Kimi se cans¨® de ser Raikkonen

Unos dicen que derrocha carisma, otros lo llaman apat¨ªa. Demasiado aut¨¦ntico, o demasiado finland¨¦s. Pero Kimi Raikkonen (Espoo, 42 a?os) fue y es, ante todo, uno de los pilotos m¨¢s r¨¢pidos que ha conocido la F¨®rmula 1, talento puro y velocidad como contrapeso para la era del simulador, las telemetr¨ªas, las mancuernas, el cardio y las redes sociales. Este domingo disputar¨¢ su ¨²ltima carrera en el Mundial y sumar¨¢ 350 grandes premios, m¨¢s que nadie nunca. Se marchar¨¢ despu¨¦s de tres campa?as discretas con Alfa Romeo y Sauber, la misma escuder¨ªa que le introdujo en el Gran Circo a principios de siglo. Suena lejano.

"Si tengo que recordar ahora lo que me pasaba en 2001. No s¨¦ si puedo fiarme de mi memoria. Con ese coche se iba a fondo, ahora se gestionan las carreras de otra manera", comentaba Kimi en una de sus entrevistas pasadas. Confesaba que al inicio se divirti¨® luchando contra ¨ªdolos, "Hakkinen y Salo, esos tipos ¡®viejos¡¯ entonces. Luego llegaron los nuevos, y fueron muchos a?os contra Michael". Raikkonen conoci¨® lo mejor de dos ¨¦pocas, reemplaz¨® a su compatriota en McLaren y fue rival de Schumacher antes de enfrentarse a Alonso y Hamilton.

En Woking logr¨® sus primeras nueve victorias y fue subcampe¨®n en 2003, contra el 'Kaiser', y en 2005, frente a Fernando. En 2007 fich¨® por Ferrari para sustituir a 'Schumi', en una temporada que siempre se recordar¨¢ por las tensiones internas de McLaren. Kimi gan¨® tres de las ¨²ltimas cuatro carreras (y seis durante todo el a?o) y se proclam¨® campe¨®n del mundo en Brasil. El ¨²ltimo que lo hizo con un Ferrari.

Joven y laureado, Raikkonen no gan¨® m¨¢s t¨ªtulos. Falt¨® consistencia. Aunque no merece juicios de valor en este apartado, porque su palmar¨¦s quiz¨¢s tiene todav¨ªa m¨¢s peso y m¨¦rito si se incluyen en el balance las estad¨ªsticas nocturnas, la jarana, los excesos y los helados. No, Kimi no sigui¨® una vida monacal. Eso no le impidi¨® fijar la cuenta en dieciocho victorias, aparte de su corona y los dos subcampeonatos, m¨¢s el cetro de rey de Spa-Francorchamps (cuatro veces ganador); antes de abandonar la F1 de forma s¨²bita en 2009. Se dedic¨® a los rallys, y a esas otras cosas que tambi¨¦n hac¨ªa cuando compet¨ªa. Entonces, por fin, a tiempo completo.

Un regreso deseado

"A veces es bueno salir de las pol¨ªticas que est¨¢n detr¨¢s de la F1 y todo ese sinsentido que rodea las carreras y el deporte", reconoc¨ªa recientemente a AS. Pero volvi¨®, menos mal. Primero con Lotus, con quien logr¨® triunfos consecutivos en Abu Dhabi 2012 y Australia 2013 que confirmaron que la talla var¨ªa, pero la clase no se pierde. Regres¨® tambi¨¦n a Ferrari en 2014, confirmando que se puede, con Alonso. Le toc¨® vivir a?os valle en esta segunda etapa de Maranello. Contra Fernando no pudo, con Vettel al inicio tampoco, si bien acab¨® 2018 al mejor de sus niveles y gan¨® una ¨²ltima vez en Estados Unidos. El SF71H de aquella tarde descansa en el garaje de su casa, en Suiza.

"Ya no soy tan joven", dice. Confiesa que lleva "a?os con dolor en el cuerpo". Su principal motivaci¨®n hoy es la familia, viaj¨® a la mayor¨ªa de las carreras recientes con su mujer, Minttu, de 35 a?os, y sus dos hijos peque?os, Robin (6 a?os) y Rianna (4). "Me gustan las carreras, pero eso conlleva muchas m¨¢s cosas aparte de las carreras. Si pudiera venir aqu¨ª, correr y ya est¨¢, ser¨ªa perfecto. Pero esto funciona as¨ª. Yo quiero pasar el m¨¢ximo tiempo posible con mi familia", cerr¨® su ¨²ltima conversaci¨®n con AS. Dejaba entrever cu¨¢l ser¨ªa el siguiente paso.

"A Kimi se le echar¨¢ de menos. Me gusta mucho su manera de querer este deporte. Ha estado muchos a?os en la F1, es muy honesto, siempre, y esa parte de Kimi me gusta. Fuera de su m¨¢scara, de ser fr¨ªo, de 'Iceman', hay una muy buena persona que una vez conoces, de vez en cuando, fuera de los circuitos, en aeropuertos o restaurantes. Cuando no est¨¢s en el entorno del paddock Kimi es una persona diferente. Ha sido incre¨ªble para la F1 y se le echar¨¢ de menos porque tiene su car¨¢cter ¨²nico", dice Alonso, su rival: "Es diferente".