
Far Cry 6
- PlataformaXBS8.3XBO8.3PS48.3PC8.3STD8.3PS58.3
- G¨¦neroAcci¨®n
- DesarrolladorUbisoft Toronto
- Lanzamiento07/10/2021
- EditorUbisoft
Far Cry 6, an¨¢lisis. ?Eres un verdadero o un falso yarano?
Analizamos la nueva entrega del shooter en primera persona desarrollado por Ubisoft Toronto y Montreal, una ca¨®tica y divertida experiencia de acci¨®n.
La realidad es relativa y depende de la ¨®ptica de quien la observa. Para Ant¨®n Castillo, el villano de Far Cry 6, la reconstrucci¨®n de su para¨ªso lo es todo. Yara, una isla ficticia del Caribe, es un recuerdo de otro tiempo. Tras a?os de revoluciones y de bloqueos econ¨®micos, el pa¨ªs ha quedado paralizado en el ayer, como si se tratara de una fotograf¨ªa antigua o de un objeto obsoleto. El Presidente desea que su naci¨®n vuelva a resurgir, pero sus m¨¦todos para lograrlo son el despotismo y la violencia.
Y dice y repite ad infinitum: ¡°?Eres un verdadero o un falso yarano?¡±. La respuesta a esa pregunta, que en el t¨ªtulo es recurrente, resulta sencilla de responder: bajo su perspectiva, todo aquel que se opone a ¨¦l no es un yarano de verdad. ?Su m¨¢xima? O conmigo o contra m¨ª. ?Su soluci¨®n? El asesinato y la tortura.
V¨ªviro, las plantaciones de tabaco aut¨®ctonas de Yara, son su gran proyecto. Han sido modificadas gen¨¦ticamente con el fin de curar el c¨¢ncer, pero sobre todo, con el objetivo de vender a las potencias internacionales la idea de que disponen de un tratamiento milagroso. Lo que ocultan (o quiz¨¢ no con mucho ah¨ªnco) es que para su cultivo y producci¨®n se vale de mano de obra de esclava, entre otras atrocidades.
El villano siempre ha jugado un papel importante en la saga Far Cry, un aspecto que no cambia en la sexta entrega. Lo interpreta Giancarlo Esposito (Breaking Bad, The Mandalorian), un actor que se ha especializado en este tipo de papeles. Fr¨ªo, calculador, extremadamente violento y virulento, el personaje es un malo mal¨ªsimo de manual. Detr¨¢s se esconde, por supuesto, una historia de contexto, aunque nos ha parecido que su hijo Diego tiene matices m¨¢s interesantes. Duda de su destino, de los m¨¦todos y del comportamiento de su padre.
Estalla la revoluci¨®n... otra vez

El r¨¦gimen de Ant¨®n Castillo se erige sobre las revoluciones pasadas y sobre una corrupci¨®n corrosiva que se ha instalado en la isla y que recorre cada cent¨ªmetro de sus tierras. El c¨ªrculo vicioso se ha propagado como el c¨¢ncer e impide que Yara avance hacia un nuevo horizonte. Es obvio que Ubisoft Toronto se ha basado en Cuba para plasmar esta visi¨®n, aunque tambi¨¦n se han fijado en otras revoluciones de pa¨ªses latinoamericanos. Ante la opresi¨®n, guerrilla, y de guerrilleros va este videojuego. Funciona como eje central, el n¨²cleo que articula toda la narrativa.
En lo que se refiere al argumento, el estudio no se ha salido del guion, en el sentido de que vuelve a hacer uso de los ingredientes habituales de Far Cry. Hay un evidente componente dram¨¢tico en el contexto de la historia, en sus personajes, en la situaci¨®n que viven los yaranos. Eso es as¨ª porque son circunstancias que han ocurrido en el mundo real.
Sin embargo, en Far Cry 6 se endulza y se reviste de s¨¢tira. Se traduce en una especie de fantas¨ªa de la guerrilla, una mitificaci¨®n y banalizaci¨®n que mezcla drama con humor, a veces con ¨¦xito, otras un tanto pasado de rosca. Con todo, dentro del universo de esta saga, el equilibro general sigue funcionando.

