Brabec impone su ley y primera buena noticia para Barreda
Victoria del americano, la segunda, que le hace aumentar su liderato en 20 minutos sobre Quintanilla. Segundo puesto para el espa?ol con otra Honda.
"Cuando sales delante en una etapa de arena siempre vas a perder tiempo". Bien lo sab¨ªa Toby Price, que como ganador de la anterior jornada le tocaba empezar la siguiente camino de Riad abriendo pista. Y lo pag¨®, claro. Adem¨¢s, era la que comenzaba una nueva parte del Dakar, las de las dunas, con lo que de arena iban bien servidos. ?En qu¨¦ se tradujo eso? En 16 minutos perdidos para el australiano respecto al s¨®lido l¨ªder de las motos, Ricky Brabec, que volvi¨® a demostrar por qu¨¦ lo es ganando la etapa.
Al americano le vino de perlas su cuarta posici¨®n de salida para ir siguiendo las trazas buenas a un ritmo con el que se coloc¨® primero en el Km 213 de los 478 que ten¨ªa la sexta especial, la m¨¢s larga en lo que llevamos de competici¨®n, y que complet¨® en algo m¨¢s de cuatro horas y media. Eso s¨ª, tuvo que esperar hasta el final para poder celebrarlo, porque por detr¨¢s ven¨ªa otra Honda amenazando su victoria con un ritmo final mejor que el suyo, y no era otra que la de Barreda, que se qued¨® a 1:34 de adjudicarse la etapa.
El de Castell¨®n roz¨® el palo, pero se asegur¨® una sobresaliente segunda plaza y su primera gran alegr¨ªa en Arabia despu¨¦s de pasarlo tan mal con la costilla fisurada con la que se present¨® a la salida de Yeda y con un par de ca¨ªdas que le lastimaron a¨²n m¨¢s. As¨ª, fue un resultado recibido como agua en el desierto, nunca mejor dicho, y que fue posible por los problemas de Kevin Benavides, que se par¨® con problemas a pocos kil¨®metros de la meta cuando ven¨ªa a 25 segundos de su compa?ero estadounidense.
Y tambi¨¦n sufri¨® algo parecido Price qued¨¢ndose parado a unos 50 km del final, aunque en su caso pudo retomar r¨¢pido la marcha y el incidente le cost¨® 10 minutos de esos 16 que se dej¨® en la meta, y adem¨¢s la segunda posici¨®n, ahora en manos de Quintanilla. El chileno se dej¨® cinco minutos, ventaja suficiente para ser el primero en ir a la caza del l¨ªder, aunque, eso s¨ª, a una distancia que ya empieza a ser bastante seria: 20 minutos. Dos victorias y un margen que invita a so?ar, Brabec impone su ley.