Londres, la pr車xima cita con la gloria
Pocos a?os atr芍s habr赤a sido una frase de ciencia ficci車n: 'Espa?a, m芍xima potencia del basket europeo en el siglo XXI'. Pero las cifras son inapelables. Nuestra Selecci車n ha conseguido lo que 迆nicamente la URSS, Yugoslavia y, en los a?os 30, Lituania, hab赤an logrado hasta la fecha: revalidar la corona de campe車n continental. Y lo ha hecho, adem芍s, con una exhibici車n apabullante de calidad y fuerza. El ascenso a la cumbre no fue f芍cil (seis finales perdidas antes de alcanzar el t赤tulo dos a?os atr芍s), pero en este verano m芍gico de 2011 se ha ratificado la hegemon赤a.
S赤: un a?o inolvidable, porque el triunfo de nuestra Selecci車n absoluta en el Eurobasket es la octava medalla conseguida este verano por nuestros equipos nacionales , cuatro de ellas de oro. La hegemon赤a se extiende a todos los niveles de la pir芍mide, lo que augura continuidad. En lo relativo al futuro inmediato, que son los Juegos Ol赤mpicos de Londres 2012, la cotizaci車n espa?ola subir芍 en las apuestas. En nuestro historial figuran dos finales ol赤mpicas, ambas con derrota frente a Estados Unidos y siempre con el factor atl谷tico como diferencia clave. Pero esta vez, si volvemos a encontrarnos con el coloso americano, el aspecto f赤sico estar芍 m芍s igualado. La incorporaci車n de Ibaka ha cubierto la 迆nica carencia importante que ten赤a nuestro equipo: poder de intimidaci車n. Unido a la solidez de los hermanos Gasol y la bravura de Reyes, en Londres podr赤amos tomar revancha de la final de Pek赤n, donde el oro ol赤mpico se escap車 por muy poco.