Con la humanidad y sencillez de Del Bosque pero sin bigote
Conozco a Ancelotti porque le he visto debutar en Primera con la camiseta del Roma, el 16 de septiembre de 1979, y con la camiseta de la selecci車n italiana, el 6 de enero 1981, en el Mundialito de Uruguay, donde marc車 su primer gol frente a Holanda. Desde entonces, le he acompa?ado en toda su carrera como futbolista en el Mil芍n y me acuerdo de su presentaci車n el 迆ltimo d赤a de mercado de 1987. Parec赤a gravemente lesionado para la Roma y en el final de su carrera, pero resurgi車 en el equipo de su maestro Sacchi. Le vi en aquella inolvidable noche del 19 de abril de 1989, cuando marc車 el primer gol de los cinco que mataron al Madrid en la Copa de Europa. Le vi cuando disput車 su 迆ltimo partido en 1992, en Foggia, con Capello de entrenador. Pero lo que m芍s me ha impresionado de Ancelotti ha sido su carrera como entrenador. Por eso digo que es un gran fichaje para el Madrid, porque es un ganador sin la arrogancia de Mourinho, con la sencillez y la humanidad de Del Bosque, pero sin bigote.
Tiene tres grandes cualidades. La primera: la tranquilidad de su car芍cter de hombre que ha crecido en el campo, humilde, sin el estr谷s de los grandes del f迆tbol. La segunda: el carisma de un hombre que ha ganado como futbolista en el campo y fuera. Y la tercera: la experiencia acumulada en los banquillos de tres grandes clubes, en tres diferentes pa赤ses. En el Mil芍n, donde gan車 una Liga y dos Champions; luego en el Chelsea, donde conquist車 la Liga despu谷s de Mou, y en Francia, donde triunf車 con el PSG. Ahora se presenta en Madrid y creo que nadie mejor que 谷l puede ser el hombre que d谷 a Florentino la D谷cima en Lisboa. Suerte, don Carlo.