Titan Souls

Titanes de Pixeles

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Hace una d¨¦cada, Fumito Ueda y su equipo de genios nos regal¨® una aut¨¦ntica obra maestra llamada Shadow of the Colossus. Un t¨ªtulo con tant¨ªsima fuerza visual y jugable que diez a?os despu¨¦s sigue siendo recordado y solo envejece en su aspecto visual, nunca en el jugable, ya que la f¨®rmula que plantearon fue tan ¨²nica como personal: Un errante en tierra extra?a enfrent¨¢ndose a una serie de colosos en pos de devolverle la vida a una chica. Para ello cont¨¢bamos con armas b¨¢sicas como una espada y un arco con flechas, y nuestra capacidad de analizar cada jefe final, detectar sus patrones y descifrar la manera de hallar sus puntos d¨¦biles.

Eso era todo, un personaje contra unos colosos. Y eso es lo que el indie Titan Souls plantea en su premisa: Un personaje contra una serie de Jefes Finales. Sin fases de por medio, sin niveles intermedios de enemigos menores. Solo nosotros y los Final Bosses, ocultos en casas a las que acceder tras deambular por un mapeado isom¨¦trico y puro pixel-art. Nacido de una premisa concebida en 72 horas por un tr¨ªo de amigos para un evento, el Souls de su t¨ªtulo lo acerca a la saga de From Software por el hecho de que morir r¨¢pido y continuamente es una constante, ya sea nosotros o el enemigo. Porque moriremos muchas veces, aunque tambi¨¦n es posible que nos pasemos varios jefes de un tir¨®n en apenas segundos, mostrando los dos extremos a los que Titan Souls puede llegar.

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La jugabilidad es tan b¨¢sica como el tener dos botones, uno para esquivar rodando y correr, y otro para lanzar una flecha que puede volver a nosotros si mantenemos el bot¨®n pulsado, lo que brinda en realidad dos tipos de ataque. Y el gameplay es llegar al enemigo, estudiar sus patrones y colocarnos en esa posici¨®n id¨®nea que todos los escenarios tienen para dispararle una flecha que lo mate de un solo toque. Porque todo en este juego est¨¢ reducido a uno: Nos pueden matar de un solo golpe, podemos cargarnos al enemigo de un solo tiro. En ocasiones encontramos algunos titanes que se resisten ¨Cel cerebro en la pompa de mocos, ya ver¨¦is lo que pasa si fallamos mucho-, y otros que la clave est¨¢ en el escenario ¨Cel de las paredes y el veneno. Pero siempre hay que recordar que tensar el arco nos exige quedarnos quietos, igual que convocar la flecha de vuelta, y eso no es buena idea teniendo en cuenta el continuo patr¨®n de movimientos de cada jefe.

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Est¨¢ claro que la premisa de ¡®killshot¡¯ para ambas partes de la ecuaci¨®n dividir¨¢ a los usuarios e impacientar¨¢ a los que odien morir de un solo golpe, pero lo cierto es que este t¨ªtulo puede parecer ser tan dif¨ªcil como de repente ver por nosotros mismos que es justo lo contrario: Extremadamente f¨¢cil. Todo en Titan Souls depende de dos factores: Timing y colocaci¨®n. Aprender los patrones de los titanes es la primera parte del combate, pero estos solo revelar¨¢n su punto d¨¦bil en apenas una fracci¨®n. Si estamos mal colocados no acertaremos y tendremos que seguir rodando, esperando a la ocasi¨®n id¨®nea. Si estamos en el sitio correcto y acertamos con el timing exacto, una pelea en la que hemos muerto 30 veces seguidas se convierte en una batalla en la que de un solo golpe matamos gigantes. De hecho a veces puede que sea a los pocos segundos de empezar. Habr¨¢ quien sude sangre con unos pocos y de repente se pase varios sin morir, lo que hace que lo extremo de esta propuesta no cree un juego equilibrado. De hecho esa es su gracia y no lo oculta para nada. Titan Souls deja sus cartas bien claras desde el inicio rese?ando que aqu¨ª hemos venido a jugarnos el tipo en plan extremo hasta que demos con la clave, y de nosotros depende aceptarlas o no seguir. Si nos gustan los retos intensos y desafiantes, este lo es; si lo que queremos es subir de nivel y progresar con una curva estable de una manera equilibrada, mejor buscamos en Steam otra cosa.

