El t¨ªtulo de Fernando Alonso fue a parar a manos de Vettel
El piloto espa?ol fue el mejor del a?o y con un Ferrari poco competitivo luch¨® hasta la ¨²ltima carrera, pero finalmente se qued¨® a tres puntos del alem¨¢n.

Caminaba con el recuerdo de un volante lanzado con rabia dentro del coche, mientras el espa?ol viv¨ªa en ¨¦xtasis con l¨¢grimas en los ojos. Instante eterno de gloria. Y es que hubo un momento en el que pareci¨® que la suerte iba a cambiar, que el destino estaba viajando en c¨ªrculo hasta ponerse del lado de su antiguo amigo. Fue en Valencia, en la mejor carrera que la afici¨®n espa?ola recuerda, la que quiere que gane el suyo, ¨¦sa que ha nacido a este deporte de la mano de un campe¨®n de ¨¦poca al que se le van acabando los a?os para convertirse en leyenda universal.
Esa tarde de junio, Fernando Alonso ganaba el GP de Europa despu¨¦s de una espectacular remontada desde la und¨¦cima plaza de la parrilla con un monoplaza menor, mientras sus dos grandes rivales, los otros dos genios, se quedaban varados como una ballena en el Mediterr¨¢neo, gigantes rotos. Sebastian Vettel y Lewis Hamilton no terminaron aquel gran premio mientras en lo alto del podio, el espa?ol lloraba con dos rivales de otro tiempo compartiendo espacio, Michael Schumacher y Kimi Raikkonen, aqu¨¦llos a los que logr¨® vencer.
Despu¨¦s de la haza?a que lleg¨® precedida de otra en Malaisia bajo la lluvia, Alonso fue incrementando su ventaja en el liderato del Mundial hasta llegar a los 42 puntos de mitad de temporada. Pero en el deporte a veces, casi siempre en realidad, se impone la l¨®gica, el curso normal de los acontecimientos y en ese terreno siempre ganan los mejores; en la F¨®rmula 1, los que disponen de un coche superior y un piloto con talento. Y ah¨ª Vettel est¨¢ resultando invencible. El fracaso de la siempre esperada evoluci¨®n de Ferrari y los dos abandonos en la segunda parte del a?o acabaron por cambiar el trofeo de manos.
Aunque casi todo el paddock coincide en se?alar que Fernando ha sido el mejor, lo cierto es que finalmente ha sido un alem¨¢n el que se ha revelado como el piloto que m¨¢s joven ha logrado tres t¨ªtulos en la historia de este deporte. Y adem¨¢s de manera consecutiva. A partir de aqu¨ª pueden resultar m¨²ltiples interpretaciones, pero el dato objetivo es ¨¦se y es de ley reconocer el m¨¦rito a un piloto como Vettel, que ya se ha convertido en uno de los m¨¢s grandes de siempre, t¨ªtulos mediante. Aunque no le ha sido tan f¨¢cil esta vez como las anteriores.
Porque hemos vivido, probablemente, la mejor temporada de la historia de la F¨®rmula 1 con igualdad m¨¢xima al comienzo y un rival superlativo, adem¨¢s de un McLaren muy veloz. Batalla hubo. Y dura.
Alonso fue el piloto que logr¨® un mejor promedio de clasificaci¨®n a lo largo de la temporada (3,3) por el 4,4 de Vettel, pero Seb con cinco victorias por las tres del asturiano. Ambos con dos abandonos. El segundo de Alonso, en Suzuka, apenas un roce entre neum¨¢ticos, simboliz¨® el momento en el que la suerte se puso de nuevo del lado del peque?o alem¨¢n.
En dos carreras magn¨ªficas, como Abu Dabi y Brasil, Vettel sufri¨® varios accidentes de los que sali¨® pr¨¢cticamente ileso. Paradojas del destino de una temporada que, al final, fue un duelo entre los mejores. Y fue as¨ª como Vettel gan¨® el t¨ªtulo de Alonso, aunque a casi todos nos qued¨® la sensaci¨®n de que el desenlace bien pudo ser el opuesto. Y esa esperanza es la que debe alimentar nuestras ilusiones para un Mundial 2013 que ya est¨¢ m¨¢s cerca.
