Infinite Undiscovery
- Plataforma3607
- G¨¦neroRPG, Acci¨®n
- DesarrolladorTri-Ace
- Lanzamiento05/09/2008
- TextoIngl¨¦s
- VocesIngl¨¦s
Una infinidad por descubrir
La primera incursi¨®n de Tri-Ace en la nueva generaci¨®n nos ha dejado un buen sabor de boca. Un t¨ªtulo muy completo, tal vez demasiado para su duraci¨®n, con una historia sencilla pero agradable, con un sistema de combate muy atractivo. Una pena la barrera del completo ingl¨¦s.
Infinite Undiscovery ha sido un t¨ªtulo cuyo desarrollo ha pasado bastante desapercibido. Con cuentagotas nos llegaban las im¨¢genes, la informaci¨®n, los tan ansiados detalles sobre uno de los RPG japoneses exclusivos de Xbox 360. Casi sin darnos cuenta, cuando a¨²n nad¨¢bamos en un mar de dudas, el juego tuvo una fecha de salida, un lanzamiento simult¨¢neo a nivel internacional que sorprendi¨® a propios y extra?os por su prontitud y lo inesperado de la rapidez de desarrollo. Y planeando por encima de todo esto, la curiosidad de propios y extra?os por ver la primera obra de Tri-Ace en la nueva generaci¨®n.
Tal vez el curr¨ªculum de la compa?¨ªa nipona no sea muy extenso, pero no est¨¢ exento de calidad: la trilog¨ªa Star Ocean (que pronto ser¨¢ cuadrilog¨ªa con su futura entrega para Xbox 360) y la serie Valkyrie Profile (cuya tercera entrega llegar¨¢ a DS), adem¨¢s de cierta peque?a obra experimental, de mucha calidad, que no hemos llegado a ver en nuestro territorio, como es Radiata Stories. Posiblemente, Infinite Undiscovery es el t¨ªtulo m¨¢s flojo de todos los mencionados, a buen seguro el campo de pruebas de Tri-Ace para adaptarse a las nuevas tecnolog¨ªas.
Por su t¨ªtulo enrevesado, Infinite Undiscovery, muchos se esperaban un t¨ªtulo experimental como Radiata Stories. En cambio, Tri-Ace ha ido a asegurar en este juego, y si bien se trata de una obra divertida y carism¨¢tica, no ofrece grandes novedades en el g¨¦nero ni profundiza mucho en s¨ª misma. Pero lo que m¨¢s le pasa factura en nuestro pa¨ªs es el hecho de que, qui¨¦n sabe si como consecuencia del lanzamiento simult¨¢neo, el juego llega en perfecto ingl¨¦s, tanto voces como textos. Algo que, en un RPG como este, puede lastrar much¨ªsimo a los usuarios.
El l¨ªder de este grupo se llama Sigmund, y es el h¨¦roe m¨¢s grande que el mundo haya conocido, ya que es el ¨²nico capaz de cortar estas cadenas. Nosotros encarnaremos a Capell, un pobre m¨²sico que empieza la aventura en prisi¨®n. Aya, una chica que forma parte de los salvadores del mundo, le rescata pensando que se trataba de Sigmund, con quien guarda un parecido m¨¢s que evidente. Aunque Capell no sabe nada del tema, acaba uni¨¦ndose al grupo y ayudando a acabar con las cadenas del mundo.
El argumento ser¨¢, casi en su totalidad, lineal y directo. No nos toparemos con grandes historias secundarias, ni con demasiadas misiones alternativas de gran profundidad. La misi¨®n principal est¨¢ clara, y se sigue fielmente hasta el final, sin tiempo que perder. Esto provoca que, en ocasiones, no tengamos muy claro lo que est¨¢ ocurriendo, lo cual acarrea consigo la inc¨®gnita de cu¨¢l ser¨¢ el siguiente paso que deberemos dar. Muchas veces, las secuencias de v¨ªdeo nos dejan con la inc¨®gnita, dej¨¢ndonos libres en el mapa sin habernos especificado a d¨®nde ir.
