El centro del campo es vital
Otra vez la afici¨®n ha vuelto a dar la talla, as¨ª que se merece un equipo que est¨¦ a su altura. S¨ª, lo s¨¦. La caja del club no est¨¢ en estos momentos para muchas alegr¨ªas. Pero si queremos que por fin este equipo est¨¦, por fin, la pr¨®xima temporada a la altura de su laureado pasado, tenemos que hacer el esfuerzo de encontrar y fichar un cerebro en el centro del campo. Si eso no sucede as¨ª, volveremos a ser ese equipo desestructurado, que s¨®lo es capaz de jugar bien a r¨¢fagas y al amparo de la sobredosis de talento que atesora una de las delanteras m¨¢s explosivas que hay en estos momentos en Europa. Necesitamos, como el comer, un medio centro ofensivo que ponga orden, d¨¦ sentido al juego colectivo del equipo y pueda rentabilizar, todav¨ªa m¨¢s si cabe, la calidad individual del Kun Ag¨¹ero y Diego Forl¨¢n.
Si echamos la mirada hacia atr¨¢s, vemos que los mejores momentos de nuestra historia, tuvieron sus propios cerebros en el centro del campo. Schuster, en los ochenta, y Pantic, en los noventa, por poner alg¨²n ejemplo, fueron los arquitectos de los espor¨¢dicos momentos de gloria que hemos podido vivir a lo largo de los a?os. Creo que ya ha llegado la hora de que dejemos de ver a jugadores como Diego Forl¨¢n, el propio Kun Ag¨¹ero o al mism¨ªsimo Simao buscando los balones en la medular para tratar de armar el juego ofensivo del equipo. Es vital que nos podamos asegurar un jugador que consiga sacar del centro la pelota jugada y consiga que todo el mundo entienda a lo que jugamos en el terreno de juego. Un buen centrocampista es el salto de calidad imprescindible para estar en el lugar que nos corresponde.