Economic War
- PlataformaPC5
- G谷neroEstrategia
- DesarrolladorMonte Cristo
- Lanzamiento13/09/2001
- TextoEspa?ol
- VocesEspa?ol
Campo de batalla: el despacho.
Monte Cristo nos presenta su nuevo juego de estrategia en el que deber芍s encarnar a un Jefe de Estado y conseguir determinados objetivos. Esta es nuestra opini車n sobre el juego.
Descripci車n general
Monte Cristo se autodenomina The Management Games Company, y no sin raz車n. En los 迆ltimo meses nos han ofrecido varios juegos de este estilo, con mejor o peor suerte, como Airline Tycoon o World Street Trader 2001. Ahora le toca a otro tipo de gesti車n, en esferas m芍s elevadas que en anteriores t赤tulos. Ya no somos el presidente de una compa?赤a a谷rea ni un malabarista de los valores burs芍tiles. No, ahora nuestra empresa es nuestra naci車n.
En Economic War encarnamos a un Jefe de Estado que deber芍 alcanzar determinados objetivos durante su mandato. Para ello habr芍 que tener contenta a la poblaci車n para evitar sublevaciones que nos puedan costar el sill車n, entablar buenas relaciones con la comunidad internacional a fin de evitar conflictos y conseguir prosperar econ車micamente.
Todo esto se consigue a trav谷s de la obtenci車n de recursos de todo tipo, que van desde lo m芍s ortodoxo en este tipo de juegos, como el petr車leo o los alimentos, hasta lo m芍s estrafalario, como las pr車tesis ortop谷dicas, los inmunodepresores o el vodka. Adem芍s, est芍n los impuestos y los fondos reservados. Como ya estar谷is intuyendo, el juego cuenta con una leve vena c車mica que riega todos sus apartados. Estos recursos servir芍n para abastecer la demanda interna y para comerciar con el excedente. En el caso de los recursos monetarios, para construir nuevas f芍bricas y mantener las existentes o financiar nuestras misiones de espionaje sobre otros Estados y la oposici車n pol赤tica.
El avance tecnol車gico tambi谷n es posible dentro de Economic War, y debemos decidir sobre qu谷 sector de producci車n queremos centrar las investigaciones. A medida que aumentos de tecnolog赤a, las industrias beneficiadas por el avance incrementar芍n su rendimiento.
El comercio y las alianzas internacionales constituyen una parte importante dentro del juego. No s車lo podemos vender o comprar productos a otras naciones, sino compartir tecnolog赤a o establecer pactos militares contra enemigos comunes. Si prefieres acciones menos venerables, puedes sabotear los edificios de tus vecinos, robarles su tecnolog赤a o corromper a sus ministros.
Por 迆ltimo, y si las cosas llegaran a ponerse feas, podemos pasar de la guerra econ車mica a la convencional y lanzar nuestros misiles contra el enemigo.
Presentado de esta forma, el juego parece estar dotado de los elementos necesarios para convertirse en un producto muy atractivo y estar a la altura de otros buenos juegos de gesti車n. Entonces, ?d車nde est芍 el fallo? Pues est芍 en la concepci車n de sus misiones. Ver谷is, no se trata de una campa?a larga, estructurada o no en episodios, ni nada parecido. Son escenarios completamente aislados y en los que hay un objetivo muy concreto, fijado atendiendo al pa赤s con el que lo juegues, como por ejemplo, ser reelegido en los pr車ximos comicios, potenciar la exportaci車n de un determinado producto, o derrocar un gobierno for芍neo.
Olvidaros de aquello de coger una naci車n hasta hacer de ella con el tiempo una superpotencia mundial y avanzar hasta el infinito. A ello se le suma que el n迆mero de estos escenarios es muy reducido, tan s車lo cinco en el modo para un jugador y tres m芍s para el multijugador. La consecuencia es que nunca llegas a tener la sensaci車n de estar interpretando un rol, la inmersi車n en el juego no llega ni a cubrirte las rodillas y la escasa adicci車n que provoca hace prescindible la metadona.