Dani Rojas, el personaje principal (puede ser hombre o mujer, el jugador elige al principio), tiene un pasado militar. Sus circunstancias cambian y termina en la guerrilla, como la figura combativa contra el r¨¦gimen de Castillo. Se une a Clara Garc¨ªa y a Libertad, una de las varias c¨¦lulas que luchan para acabar con El Presidente, su s¨¦quito y todo lo que representa. Antes de conquistar Esperanza, la capital de Yara, es crucial debilitar las fuerzas del dictador y buscar aliados fuertes, tarea que recaer¨¢ sobre los hombros de Dani.
La ambientaci¨®n, un trabajo impecable

Yara no es un para¨ªso, pero sus escenarios s¨ª son paradis¨ªacos. Visualmente, el estudio ha construido un mundo pre?ado de detalles, que captura estupendamente la esencia del universo que pretende reproducir. Bellos parajes verdes y oc¨¦anos cristalinos contrastan con los pueblos y las ciudades, que como la misma Yara, pertenecen a otro tiempo. Los edificios se ven descascarillados, las paredes, vestidas con grafitis, cantos a la revoluci¨®n. Gracias a la potencia de la nueva generaci¨®n, las texturas en alta definici¨®n lo convierten en el cap¨ªtulo que mejor se ve de la saga. Es verdad que todav¨ªa se detecta alg¨²n leve problema de rendimiento en ciertos puntos, pero funciona a 60 FPS bastante estables.
No es solo lo que se ve, sino tambi¨¦n lo que se escucha. La banda sonora original destaca por sus temas de guitarra, mientras que la m¨²sica licenciada nos transporta a un universo sonoro de piezas de reggaeton (La Gozadera inclusive) y temas con aroma latinoamericano. Las voces originales suenan en ingl¨¦s con l¨ªneas en espa?ol, al tiempo que para el doblaje en espa?ol han respetado el contexto y han utilizado actores de Am¨¦rica Latina. Es decir, no es posible configurar el juego en el mal llamado espa?ol de Espa?a (hay muchas variedades tanto en Espa?a como en Latinoam¨¦rica). Ahora, los viajes en veh¨ªculo nunca han sido tan marchosos.
Far Cry 6 se desarrolla en un enorme mundo abierto repleto de elementos. La estructura jugable nos parece familiar, puesto que se ha utilizado en otros cap¨ªtulos de la serie. Por tanto, la historia principal nos invita a recorrer Yara, a explorar sus mapas paulatinamente, a descubrir sus secretos y a completar los diversos objetivos.

Los estudios de Toronto y Montreal han dividido el mapa en cuatro ¨¢reas diferentes, tres de ellas dominadas por los lugartenientes de Castillo, adem¨¢s de Esperanza, ciudad en la que viven el propio dictador y su hijo. Adem¨¢s, en cada uno de los territorios, hallamos una de las c¨¦lulas guerrilleras que deberemos convencer para que estrechen lazos con Libertad. Todo esto se puede realizar de forma no lineal, en el sentido de que existe la opci¨®n de hacer primero un territorio, otro u varios al mismo tiempo.
?Necesita Far Cry una renovaci¨®n?

