El Madrid invit¨® a cenar al ¨¢rbitro Kassai
Carlos Mejía Dávila, delegado arbitral del Real Madrid, llevó a cenar anoche al Mesón Txistu a Viktor Kassai, el árbitro húngaro que acababa de dirigir el Madrid-Liverpool, y sus ayudantes. Pasadas las doce y media de la noche, el exárbitro llegó con el equipo arbitral al restaurante. Mejía Dávila fue fichado por el Real Madrid en 2009 y entre sus funciones se encuentra la de atender a los árbitros que vienen a pitar al Bernabéu. Durante toda su historia el Madrid siempre fue un gran anfitrión para los equipos rivales y los colegiados. Tras la salida de José Luis López Serrano, el club de Concha Espina había dejado algo de lado estas atenciones y para recuperarlas ficharon a Carlos Mejía Dávila al regreso de Florentino Pérez a la presidencia. Con el fichaje del excolegidado madrileño el club intentó corregir lo que había descuidado en las relaciones institucionales durante la primera etapa de presidente de Florentino, antes de dejar repentinamente la presidencia en febrero de 2006.
El ¨¢rbitro Kassai se salud¨® con Rio Ferdinand, internacional ingl¨¦s, que estaba sentado en una mesa pr¨®xima. El excentral del Manchester United, que actualmente milita en el Queens Park Rangers, estuvo en el Bernab¨¦u disfrutando de la Champions mientras cumple los tres partidos de sanci¨®n que le ha impuesto la Federaci¨®n Inglesa por su rifi rafe en Twitter con un seguidor.?
Rio Ferdinand se levantó de su mesa para ir a saludar a Jorge Mendes, agente de Cristiano Ronaldo, que es un habitual del Txistu tras los partidos de Liga de Campeones. Mendes suele invitar a todos los que han presenciado el partido en su palco del Bernabéu. El superagente portugués cenó anoche con su gente de Gestifute y con todo el equipo que está rodando la película de Cristiano.
En la terraza de fuera cenaron Fernando Hierro, segundo entrenador del Madrid, y Steve McManaman, exjugador del Liverpool y del Madrid. Hierro y Macca, que son grandes amigos de su etapa de compañeros en el Madrid de la Octava, comentaron el partido recién terminado y la buena marca del equipo de Ancelotti.