Verg¨¹enzas del atletismo
Batido el r¨¦cord de Bubka, ahora quedan veinte por batir, s¨®lo de pruebas correspondientes al calendario ol¨ªmpico. Pruebas con hasta treinta a?os de antig¨¹edad, a cuyas plusmarcas los atletas actuales no son capaces de acercarse. M¨¢s a¨²n que los atletas, son las atletas quienes quedan muy lejos de las marcas que en su d¨ªa establecieron las mujeres de los pa¨ªses del Este sobre todo, la mayor¨ªa sometidas a sistem¨¢ticos planes de dopaje, seg¨²n investigaciones realizadas y testimonios de las propias protagonistas. ?Y por qu¨¦ se estancaron las marcas de las mujeres y no de los hombres? Una de las teor¨ªas es que mientras en los hombres se pod¨ªa camuflar la presencia de la testosterona, en las mujeres resultaba m¨¢s dif¨ªcil; por eso pararon antes.
En la lucha contra el dopaje hubo un antes y un despu¨¦s a partir de 1988, cuando en los Juegos Ol¨ªmpicos de Se¨²l, Ben Johnson fue escogido como cabeza de turco para poner fin a lo que ya era un clamor. El f¨ªsico de la checoslovaca Jarmila Kratochvilova se hab¨ªa masculinizado hasta extremos escandalosos, y las marcas de la estadounidense Florence Griffith comenzaban a superar las masculinas de muchos pa¨ªses. Se traz¨® una l¨ªnea, y las marcas comenzaron a empobrecerse, sobre todo en los lanzamientos y la velocidad, donde los anabolizantes proporcionaban fuerza y potencia. Muchos de los r¨¦cords permanecen a¨²n vigentes. Luego vino la EPO, que caus¨® furor en las carreras de medio fondo y fondo, pero esa es otra historia a¨²n reciente.