La exploraci車n es una expresi車n f赤sica de la pasi車n

El sistema de navegaci車n GPS de nuestro barco parece haberse vuelto loco pues nos indica que estamos avanzando por encima del glaciar. En realidad sorteamos t谷mpanos que caen al mar desde glaciar Neumayer, cuyo frente ha retrocedido unos 5 Km. en poco m芍s de diez a?os, como evidencian las fotograf赤as tomadas desde sat谷lites. Cosas del cambio clim芍tico. Le oigo decir a Hugo, capit芍n de Le Sourire, que este barco ha navegado casi siempre en la franja que se encuentra entre los cincuenta y los sesenta y cinco grados de latitud Sur. Vaya, precisamente ese lugar que hizo exclamar a los navegantes cl芍sicos que ※M芍s all芍 de los cincuenta grados no hay ley. Pasados los sesenta, no hay Dios§.
Estamos justo en medio del Atl芍ntico Sur, all赤 donde las aguas ant芍rticas se mezclan con los dos oc谷anos m芍s importantes del planeta, originando las m芍s espantosas tempestades, cuando los demonios parecen adue?arse del cielo, el mar y la Tierra. Justo en el momento que escribo esta cr車nica de urgencia nos estamos preparando para regresar a casa, despu谷s de haber vivido una de esas grandes aventuras tras las que volvemos a casa enriquecidos y animados por ese impulso que nos hace querer internarnos en lo desconocido. Porque, en definitiva, son las ganas de saber, a secas, lo que ha movido la exploraci車n de la Tierra y de nosotros mismos desde nuestros or赤genes. Lo que hizo expresar a Cherry-Garrard, uno de los componentes de la desgraciada expedici車n de Scott al Polo Sur, que ※La exploraci車n es la expresi車n f赤sica de la pasi車n intelectual§ Despu谷s de casi 30 d赤as de una dur赤sima expedici車n, en la que no hemos gozado de 24 horas seguidas de buen tiempo, nos preparamos para regresar a casa. Pero nos separan de las Malvinas casi 1.500 Km. del mar m芍s temido por los marinos# y muy especialmente por m赤. Nuestro experto capit芍n me dice que no tengo nada que temer. ※Todo es muy f芍cil. B芍sicamente se trata de impedir que el oc谷ano entre dentro del barco.§
A medida que nos hemos internado en estos mares, tan tenebrosos y oscuros como el alma de los condenados al infierno, las olas han ido creciendo y nuestro peque?o velero se ha terminado convirtiendo en ese cascar車n de nuez, cantado por Sabina, donde han ido nuestro coraz車n y nuestros sue?os de viaje. Porque, en contra de lo que cantan mis amigos Sabina y Pancho Varona, yo s赤 he querido encontrar esas pocas islas que quedan donde naufragar. Y he vuelto a Georgias del Sur, a ese lugar donde fui feliz ya hace diez a?os, aunque tuviera que internarme en estos mares en los que se forj車 la leyenda de esos curtidos marinos que retrataron Conrad, Stevenson o London; hombres duros capaces de soportar terribles tempestades que a los menos templados conduc赤an al suicidio arroj芍ndose al oc谷ano. Aquellos que hicieron cierta la afirmaci車n de Cherry-Garrard de que es el hombre con nervios de acero el que m芍s lejos llega.