Buggys UTV: una forma asequible de correr el Dakar

Correr en coche el Dakar se ha convertido en algo prohibitivo. Para asumir la prueba con ciertas garant¨ªas, pero sin grandes opciones deportivas, se necesita un desembolso de unos 300.000 euros, al alcance de muy pocos. Y si a uno le toca la Loter¨ªa, puede optar por alquilar un Mini a raz¨®n de 600.000 euros s¨®lo por las dos semanas de la prueba. Por ello, el n¨²mero de inscritos en esta categor¨ªa lleva descendiendo desde hace a?os. En la edici¨®n 2017, tan s¨®lo 77. Y la soluci¨®n son los UTV, una categor¨ªa de buggys que se estrena este a?o y que reducen a la mitad el coste de participaci¨®n.

El coste de participaci¨®n con uno de estos buggy oscila entre 140.000 y 160.000 euros. La organizaci¨®n del Dakar esperaba contar con una 20 de ellos en la salida, pero al final s¨®lo se consiguieron 8, 5 Polaris y 3 Yamaha. Los participantes con los veh¨ªculos japoneses, entre los que se encontraban los espa?oles Joan Font y Santiago Navarro, y el andorrano Andreu Cachafeiro, se retiraron en las primeras etapas, y s¨®lo quedan en carrera los Polaris, que etapa a etapa sustituyen numerosas piezas para evitar roturas.

Uno de los padrinos de esta nueva categor¨ªa es Stephane Peterhansel. Monsieur Dakar compiti¨® en las Bajas de Italia y Portalegre en Portugal con un Yamaha copilotado por su mujer, Andrea Mayer (que fue piloto del Dakar en motos, coches y camiones), para verificar la validez de los buggys. De hecho, Peterhansel est¨¢ desarrollando un kit para mejorar la competitividad y fiabilidad del Yamaha cara al Dakar 2018. El primer intento ha resultado fallido, pero muchos ven en esta v¨ªa la soluci¨®n a la sangr¨ªa de inscritos en coches que se viene produciendo desde hace a?os.