Ni morosos ni privilegios
La faceta econ¨®mica: en tiempos de crisis y desahucios que hieren el coraz¨®n, no es l¨®gico que a entidades deportivas se les perdonen deudas fiscales o de Seguridad Social, m¨¢xime cuando se abonan cifras exageradas por los fichajes de jugadores. Comprensible que la ACB defienda su imagen de seriedad, garantizando el pago de contratos. La faceta deportiva: es doloroso que clubes con tradici¨®n queden fuera de la ¨¦lite, pero una Liga con menos equipos sube te¨®ricamente en equilibrio y competitividad.
La Liga lleg¨® a tener 24 equipos en los 90. As¨ª se lo impusieron componendas pol¨ªticas para admitir su autogesti¨®n. Desde entonces ha ido reduciendo en cada ocasi¨®n propicia, con la cifra de 16 en mente por considerarla id¨®nea al potencial de nuestro basket. Hay, eso s¨ª, un agravio comparativo a solventar. A Madrid y Bar?a deben exigirles secciones no sufragadas por el f¨²tbol, con iguales compromisos que el resto. La Ley del Deporte y las sociedades an¨®nimas deportivas necesitan una revisi¨®n profunda y urgente.