F車rmula 1 | Un a?o de cambios
Una temporada 2009 cargada de inc車gnitas
En todas las pretemporadas de F-1 hay una serie de interrogantes cuando se piensa en el siguiente Mundial, pero pocas veces la situaci車n estuvo menos clara que la de 2009. La crisis econ車mica, los cambios en el reglamento y el rendimiento de algunos pilotos y equipos siembran muchas dudas.
El Campeonato del Mundo 2008 termin車 hace escasos dos meses, y unos d赤as despu谷s ya hab赤a comenzado la pretemporada 2009. Algunos pilotos han disfrutado de unos d赤as de descanso, pero lo cierto es que la palabra vacaciones tiene poco encaje dentro del engranaje de la F車rmula 1. Las escuder赤as ya trabajan a ritmo fren谷tico para preparar una temporada 2009 cargada de inc車gnitas.
Cada nueva campa?a presenta incertidumbres que se van resolviendo con el paso de las carreras. Siempre ha sido as赤 y la pr車xima no iba a ser una excepci車n, pero en esta ocasi車n las dudas son tantas y tan significativas que s車lo los m芍s atrevidos se atreven a realizar un pron車stico sobre lo que puede ocurrir a partir del pr車ximo 29 de marzo, fecha del primer gran premio del a?o en Australia. Hay quien habla, incluso, del inicio de una nueva era, dirigiendo la tendencia a diferentes puntos seg迆n el caso: la era Lewis Hamilton, la era de la ecolog赤a, la era de la crisis...
Lo indiscutible es que es mucho e importante lo que cambiar芍 a partir de 2009. La nueva reglamentaci車n t谷cnica puede dar la vuelta a una tortilla que en los 迆ltimos a?os siempre ca赤a del mismo lado, el del peso de las grandes escuder赤as del certamen. Lo m芍s razonable es suponer que los mejores lo seguir芍n siendo, que McLaren, Ferrari o BMW deben marcar la pauta por potencial y presupuesto; sin embargo, no es menos cierto que los cambios t谷cnicos dar芍n una oportunidad a las escuder赤as de segundo nivel para ser una aut谷ntica alternativa al poder establecido de los equipos de referencia en la parrilla.
Todo esto ser芍 as赤 siempre y cuando la crisis financiera mundial no sea demasiado cruenta con la F-1. Las escuder赤as dependen tanto de las grandes empresas automovil赤sticas como de sus patrocinadores, todos ellos afectados por una coyuntura poco propicia para las multimillonarias inversiones que requiere una competici車n tan exigente como la F-1.
Resultar赤a inocente pensar que las dificultades van a ser ajenas a los grandes premios, as赤 que aqu谷llos que resistan mejor el envite pueden disfrutar de una ventaja a?adida que en estos momentos es dif赤cil de adivinar y cuantificar. El caso del adi車s de Honda puede ser tan s車lo la punta del iceberg y todas las escuder赤as deben apretarse el cintur車n para no seguir el mismo camino del gigante japon谷s.
Tampoco el orden establecido entre los pilotos se antoja tan s車lido como para catalogarlo de inamovible. El nuevo campe車n mundial lo ha sido por los pelos y en unas condiciones que para nada hablan de su consistencia como n迆mero uno, lo que le convierte en m芍s vulnerable ante sus rivales. Hamilton deber芍 demostrar en el nuevo a?o que su 谷xito no es circunstancial, aunque para hacerlo deber芍 enfrentarse a sus competidores de Ferrari, precisamente en el otro platillo de la balanza: deseosos por evitar la hegemon赤a del brit芍nico.
Y en plena l赤nea de fuego, Fernando Alonso. Su final de 2008 al volante de un Renault muy evolucionado ha abierto la puerta a la esperanza, pero las dudas s車lo se disipar芍n por completo a golpe de victoria. Otro aliciente m芍s para una temporada que promete emociones fuertes.