Lorenzo marca el ritmo y Suzuki debuta con De Puniet

Se encuentra tan c¨®modo en Montmel¨®, donde a¨²n huele a victoria de Yamaha, que Jorge Lorenzo ha cerrado el segundo test oficial MotoGP de la temporada con su nombre y apellido en lo m¨¢s alto de la hoja de tiempos. Eso s¨ª, el experimento, en el que las marcas siguen adelante con el desarrollo de sus prototipos, ten¨ªa truco: las Honda de Dani Pedrosa, Marc M¨¢rquez y ?lvaro Bautista no participaban, pues han preferido hacerlo desde ma?ana (tres jornadas) en MotorLand.

Lorenzo fue el m¨¢s r¨¢pido con su 1:41.904 (1:40.893 marcaba Pedrosa en la pole del s¨¢bado, aunque con diferentes condiciones clim¨¢ticas), pero tuvo que compartir foco con Randy de Puniet, a quien correspond¨ªa subirse a la Suzuki con la que la marca japonesa pretende desembarcar de nuevo en el Mundial. Ese regreso ser¨¢ oficial en 2015, como ha comunicado oficialmente Suzuki, pero De Puniet trabaja ya como piloto probador. El primer fruto fue esperanzador: se qued¨® a 0.772 de Lorenzo y s¨®lo una CRT, la del intratable Aleix Espargar¨®, qued¨® por delante de ¨¦l.

Mientras Lorenzo volaba, Valentino Rossi trataba de solucionar los problemas con el frontal de su Yamaha. Seg¨²n el director del equipo, Massimo Meregalli, no hay novedades respecto a la posible introducci¨®n del cambio seamless, que tampoco se probar¨¢ en Arag¨®n. La gran novedad de la pasarela Yamaha ha sido el nuevo chasis que ha lucido Cal Crutchlow, que ha tratado de quitarse el mal sabor de boca de su ca¨ªda del domingo con el quinto mejor tiempo de la jornada.

En Ducati, mientras, comparaban la Desmosedici GP13 con la Laboratorio; Bradl defend¨ªa el honor Honda con los problemas de agarre como caballo de batalla; y entre las CRT trataban de dar con una p¨®cima m¨¢gica que mitigue el dominio absoluto de Aleix Espargar¨®, centrado en la suspensi¨®n y el chasis de su ART. Quiere seguir mejorando. M¨¢s, si es que es posible.