Cada combate es un puzle que descifrar sin m¨¢s, y brinda esa cierta sensaci¨®n de alivio cuando terminamos con un tit¨¢n que nos ha puesto las cosas dif¨ªciles, viendo c¨®mo deb¨ªamos hacerlo. Quiz¨¢s que el tema de derrotarlos con un solo golpe nos haga pensar m¨¢s en lo f¨¢cil que era, pero teniendo en cuenta la mec¨¢nica de poder convocar esa flecha disparada de vuelta hacia nosotros, es un gustazo clavarla a posta en una pared tras el enemigo, situarnos en el punto justo, convocarla y atravesarle el punto d¨¦bil con ella viendo como cae de forma m¨¢s elaborada que simplemente dispar¨¢ndole de frente.

Aunque es cierto que a veces podemos ganar la contienda sin saber exactamente c¨®mo le hemos dado, de pura suerte con una flecha en principio desviada y el enemigo yendo hacia donde no deb¨ªa en ese instante. Un detalle que lo aleja de la grandeza de Shadow es que los escenarios, si bien llenos de detalles, no sirven m¨¢s que para interconectar los Hubs en que se alojan los enemigos y est¨¢n muy desaprovechados en ese aspecto. Y aunque los puntos de respawn son inmediatos y suelen estar cerca de las guaridas, otros se encuentran demasiado lejos, por lo que recorrer 20 segundos de camino una y otra vez en un enfrentamiento en que morimos continuamente se hace muy pesado, y no se entiende por qu¨¦ el respawn no es directamente en la guarida de estos.

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En s¨ª Titan Souls no exige que nos carguemos a todos los monstruos, ya que es posible pasarnos el juego derrotando a una cantidad menor de la totalidad. Pero los amantes de sacar todos los secretos seguro que querr¨¢n ver a todos los titanes.  Esto nos lleva al tema de la rejugabilidad, ya que la experiencia en s¨ª se acaba m¨¢s o menos a las 4-5  horas ¨Chay un par o tres de enfrentamientos que nos har¨¢n querer tirar el mando y que pueden alargarse hasta que demos con su secreto. El juego cuenta con modos extra que lo hacen m¨¢s dif¨ªcil, y recompensas si exploramos todos sus mapas, pero lo cierto es que una vez se aprende el truco y se da con la t¨¦cnica necesaria, donde antes invertimos 4 horas ahora podremos hacer un speed run y terminarlo en 20-30 minutos de un tir¨®n, lo que convierte a Titan Souls en un t¨ªtulo que seguro cala en la comunidad de los Speedrunners.

En el plano visual, Titan Souls nos ofrece un aspecto isom¨¦trico que parece una deconstrucci¨®n en 16 BIT del citado Shadow of the Colossus mezclado con toques Zelda aqu¨ª y all¨¢. El mapeado por el que nos movemos tiene variedad ¨Cruinas, zonas nevadas, lava, bosques nocturnos- pero no est¨¢ tan explotado como pod¨ªa haberlo estado, qued¨¢ndose en un mero requisito que atravesar de cara a los enfrentamientos. Los monstruos son bien diferentes, cada uno con su propio aspecto ¨Clos hay realmente originales, otros en cambio son puro ¡®WTF?¡¯- y patrones de movimiento. Y para los que les guste el estilo Pixelart, el aspecto del juego les resultar¨¢ m¨¢s que agradable. A nivel sonoro destaca considerablemente, no solo por un estupendo montaje de efectos de sonido ¨Cel instante en que recobramos la flecha-, sino por una BSO que mira a la de Kow Otani de Shadow de reojo e intenta darle su propio toque diferenciador. Desde temas intimistas a cuerda y/o piano, hasta conseguidas pistas de batalla llenas de percusiones e instrumentos simulados para darle un tono intenso orquestal y no electr¨®nico. Una sorpresa de calidad que suena muy bien tanto dentro como fuera del juego.