No es f¨¢cil dictaminar cu¨¢ndo un producto necesita una revoluci¨®n, pero desde el momento en el que una saga cuenta con tantos juegos a sus espaldas, como en el caso de Far Cry, la f¨®rmula termina erosion¨¢ndose de manera inexorable. Lo que anta?o parec¨ªa fresco se siente cada vez m¨¢s repetitivo. En cierto modo, en Far Cry 6 hemos notado algo de esto, aunque el juego sigue siendo tan absurdamente divertido como siempre. Todos o casi todos los elementos est¨¢n presentes: mundo abierto, villano carism¨¢tico, elementos psicotr¨®picos (menos aqu¨ª que en otras entregas), acci¨®n a raudales, un puntito de sigilo, acompa?antes, misiones principales, secundarias, etc.
La f¨®rmula, grosso modo, es la misma. Plantea una jugabilidad de shooter en primera persona en la que se prima la acci¨®n desbordante. Los soldados atacan por todos los lados y con todo lo que tienen, as¨ª que la posibilidad de que en el campo de batalla aparezca un helic¨®ptero o un tanque es m¨¢s que factible. En no pocas ocasiones, estas situaciones se traducen en un caos disparatado, algo que no deja de ser una se?a de identidad de lo que es Far Cry.
Ubisoft, sin embargo, arrastra un problema en todos sus videojuegos, la inteligencia artificial. Este es un aspecto concreto que no se ha mejorado y que afecta al gameplay, especialmente si utilizas el sigilo. Al preparar la misi¨®n se nos invita a observar el entorno, a coger el m¨®vil y a marcar a los enemigos y las alarmas. Si no las desactivamos y nos ven pedir¨¢n m¨¢s refuerzos y ser¨¢ m¨¢s complicado limpiar la zona de enemigos. La misma mec¨¢nica de fijar soldados funciona dentro de este contexto, pero se ha empleado en tantos t¨ªtulos que ya la vemos algo manida.

A la falta de mec¨¢nicas de sigilo propiamente dichas, se le suma una disposici¨®n de los soldados confusa: suele haber muchos y no parece que dejen demasiados huecos para plantear una estrategia real. Por citar un ejemplo comparativo, en Dishonored, de Arkane Studios, el jugador mantiene una sensaci¨®n de control, porque este es capaz de observar el entorno y trazar su hoja de ruta en consecuencia. No ocurre lo mismo aqu¨ª, donde muchos de estos intentos fracasan y terminas pegando tiros como si no hubiera un ma?ana.
Cambios en la progresi¨®n, armas, Supremo, Amigos...

Salta a la vista que el videojuego se ha dise?ado bajo la presunci¨®n de que el jugador va a destapar sus contenidos poco a poco, sin las prisas que dicta un an¨¢lisis. Si tratas de hacerlo demasiado r¨¢pido, centr¨¢ndote exclusivamente en la historia principal, es m¨¢s que probable que te encuentres con una molesta barrera de nivel. Cada zona dispone de un nivel concreto, que va variando en funci¨®n de la progresi¨®n del propio jugador.
En este punto reside una de las novedades que se implementan en esta obra y que tienen que ver con la progresi¨®n: Dani Rojas gana puntos de experiencia y sube en la jerarqu¨ªa de la guerrilla. Con cada ascenso o subida de rango se desbloquean una serie de objetos de equipamiento y armas, que tambi¨¦n vienen clasificados por niveles de poder. Dentro de esta fantas¨ªa guerrillera, se dibuja una situaci¨®n en la que el gobierno dispone de todos los recursos y armas a su alcance. Mientras tanto, la guerrilla tiene que hacer uso de su imaginaci¨®n, tiene que resolver.
Juan Cort¨¦z fue agente secreto y un maestro de la revoluci¨®n. Sus ense?anzas sobre la guerrilla aparecen continuamente, as¨ª como sus consejos. Es ¨¦l el que nos acerca el concepto de Resolver, que en Far Cry 6 se resume en el hecho de aprovechar todo lo que nos proporciona el entorno para fabricar armas y solucionar conflictos. Mec¨¢nicamente, Ubisoft propone la modificaci¨®n y la construcci¨®n de armas en un banco de trabajo con distintas opciones. Podemos utilizar diversos objetos acoplables en las ranuras correspondientes, de modo que dotamos al armamento de distintos efectos.

