Con qu¨¦ poco nos ilusionamos
No hemos hecho nada m¨¢s que demostrar actitud y ganas, lo m¨ªnimo que hay que exigirles a unos profesionales, y las gradas del Vicente Calder¨®n vuelven a estar otra vez a rebosar. Esta sufrid¨ªsima afici¨®n, la del Atl¨¦tico, est¨¢ tan necesitada de momentos ¨¦picos y de alegr¨ªas deportivas, que a poco que demuestren los jugadores en el terreno de juego, volver¨¢ a estar a muerte con nuestro equipo en su estadio. Esta afici¨®n nunca ha desertado por muy dif¨ªciles y complicados que fueran los momentos. Lo que nos aleja y desmotiva es ver el lamentable y pasota comportamiento que el equipo exhibi¨® en Huelva, en la ida de los octavos de final de la Copa. La remontada, nos hizo por un momento sentirnos grandes, capaces de protagonizar, incluso, gestas. Eso unido a la posibilidad de ganar esta temporada un t¨ªtulo, la Copa del Rey, tras casi quince a?os de sequ¨ªa absoluta, propicia este s¨²bito renacimiento de la ilusi¨®n entre los aficionados rojiblancos. A todo esto a?adir¨ªa yo, que tras la pasividad demostrada esta temporada en la pol¨ªtica de fichajes, se agradece el esfuerzo realizado para traer a un gran jugador, el portugu¨¦s Tiago, y un aut¨¦ntico diamante en bruto, el argentino Salvio, que, al igual que Kun Ag¨¹ero, nos va a dar muchas satisfacciones.
L¨¢stima que lo mismo que hemos colocado a dos r¨¦moras, Sinama y Maxi, no hayamos empaquetado y vendido a ese par de centrales circenses que tenemos, hablo de los inefables Pablo y Perea, y haber adquirido un defensa de garant¨ªas que acompa?e a Dom¨ªnguez. Pero en este Atl¨¦tico la alegr¨ªa nunca puede ser completa.