El d¨ªa del baloncesto femenino
Zamora vive la fiesta del baloncesto femenino: la Copa de la Reina. Un baloncesto que bien se merece sus minutos de gloria, despu¨¦s de haber ganado una plata y cuatro bronces en los Europeos de la ¨²ltima d¨¦cada y un bronce en los Mundiales. Algunas de esas jugadoras est¨¢n hoy en la final, donde echaremos de menos al Ros Casares, el fenomenal equipo valenciano que, antes de que se lo llevara por delante la crisis, estuviera presente en las finales de las ¨²ltimas siete ediciones de la Copa de la Reina. Ahora el baloncesto femenino est¨¢ tocado y hay jugadoras que han tenido que emigrar. Sin embargo, la salud de este deporte es considerablemente mejor que la de otros, gracias a la estabilidad de la Federaci¨®n.
Los recursos propios de la Federaci¨®n permiten mantener las competiciones femeninas, en las que participan 34 equipos, y por tanto el alto nivel competitivo de las jugadoras. De ello se favorecen las distintas Selecciones, que llevan ganadas 42 medallas. Para Jos¨¦ Luis S¨¢ez, el presidente de la Federaci¨®n, es clave el seguimiento que se hace a las 300 mejores jugadoras j¨®venes, algo que se consigue despu¨¦s de una primera etapa de detecci¨®n de talentos y despu¨¦s con la colaboraci¨®n de las federaciones auton¨®micas para que ning¨²n talento se pierda las concentraciones de verano. Se construye as¨ª una gran pir¨¢mide en cuya base est¨¢n las 143.000 licencias y en la c¨²spide, las finalistas de hoy. Es el trabajo bien hecho.