Algo a lo que nos acostumbraremos con el tiempo y nos adaptaremos a los mecanismos habituales para avanzar en el juego. Para un RPG normal, las 20-30 horas de duraci¨®n de Infinite Undiscovery est¨¢n bien; pero en este caso, se hacen muy escasas. No s¨®lo por la velocidad que lleva la historia, que a veces parece que los sucesos se atropellan sin sentido, sino porque tendremos a nuestra disposici¨®n un total de 18 personajes y no nos dar¨¢ tiempo a llegar a conocerlos y explotarlos en condiciones.
De hecho, estos personajes van y vienen con mucha facilidad, sin explicarnos en muchos casos el por qu¨¦. A veces aparece en nuestro equipo gente que no sabemos qui¨¦n es, o que igual nos suenan de alguna peque?a secuencia en alg¨²n momento. Lo peor de todo es a la hora de equiparse: son demasiados, lo cual supone dejarse aut¨¦nticas fortunas para tenerlos a todos con el mejor equipo posible. Y si queremos centrarnos en s¨®lo unos cuantos, nunca sabremos cu¨¢les estar¨¢n a nuestra disposici¨®n.
Se juega bastante con el elevado n¨²mero de personajes disponibles, y no s¨®lo para formar nuestro equipo, con un m¨¢ximo de cuatro miembros, siendo Capell el ¨²nico que siempre deberemos llevar de forma obligatoria. Aparte de los momentos argumentales en los que se nos impone un equipo concreto, ser¨¢ habitual que el juego nos pida que compongamos nuestro grupo, o incluso llegar a tener hasta tres distintos, que colaboran entre s¨ª en el mapa. Se nos premiar¨¢ por lo bien que lo hagan los equipos secundarios, por lo que entra aqu¨ª un elemento adicional de microgesti¨®n a la hora de saber formar bien los equipos.
A pesar de su cierta falta de originalidad y de su, por momentos, ca¨®tico desarrollo argumental, la historia de Infinite Undiscovery se antoja bastante entretenida, y llega a tenernos abstra¨ªdos mientras dura. Lo peor es la gesti¨®n de personajes, que nos deja con una gran cantidad de desconocidos y sin poder tampoco tener un equipo habitual. Infinite Undiscovery, por su propio planteamiento, no es un juego que se preste a esta multitud de personajes, como s¨ª lo har¨ªa un S-RPG, por ejemplo.
El control es muy sencillo, con tan s¨®lo dos botones de ataque, uno m¨¢s d¨¦bil y r¨¢pido, y otro m¨¢s fuerte y lento. Se podr¨¢n realizar combos alternando ambos botones, e incluso habr¨¢ ataques especiales dejando pulsando cada uno de ellos. Incomprensiblemente, no hay ning¨²n bot¨®n de defensa (algo que se echa bastante en falta); uno de los gatillos servir¨¢ para rechazar un ataque y devolv¨¦rselo al enemigo, pero es algo que requiere bastante pr¨¢ctica y que, de salir mal, nos deja bastante expuestos ante el rival. Por eso mismo, acabaremos limit¨¢ndonos a ir a la ofensiva, y golpear antes que el enemigo.
Los dem¨¢s personajes de nuestro equipo actuar¨¢n por su propia cuenta. Podremos determinar su orientaci¨®n para el combate (libre, conservar puntos de magia, atacar al m¨¢s cercano al jugador, al m¨¢s lejano, etc¨¦tera), y dejarles hacer. Lo cierto es que, aunque tienden a gastar magia en exceso, realizan un buen trabajo, y podr¨¢n acabar con enemigos finales incluso mientras nosotros estemos recuperando nuestra vida en otro rinc¨®n. La experiencia se reparte de forma equitativa entre todos, tanto los personajes activos como los que no lo est¨¢n.
Uno de los aspectos m¨¢s originales del juego es la posibilidad de combinarse con otros personajes. As¨ª, podremos aprovechar sus habilidades especiales y explotar los entresijos del juego (por ejemplo, combinarnos con Aya y, con sus flechas, hacer explotar barriles del escenario para acabar con enemigos distra¨ªdos); desgraciadamente, es algo a lo que se le da menos importancia de la prometida, y acaba muy en desuso. Algo de agradecer, porque con tantos personajes, podr¨ªa llegar a ser algo ca¨®tico.