El piloto del a?o. Alonso
Aqu¨¦l que haya visto a Fernando Alonso en un circuito de F¨®rmula 1 comprender¨¢ que este asturiano es un aut¨¦ntico creador de sue?os. Alonso es el piloto con mejor rendimiento en carrera de este a?o, mientras que su Ferrari ha sido el cuarto coche por detr¨¢s de McLaren, Red Bull y Lotus. Datos, m¨¢s all¨¢ de interpretaciones... A veces hay que destacar a los mejores aunque no hayan ganado y Alonso este a?o ha sido el mejor. Sin duda. Ver al primer piloto de la escuder¨ªa m¨¢s legendaria de la F¨®rmula 1 lanzarse como un diablo a por sus rivales en las primeras vueltas m¨¢s intensas que se recuerdan quedar¨¢ para siempre en la memoria de los buenos aficionados... aunque no haya logrado el t¨ªtulo. El asturiano ha terminado a tres puntos de Vettel, ha ganado tres carreras, ha completado trece podios... y sin ninguna vuelta r¨¢pida. Samurai capaz de luchar con espadas frente a armas de fuego.
La gran decepci¨®n. 'Schumi'
Hace unos d¨ªas en una entrevista en este diario, Pedro de la Rosa adjudicaba a la escuder¨ªa HRT el t¨ªtulo de la decepci¨®n del a?o. Autocr¨ªtica. Es cierto que el equipo espa?ol, ya desaparecido, no ha dado la talla pero no lo es menos que han hecho todo lo que han podido y mucho m¨¢s. No as¨ª Michael Schumacher. Un podio en Valencia es el triste balance de un heptacampe¨®n que termin¨® su andadura en la F-1 dej¨¢ndose pasar por su sucesor. Adi¨®s y gracias.
El adelantamiento. Raikkonen
Probablemente, la elecci¨®n m¨¢s complicada. Y es que en un a?o r¨¦cord de adelantamientos ha habido muchos y muy buenos para elegir. Pero quiz¨¢ el mejor de todos si unimos complejidad, rival, circuito, curva... sea el que le hizo Kimi Raikkonen en pleno Eau Rouge (Spa) a Michael Schumacher. Ocho t¨ªtulos mundiales en una batalla en la que el finland¨¦s, que no suele ser muy agresivo, sac¨® todo su talento para destrozar al que un d¨ªa fue Kaiser de la F-1. Ha habido otros, como los dobles de Alonso en India a los dos McLaren en la primera vuelta, o a Massa y Webber en Brasil, el del brasile?o a su compatriota Senna en Singapur o el de Hamilton a Vettel en Austin, pero esta vez gana Iceman.
La carrera del a?o. Brasil
Probablemente para un espa?ol la mejor carrera del a?o haya sido la de Valencia y para un alem¨¢n, la de Abu Dabi. As¨ª que me intento vestir el traje de periodista para elegir la carrera del a?o y ah¨ª tenemos la ¨²ltima, la de Brasil. El gran premio de Interlagos tuvo absolutamente de todo: lluvia, adelantamientos imposibles, remontadas improbables, dos campeones del mundo distintos y finalmente el t¨ªtulo para Vettel en un nuevo podio inimaginable de Alonso. As¨ª fue un gran premio que pasar¨¢ a la historia, en el que Vettel se pudo quedar varado en la primera curva, pero logr¨® seguir y remontar; en el que Alonso sal¨ªa lejos del objetivo, pero consigui¨® llegar segundo; en fin, un gran premio que incluso dur¨® semanas con la pol¨¦mica de las banderas amarillas.
Lo peor del a?o. Bahrain
En un a?o en el que lo ¨²nico negativo deportivamente tiene que ver con pol¨¦micas sobre banderas, fondos planos que se permiten y despu¨¦s se prohiben, morros tan flexibles como los alerones delanteros y tretas al l¨ªmite del reglamento, es decir algo que siempre ha habido y habr¨¢ en la F-1, lo peor es extradeportivo: el GP de Bahrain. AS tuvo la oportunidad de descubrir como a pocos kil¨®metros del circuito en el que los pilotos disputaban la carrera ante escaso p¨²blico, hab¨ªa aut¨¦nticas batallas campales en una represi¨®n que a¨²n hoy pervive y por la que ha habido decenas de muertos. El deporte no debe ir a pa¨ªses en conflicto. Respeto.
Lo mejor del a?o. La igualdad
En los siete primeros grandes premios de la temporada ganaron siete pilotos distintos. Las razones: Pirelli y la prohibici¨®n de los escapes sopladores. Fue en Valencia cuando repiti¨® Alonso y a partir de ah¨ª se descubri¨® el espejismo de la igualdad. Comenz¨® ganando Button, despu¨¦s Alonso, Rosberg se estren¨® en China, Bahrain vivi¨® el primer triunfo del a?o para Vettel, Maldonado tuvo su minuto de gloria en Barcelona, Webber repiti¨® para Red Bull en M¨®naco, venci¨® Hamilton en Canad¨¢ y, por fin, repiti¨® Alonso. En esas carreras tambi¨¦n pudo ganar un Sauber, como P¨¦rez, o el Lotus de Raikkonen. Pero lo cierto es que a partir de Valencia vencieron los de siempre y la igualdad inicial se difumin¨®.