25 a?os sin el gran jefe de Ferrari
En agosto de 1988 ya trabajaba yo en el AS. Tal d¨ªa como hoy de aquel a?o nos lleg¨® (no con la inmediatez y profusi¨®n a la que nos han acostumbrado ahora las nuevas tecnolog¨ªas), la noticia del fallecimiento de Enzo Ferrari, el fundador de la empresa de autom¨®viles que lleva su apellido. Recuerdo que su muerte caus¨® conmoci¨®n entre los seguidores de la marca, aunque parec¨ªa evidente que su leyenda sobrevivir¨ªa a esa p¨¦rdida, como de hecho as¨ª ha sucedido y con ¨¦xito. Ya por entonces se vislumbraban nuevos tiempos para la compa?¨ªa, que se han concretado dentro y fuera de las pistas.
Con motivo de la efem¨¦ride dice Piero, su hijo, que Il Commendatore se sentir¨ªa orgulloso de esta Ferrari que hoy conocemos. Seguramente as¨ª ser¨ªa en lo empresarial, sus finanzas avalan un ¨¦xito que no ha supuesto renuncia alguna en t¨¦rminos de exclusividad o deportividad. Tengo m¨¢s dudas, en cambio, sobre lo que pensar¨ªa Enzo de ese equipo de carreras que tambi¨¦n le apasionaba. La F¨®rmula 1 se encuentra en el ADN de la marca como representaci¨®n fehaciente de su excelencia. Y el rumbo err¨¢tico de los ¨²ltimos a?os no creo que sea precisamente lo que le gustar¨ªa ver...