El personaje, como m¨²sico que es, tiene una flauta con la que podr¨¢ tocar distintas melod¨ªas que ir¨¢ aprendiendo. Estas tendr¨¢n diversas funciones, como abrir caminos secretos o potenciar a nuestros aliados durante el combate. Una pena que sea tambi¨¦n uno de los elementos que el juego no llega a explotar y acaban muy en desuso. Por lo dem¨¢s, el juego sigue todas las directrices de los RPG, con pueblos por visitar, grandes terrenos por recorrer y mazmorras de las que huir, con peque?as pruebas para a?adir variedad (del tipo 'proteger a esta gente de regreso a su pueblo').
Un ¨²ltimo aspecto interesante a destacar es que el juego se mueve tan en tiempo real, que ni siquiera podremos acceder al men¨² tranquilamente. Si queremos curarnos o cambiar el equipo, tendremos que estar en una zona tranquila y en la que nuestros personajes se puedan sentar tranquilamente; de no ser as¨ª, como el tiempo seguir¨¢ transcurriendo, los enemigos podr¨¢n atacarnos aprovechando nuestra indefensi¨®n temporal.
Los protagonistas principales son demasiado t¨ªpicos (casi se puede encontrar para todos ellos un parecido m¨¢s que razonable con alg¨²n otro personaje de juego o de anime), mientras que los enemigos cuentan con un dise?o francamente muy mejorable en su mayor¨ªa. Las animaciones est¨¢n bien, pero tienen muchos aspectos mejorables; por ejemplo, Capell al correr mueve el brazo de forma muy poco natural, y en las secuencias de v¨ªdeo, muchas veces los personajes atraviesan el suelo con las extremidades, o flotan sobre ¨¦l, incapaces de ofrecer sensaci¨®n f¨ªsica. Lo peor de todo es que, en los combates, nos encontramos con unas importantes bajadas de la tasa de frames, que pr¨¢cticamente congelan la acci¨®n.
El apartado sonoro es muy bueno, con destellos espectaculares y mucho buen hacer en casi todo momento. Sin embargo, el juego s¨®lo permite tener las voces inglesas, las cuales podr¨ªan dar m¨¢s de s¨ª. Adem¨¢s, incomprensiblemente, una cuarta parte de las escenas de v¨ªdeo carecen de doblaje, pese a que los personajes hacen los movimientos y la actuaci¨®n de lo que dice el subt¨ªtulo, sin poder pasarlo, como si estuviesen hablando pero sin hacerlo. Es una sensaci¨®n muy extra?a.
El hecho de que todo el juego est¨¦ en completo ingl¨¦s supondr¨¢ un lastre importante para muchos usuarios. Sobre todo porque los personajes, mientras recorremos el campo, har¨¢n comentarios sobre el nuevo destino; pistas vitales que, de no entenderlas en el doblaje (no est¨¢n subtituladas), caer¨¢n en el olvido y obligar¨¢n al jugador a vagar en busca de un camino por el cual poder avanzar. Sin duda, uno de los problemas m¨¢s preocupantes del juego dentro de nuestro mercado.
Superando la barrera del idioma, Infinite Undiscovery es un juego sencillo de controlar y bastante divertido. Desgraciadamente, es demasiado grande para su longitud, y gran parte de sus caracter¨ªsticas acaban cayendo en el olvido ante la importante falta de uso que se les da. Los amantes de los RPG japoneses tendr¨¢n aqu¨ª un t¨ªtulo interesante que, sin llegar a ser el mejor del g¨¦nero, deja un buen sabor de boca y que ofrece, en total, con todas las misiones secundarias y dem¨¢s, unas 35 horas de diversi¨®n.
Bueno
Cumple con las expectativas de lo que es un buen juego, tiene calidad y no presenta fallos graves, aunque le faltan elementos que podr¨ªan haberlo llevado a cotas m¨¢s altas. C¨®mpralo sin miedo.