el mismo. As赤 llevamos a?o tras a?o. Haciendo trampas en el solitario.