Las opciones son interesantes y dan profundidad al sistema, aunque hay un aspecto espec¨ªfico que nos genera m¨¢s dudas. Cada arquetipo de soldado es vulnerable a un determinado tipo de bala, as¨ª que tenemos la opci¨®n de montar munici¨®n diferente en cada arma. El asunto es que en batalla, cuando decenas de enemigos atacan, el frenetismo impide pensar e intercalar armas lo suficientemente r¨¢pido como para que sea satisfactorio.
El mayor acierto y la novedad m¨¢s palpable en el sistema de batalla son Los Supremo, una serie de jet packs muy imaginativos con distintos efectos y usos. Podemos bombardear objetivos, lanzar rayos, fuego, convertirte en un maestro del machete, curarte, etc. Una vez reunidos los materiales necesarios es posible fabricarlos gracias a la ayuda de Juan; tambi¨¦n podemos modificarlos para a?adir bolsas de balas, granadas u otras mejoras beneficiosas. Dada su potencia era esencial que estuvieran bien equilibrados. Lo cierto es que una vez utilizados tardan m¨¢s en recargarse, por lo que no da la impresi¨®n de que abusemos de ellos durante las luchas. Reservarlo para el momento adecuado suele ser la opci¨®n m¨¢s sabia.

Nuestro amigo Juan es tambi¨¦n el due?o de Guapo, un cocodrilo de lo m¨¢s feroz que sin embargo entablar¨¢ amistad con Dani. Desde ese instante, podemos llevarlo como Amigo. Esta mec¨¢nica no es nueva ni mucho menos, pero nos permite utilizar a otro personaje, lanzarlo contra el oponente o despistarlo. Est¨¢n divididos en dos categor¨ªas: criaturas como Guapo o el gallo Chicharr¨®n se enfocan en la acci¨®n, mientras que el perrito Chorizo est¨¢ clasificado como acompa?ante de sigilo. Encontramos a varios m¨¢s, cada uno de ellos catalogado de una u otra manera. Solo diremos que teng¨¢is cuidado si llev¨¢is a Guapo durante la infiltraci¨®n: su mera presencia pone en alerta a todo el mundo cuando lo descubren.
Los desarrolladores han implementado dos modos de dificultad que se basan en el da?o que infligen los enemigos: el Modo Acci¨®n es el est¨¢ndar y est¨¢ enfocado a las personas que dominan el g¨¦nero; el Modo Historia se ha dise?ado con la gente m¨¢s inexperta en mente. Tal vez un modo intermedio entre los dos hubiera acotado mejor los distintos tipos de perfiles de jugadores.
Los secretos de Yara: mucho por hacer
M¨¢s all¨¢ de las misiones principales, la cantidad de cosas que podemos realizar es ingente. Dentro del campamento de las guerrillas (que por cierto, la c¨¢mara cambia a tercera persona) construimos distintos edificios que nos abren nuevas posibilidades. En ese lugar participamos en minijuegos, planteamos algunas de las operaciones, etc. Todo el territorio est¨¢ lleno de caminos trazados por los guerrilleros, que marcan en azul las v¨ªas y nos conducen a escondites. Por otro lado, las carreteras se encuentran bajo el control de las tropas de Castillo, as¨ª que es buena idea tomar esos puntos de control matando a los soldados y destruyendo los carteles de propaganda del Presidente. Otra de las cosas que conviene hacer es destruir las bases antia¨¦reas, de modo que viajar por el aire en avi¨®n o helic¨®ptero sea m¨¢s seguro.
Nos esperan b¨²squedas del tesoro, bases enemigas y un sinf¨ªn de tareas a realizar, pero lo que destacan son las misiones secundarias. En lugar de plantear decenas de ellas se han acotado mucho m¨¢s, lo que se traduce en historias m¨¢s interesantes y ¨²nicas. Toda la campa?a y las misiones se puede completar en compa?¨ªa, de la mano del modo online para hasta dos jugadores.

