La mala suerte castiga a Palou
Una inoportuna amarilla provocada por Illot lastr¨® al espa?ol al encontrarse el pit cerrado y no poder repostar y cambiar ruedas cuando iba l¨ªder. Gan¨® Ericsson y el espa?ol acab¨® 9?.


Dicen que las 500 Millas eligen a su ganador. Y este a?o tampoco han elegido a ?lex Palou y han escogido a Marcus Ericsson. La mala suerte apart¨® al espa?ol de un triunfo al que optaba claramente, ya que su primera parte de la carrera fue excepcional, pero un accidente de Ilott cogi¨® al espa?ol, cuando iba l¨ªder, a escasos metros de realizar su segunda parada. Se cerr¨® el pit, tuvo que pasar de largo, entrar una vuelta despu¨¦s a realizar un repostaje de emergencia y volver cuando se volvieron a abrir los garajes para cambiar de ruedas. Tres pasos por la calle de boxes en tres vueltas, de primero a ¨²ltimo. Y a correr ya a la contra con algo m¨¢s de la mitad de la prueba por delante. Lo intent¨® hasta el final, pero no pudo ser, acab¨® noveno unas 500 Millas que se decidieron a al esprint tras una bandera roja a cuatro del final provocada por Jimmie Johnson cuando Ericsson, su compa?ero en Ganassi iba lanzado a la victoria con m¨¢s de dos segundos sobre O'Ward. El sueco aguant¨® las embestidas del mexicano en la relanzada y se llev¨® la gloria.
Hasta su infortunio en la segunda parada, no se arrug¨® Palou, tir¨® de galones, present¨® firmemente candidatura y corri¨® a lo campe¨®n. Hab¨ªa 8 vencedores de las 500 en la parrilla de 33, y ante tal cartel, dos curvas tard¨® Palou en coger el liderato, superando a Dixon, que tambi¨¦n dej¨® plaza ante VeeKay. La carrera es muy larga, cierto, pero siempre es mejor dejarse ver en posiciones delanteras para evitar problemas, gestionar degradaciones, consumos y estrategias, tan importantes en el ¨®valo, como la fortuna. Puede dar cuenta de ello el neerland¨¦s, que perdi¨® la trasera del coche en la vuelta 39 y se fue al muro. Ni un cuarto de carrera se hab¨ªa consumido y dec¨ªa adi¨®s. Las 500 Millas no se ganan al comienzo, pero s¨ª se pierden o se complican. Palou tambi¨¦n lo vivi¨® en sus carnes.
Hasta entonces lo que indicaba el desarrollo era una superioridad de los Ganassi, con el espa?ol y Dixon altern¨¢ndose en cabeza, Ericsson, cuarto y Kanaan sexto y los Carpenter del neerland¨¦s y Ed, piloto y propietario del equipo, al acecho. Un guion que no alter¨® el primer paso por garajes, pero s¨ª la bandera amarilla y el abandono Rinus, segundo entonces y uno de los favoritos.
Con la relanzada Dixon y Palou continuaron con su plan, marcar ritmo apoy¨¢ndose en los relevos entre ambos, obligando y estirando al grupo, en el que ya estaban O¡¯Ward y Rosenqvist llevando a los McLaren a la n¨®mina de aspirantes, beneficiados ambos con el accidente de Veekay que tambi¨¦n alarg¨® la segunda paradas en boxes por el ahorro de rodar por detr¨¢s del Safety.
Y esa segunda parada fue letal para Palou. Justo cuando estaba a escasos metros de entrar al garaje, IIlott sufri¨® un accidente y se cerr¨® el pit. Tuvo que pasar de largo sin poder repostar ni cambiar neum¨¢ticos. Se vio obligado en la siguiente vuelta a un repostaje de emergencia, pero sin permiso para cambiar ruedas, que hizo a la siguiente. Tres pasos por boxes en tres vueltas, de ir primero a ponerse 27?. Empezaba una nueva carrera para ¨¦l. A la desesperada con 125 vueltas por delante. Muy complicado.
Lo intent¨® todo Palou, que ya llevaba cinco pasos por boxes, los previstos para toda la carrera, en 75 giros. Alarg¨® hasta el l¨ªmite sus rush, pero ni aun as¨ª. No apareci¨® la bandera amarilla que se necesitaba como el agua de mayo. Por delante segu¨ªan a lo suyo Dixon, O¡¯Ward, Ericsson, Kanaan, Carpenter y se un¨ªa Conor Daly. Las opciones del barcelon¨¦s pasaban por una carrera loca, alguna bandera amarilla a destiempo favorable que le devolviera lo que le quit¨® la de Illot. No fue el caso con la de Grosjean, que aup¨® un poco, insuficiente, al espa?ol, de 27 a 20 pero encerrado en tr¨¢fico. Con tes¨®n, lleg¨® al ¨²ltimo tramo de la prueba ?lex Palou, a las ¨²ltimas 40 vueltas, en la posici¨®n und¨¦cima. Se abr¨ªa una peque?a esperanza para culminar una remontada imposible, de las que est¨¢n tan de moda ¨²ltimamente. Quedaba todav¨ªa una ¨²ltima parada y la esperanza es lo ¨²ltimo que se pierde. En Indian¨¢polis nunca se sabe, como demuestra lo que vino a continuaci¨®n. Primero perdi¨® Dixon todas sus opciones, cuando fue sancionado con un drive through por exceder la velocidad en el ¨²ltimo paso por el pit stop. De primero a 26? y liderato para otro Ganassi, el de Ericsson, que tuvo que sufrir m¨¢s de la cuenta.
A falta de cuatro vueltas Jimmie Johnson provoc¨® una bandera roja cuando Ericsson lideraba c¨®modamente con m¨¢s de dos segundos y ya saboreaba el tradicional trago de leche. Se dibujaba as¨ª una mini carrera al sprint, las 500 Millas reducidas a cuatro vueltas, a las que Palou iba a salir octavo. La fortuna le daba una posibilidad, m¨ªnima, pero al fin y al cabo menos es nada.
La relanzada fue una aut¨¦ntica cacer¨ªa en la que el sueco aguant¨® a O'Ward y le dio el triunfo a Ganassi, al que optaron Dixon hasta su error en boxes y Palou hasta que la carrera, por motivos ajenos a ¨¦l, le descart¨®. Acab¨® noveno el espa?ol, que suma buenos puntos de cara al campeonato, que ya debe ser su principal objetivo, reeditar la corona de 2021. Luego habr¨¢ una nueva oportunidad en las 500 Millas, que en alg¨²n momento debe elegir al espa?ol como su ganador.
