F¨®rmula 1 | La intrahistoria
Ayrton Senna sigue vivo en un lugar de Morumbi
El cementerio de Morumbi es el campo santo donde descansan los restos del a?orado tricampe¨®n brasile?o, fallecido en ?mola en 1994. Su tumba, siempre con flores frescas, recibe miles de visitas de aficionados y pilotos

Leer y encontrar la emoci¨®n, leer un solo nombre, escrito en una placa de metal dorado que brilla con los rayos de sol que atrapan la leyenda. Ayrton Senna Da Silva. Y dos fechas, una estrella, 21-3-1960, y una cruz, 1-5-1994. Nada pode me separar do amor de Deus. Hay hombres que pueden ganar a la muerte y el brasile?o es uno de ellos. Senna sigue viviendo en un lugar de Morumbi, el cementerio m¨¢s bonito del mundo, un mar verde donde descansa el piloto con m¨¢s carisma que jam¨¢s se ha conocido.
"Es ah¨ª, donde hay m¨¢s flores", dice una se?ora. All¨ª, en el centro del cementerio, justo debajo de un ¨¢rbol que plantaron el d¨ªa de su funeral, una planta que crece y crece como la leyenda del tricampe¨®n que dej¨® de existir en este mundo, pero sigue presente en los corazones de millones de personas. "Para m¨ª es un honor trabajar en este sitio, donde est¨¢ el m¨¢s grande. A veces antes de cada gran premio suelen venir a visitarle Massa, Rubinho y otros pilotos brasile?os. Una vez vino Schumacher. ?Su sobrino? No, nunca le he visto. ?Hamilton? No, no tampoco", dice Jes¨²s, uno de los operarios que cuidan la tumba de Ayrton.
El campo santo es una aut¨¦ntica alfombra de flores, hace dos d¨ªas que se celebr¨® el d¨ªa de Todos los Santos. A veces otras se marchitan. Pero no las del campe¨®n. "Ayrton siempre tiene flores, normalmente casi todo el mundo, pero ¨¦l, siempre, parece que las mantuviera siempre frescas, pero no, es que viene mucha gente a visitarlo, a rendirle homenaje", explica Joao Luis, mirando al suelo.
Este a?o Ayrton, que se hac¨ªa llamar con el apellido de su madre, hubiera cumplido cincuenta a?os y la melancol¨ªa es eterna en Sao Paulo. En esta ca¨®tica ciudad, la avenida de circunvalaci¨®n m¨¢s importante recibe su nombre y todos suspiran al recordar a su ¨ªdolo.
Estela, que vende camisetas de homenaje al piloto, recibe un escalofr¨ªo en el alma al pensar en ¨¦l: "Le conoc¨ª, era un hombre de verdad, de esos que con mirarte ya sabes que son capaces de hacerte feliz. Siempre vivir¨¢ para mi". Senna es eterno y a¨²n vive, en un lugar de Morumbi, donde el sol brilla reflejado en una placa dorada que lleva su nombre.