El dif¨ªcil y entra?able Mbia
El de Mbia ha sido un caso dif¨ªcil en el Sevilla. H¨¦roe de la afici¨®n por sus haza?as ante Oporto y Valencia, se convirti¨® en un jugador inequ¨ªvocamente querido. Y eso en Nervi¨®n no es poca cosa. Pero en Mbia subyac¨ªan muchas m¨¢s cosas que el club, con buen estilo, suaviz¨® a la luz p¨²blica. Mbia es un jugador dif¨ªcil. Un d¨ªa pide un visado para un familiar, otro d¨ªa le cuesta entrenar. Y al tercero, le duele la espalda. Con todo eso, a Mbia fueron un d¨ªa a buscarlo al vestuario. Por entonces, a Emery no le quedaban mediocentros...
Mbia dijo que si le dol¨ªa y tal, que si quer¨ªa jugar el Mundial¡ Pero al final se convenci¨® y apareci¨® en el campo del Betis. Y en Do Dragao. Y en Tur¨ªn¡ Era tan dif¨ªcil Mbia que, a pesar de su papel estelar, el Sevilla no puso demasiado empe?o en retenerlo. Por su precio y su car¨¢cter. Y as¨ª pareci¨® hasta que pasaron los d¨ªas de agosto, cuando ni Mbia encontr¨® equipo ni el Sevilla mediocentro. La afici¨®n, ajena a la historia, ha celebrado su llegada. El efecto Mbia se vio el jueves. Un gol y una manera de hacer que llega al sevillismo, a quien tiene metido en el bolsillo. Juegue o no hoy en C¨®rdoba, Mbia no es un jugador m¨¢s en el Sevilla.