Bottas gana la ¨²ltima carrera; Alonso, 9? y Sainz abandona

Bikini rojo, gafas de sol oscuras Gucci, m¨®vil en la mano para hacer mil fotos, a su lado bailan otras dos chicas guapas y unos cuantos hombres con la camisa desabrochada y zapatos de ante en el yate de la derecha mientras suena Camila Cabello, Havana, ooh na-na se escucha con el volumen a tope. Alguien pone un poco de cordura y hace callar el equipo de sonido, faltan pocos minutos para que los coches rueden en el gran premio del a?o en el que menos importan los coches, los pilotos¡­ Abu Dhabi, tierra de escenarios de cart¨®n piedra donde venir a ver y ser visto, a lucir gafas de pasta roja como Lapo Elkam, pelo cano y barba de plata como Flavio Briatore o camisa amplia de rayas y Nike blancas de tenis como Maria Sharapova¡­ por ejemplo.

Aqu¨ª se viene a seguir haciendo negocios o a cenar con amigos y apoyar a sus pilotos, Rey Juan Carlos I dixit. Es incre¨ªble como las gradas y los hoteles de alrededor lucen llenos y brillantes en la ¨²ltima carrera del a?o en la que todo est¨¢ decidido hasta quien iba a ganar despu¨¦s de que Valtteri Bottas lograse la pole por delante de Lewis Hamilton. Si el finland¨¦s sal¨ªa primero de la primera curva ten¨ªa la victoria asegurada y la posibilidad ¨ªnfima de ser subcampe¨®n asegurada. Solo eso. Porque Sebastian Vettel, en el circuito en el que pas¨® de ni?o a campe¨®n, termin¨® tercero y subcampe¨®n por primera vez en sus tres a?os con Ferrari. Qu¨¦date, le dec¨ªan a Alonso¡­ y ser¨¢s campe¨®n. Quiz¨¢, quiz¨¢ ¨¦l s¨ª, pero no Vettel. O quiz¨¢ tampoco. ?Quien sabe? Aunque son muchos los que lo dicen, incluso vestidos de rojo.

Tampoco tiene mucho que sonre¨ªr a¨²n el asturiano, doblado por los Mercedes con los que pretende luchar el pr¨®ximo a?o. Mucho camino, mucho, demasiado a¨²n por andar para llegar al destino so?ado. Fernando acab¨® el a?o en los puntos, noveno cuando sal¨ªa und¨¦cimo tras abandonar Ricciardo y pasar a Massa en la salida, ver como el brasile?o volaba por encima de su McLaren con el motor Mercedes de su Williams en la primera vuelta y prepararse el adelantamiento despu¨¦s de la salida de boxes para acabar haci¨¦ndolo por rebufo y marcharse en busca de un imposible Esteban Ocon. Noveno. Y decimoquinto en el Mundial con once abandonos. Diecisiete puntos. Fernando. Alonso. Necesitamos mucho m¨¢s.

Como m¨¢s y mejor necesita Carlos Sainz de su equipo. El madrile?o iba camino de luchar por el puesto con el asturiano cuando al entrar a boxes le ajustaron mal la rueda delantera izquierda y tuvo que abandonar previa demostraci¨®n de habilidad y talento en el t¨²nel de salida de boxes. Hasta la tuerca en su hoja de ruta hacia el t¨ªtulo como su mentor astur. ?Recuerdan Hungr¨ªa 2006? Mucho tambi¨¦n que mejorar para Renault y sus motores, esos en los que confiamos para el pr¨®ximo a?o.

M¨¢s all¨¢ de la lucha de Alonso y Massa, el abandono de Sainz, la batalla que no fue entre Bottas y Hamilton y la lucha entre Stroll y Grosejan al principio poco m¨¢s, salvo que al final Verstappen (no pod¨ªa faltar el holand¨¦s por estas l¨ªneas) lo intent¨® contra Raikkonen y su Ferrari. Le faltaron vueltas.

Igual que quiz¨¢ a este campeonato le sobraron carreras. Termina ya. Por fin. Hasta siempre 2017, con Hamilton campe¨®n, Ferrari perdiendo una oportunidad, Alonso de abandono en abandono hasta la esperanza final y Sainz ya donde debe estar antes de tiempo. Que llegue ya el pr¨®ximo a?o. Por favor. Que todo sea mejor. M¨¢s bonito¡­ Todo esto pasa, mientras se hace de noche en Abu Dhabi y en el yate de la derecha, junto al paddock, vuelve a sonar la m¨²sica. Havana, ooh na-na¡­