Hay algo maravilloso en Far Cry 6 que al mismo tiempo puede ser un problema: la imprevisibilidad de su mundo. El trabajo de Ubisoft en la construcci¨®n de estas localizaciones y de todos sus elementos resulta remarcable por lo que ocurre a su alrededor. Se habla mucho de narrativa emergente, de eso que acontece cuando paseas por los escenarios en un juego. Aqu¨ª hallamos algo de eso, peque?as piezas que uno observa si mira con detenimiento. Curiosamente, los animales suelen ser los protagonistas, porque como en otros t¨ªtulos de Ubisoft, todo lo que tenga cuatro patas es susceptible de atacarte (y de dos tambi¨¦n, cuidado con los gallos).
Conducimos por las carreteras principales de Yara y nos topamos con un grupo de vacas cruzando la v¨ªa; a lo lejos, se divisa un atropello y en otro lugar se disputa un duro tiroteo entre guerrilleros y soldados. Dec¨ªamos que esto a veces puede ser problem¨¢tico, en el sentido de que estos actos emergentes ocurre en cualquier momento o situaci¨®n. Quiz¨¢ intentemos pasar desapercibidos y algo que acaece alrededor nos delate sin que sea nuestra intenci¨®n. Con todo, es precisamente ese grado de imprevisibilidad lo que a?ade cierta frescura al conjunto.

?Y qu¨¦ hay del endgame? Adem¨¢s de contenidos postlanzamiento gratuitos, cada semana tendremos que enfrentarnos a un nuevo lugarteniente, que se har¨¢ con uno de los territorios.
La revoluci¨®n ha llegado, ?est¨¢s preparado para el desaf¨ªo?
An¨¢lisis de la versi¨®n Xbox Series X. C¨®digo proporcionado por Ubisoft.
Conclusi¨®n
La revoluci¨®n de Far Cry 6 est¨¢ m¨¢s en el argumento que en el juego en s¨ª, que conserva todos sus elementos habituales. Los que est¨¦n familiarizados con la saga no encontrar¨¢n cambios profundos en su f¨®rmula jugable, pero s¨ª un t¨ªtulo tan divertido como ca¨®tico. Ubisoft ha construido un mundo abierto rico y lleno de contenido. Para sorpresa de nadie, el estudio ha reproducido la ambientaci¨®n con su buen hacer habitual. Yara es una isla ficticia del Caribe, un lugar detenido en el tiempo y gobernado por un taimado dictador, interpretado por el genial Giancarlo Esposito. La tem¨¢tica que se ha explorado es la guerrilla, que en el juego se traslada incluso a las mec¨¢nicas jugable. Resolver, como ellos lo llaman, consiste en aprovechar el entorno, crear armas locas y modificar las existentes a trav¨¦s de un banco de trabajo. La opci¨®n de elegir el tipo de bala nos ha parecido destacable sobre el papel, aunque es verdad que luego es dif¨ªcil aprovechar las vulnerabilidades de cada soldado, puesto que las batallas se desarrollan de forma fren¨¦tica por tierra, mar y aire. Lo que s¨ª nos ha gustado son Los Supremo, los jet packs, un instrumento que aporta frescura al sistema jugable. Por lo dem¨¢s, una historia plagada de giros, acci¨®n desbordante, sigilo, eventos de mundo... falla la inteligencia artificial, un aspecto que en Ubisoft tendr¨¢n que revisar de cara a la nueva generaci¨®n. En definitiva: diversi¨®n directa y al pie, muy recomendable.
Lo mejor
- Puro Far Cry: acci¨®n de locura e hilarante
- La ambientaci¨®n, tanto visual como sonora
- Los jet packs (Supremos) aportan variedad
- Resolver: muchas opciones de personalizaci¨®n de armas
Lo peor
- Demasiado continuista con su f¨®rmula
- La inteligencia artificial y el sigilo, una asignatura pendiente
- El frenetismo choca con el punto estrat¨¦gico que se a?ade con el tipo de munici¨®n
Muy Bueno
Juego de notable acabado que disfrutaremos y recordaremos. Una buena compra, muy recomendable para amantes del g¨¦nero. Est¨¢ bien cuidado a todos los niveles. C¨®mpralo.