Verstappen y su debut con Red Bull: "Tres noches sin dormir..."
Max reconoce sus nervios antes de subirse al RB12, pero dice no sentir presi¨®n: "Mientras pise el acelerador no hay nada de qu¨¦ preocuparse".
Todos lo hemos sentido alguna vez. Ese gusanillo que no para quieto en el est¨®mago, que recorre tu cuerpo hasta llegar a la cabeza para asentarse en ella durante toda la noche y que no deja de emitir pensamientos a tu mente. Cuando eso ocurre es que algo grande est¨¢ a punto de pasarte, y as¨ª se encuentra ahora Max Verstappen, ante la oportunidad de su vida. En dos d¨ªas estar¨¢ ejerciendo como piloto de Red Bull en el paddock de Barcelona y en tres se subir¨¢ al RB12.
Todo un reto que le llega muy pronto y que le han ocasionado unos nervios fruto de la emoci¨®n que no le han dejado descansar bien. "No he dormido durante tres noches", asegura en ¡®Ziggo Sport¡¯, una televisi¨®n de su pa¨ªs, donde cuenta c¨®mo fue su llegada a Milton Keynes: "Estaba muy motivado porque sabes que es un gran equipo. Cuando llegu¨¦ all¨ª no pude parar, tuve mucho trabajo en el simulador y pas¨¦ todo el tiempo que pude con el equipo".
Unos nervios comprensibles que, sin embargo, no se traducen en mayor presi¨®n para el holand¨¦s, ni siquiera al ver lo que le ha pasado a Kvyat: "Mientras pise el acelerador no hay nada de qu¨¦ preocuparse, eso es lo que necesito hacer. Si no lo haces puedes esperar estar fuera. As¨ª que tenemos que asegurarnos de que lo hacemos. La presi¨®n no cambia, siempre se trata de hacerlo lo mejor posible. Ya sea en un coche menos competitivo, o en uno mejor, eso no cambia".
Adem¨¢s, Verstappen aprovech¨® que estaba ante su p¨²blico para desvelar el proceso de su ascenso a la escuder¨ªa energ¨¦tica. "La carrera de Rusia no sali¨® seg¨²n lo planeado por Red Bull. All¨ª ve¨ªa a Marko caminando, 'sent¨ª' algunas conversaciones y lentamente todo se mov¨ªa a mi favor. Un poco, sentimos que llegaba. Luego, fuimos a Austria, hablamos con Helmut y el acuerdo lleg¨® con bastante rapidez", revela. Todo ha pasado muy r¨¢pido, pero Max, aunque con sue?o, est¨¢ listo para seguir deslumbrando.