Este es el principal inconveniente, pero hay otras circunstancias que tampoco favorecen al programa. A pesar del gran n迆mero de recursos que el juego contempla, no todos intervienen a la vez. De este modo, por ejemplo, si est芍s jugando el escenario de ?rganos puedes producir pr車tesis de varios tipos, pero no trigo, zapatos, petr車leo, coches o tel谷fonos m車viles. Es decir, que cada escenario tiene acotado el tipo de recursos que en 谷l entran en juego, siendo la construcci車n de misiles el 迆nico aparece en todos ellos. Por otro lado, el mapa del pa赤s que aparece en pantalla no es m芍s que un peque?o tablero sobre el que se han puesto unos pocos edificios que representan la capital. El resto del mapa, est芍 para ir colocando las f芍bricas y laboratorios que construyamos. De nuevo, olvidad cualquier vestigio de grandeza.
Con todo, el juego consigue resultar entretenido por momentos, a lo que ayuda el tono desenfadado y humor赤stico con el que se ha tratado.
Audio/V赤deo
El aspecto sonoro del juego no es especialmente bueno. Las f芍bricas s車lo emiten una especie chasquido cuando las seleccionas o construyes, y los sonidos ambientales son escasos, con tan s車lo el cantar de los p芍jaros, el eventual rugido del motor de un coche o las protestas enfurecidas de la gente cuando hay una situaci車n de vacas flacas. Las voces, algo mejores, nos advierten de los sucesos m芍s importantes que vayan acaeciendo en el transcurso de la partida.
Bastante mejor est芍 resuelto el apartado gr芍fico. Los edificios e industrias est芍n realizados con un colorido atractivo, bastante detallados y algo de donaire en sus animaciones. Las caras de los personajes est芍n dise?adas de forma c車mica y estereotipada. Los men迆s son igualmente coloridos y agradables a la vista. El conjunto gr芍fico es, pues, de lo m芍s destacable de este Economic War.
Gui車n
Gui車n, como tal, no existe ya que, como he dicho, el juego se compone de unos pocos escenarios inconexos que se terminan con la consecuci車n de un determinado objetivo que no tiene continuidad en escenarios posteriores. Nosotros jugamos el papel de un Jefe de Estado que debe hacer lo posible para alcanzar el objetivo que se nos propone. As赤 de simple, no hay m芍s, ni videos que relaten una historia ni nada que haga de hilo conductor de argumento alguno. Si quer谷is tramas retorcidas o cuentos asombrosos, aqu赤 no busqu谷is.
Jugabilidad
Jugar a Economic War es bastante sencillo e intuitivo. Con el rat車n se pueden llevar a cabo todas las acciones que el juego comprende. Para agilizar las cosas, tambi谷n disponemos de teclas de acceso r芍pido. Como suele pasar en este tipo de juegos, el elevado n迆mero de botones a pulsar y de men迆s que se abren pueden desorientar al principio, pero pasados unos minutos consigues hacerte con sus entresijos sin mayor problema.
Completar un escenario con un pa赤s en Economic War rara vez puede llevarte m芍s de dos horas y media o tres. Teniendo en cuenta que disponemos de s車lo cinco escenarios para un jugador y que el modo multijugador, aparte de incluir s車lo otros tres escenarios, no se diferencia en absoluto de aqu谷l, las horas de juego se quedan en un n迆mero bastante bajo, m芍xime trat芍ndose de un juego de estrategia, que suelen ser duraderos por naturaleza.
Y es que Economic War tampoco ofrece unas opciones estrat谷gicas demasiado complejas que lo endurezcan y alarguen. Si quieres hacerlo m芍s longevo puedes optar por reducir la velocidad del juego (cuenta con tres escalones) o bajarte el parche de actualizaci車n, en el que se incluye la posibilidad de variar el nivel de dificultad.
El modo multijugador incluye tres escenarios para ser jugados y admite entre cuatro y seis jugadores. No te preocupes, si no logras convencer por lo menos a tres amigos para que jueguen contigo, el juego se har芍 cargo de los otros pa赤ses participantes en la partida. Lo que pasa es que ya no ser赤a multijugador, puesto que entonces las diferencias entre un modo y otro ser赤an inexistentes.
Estrategia y trucos
Para conseguir un objetivo, normalmente, necesitar芍s cierta estabilidad pol赤tica en tu territorio, evitando la insurrecci車n. Para ello es imprescindible mantener contenta a la poblaci車n manteniendo alto tu nivel de popularidad. Para conseguirlo trata de satisfacer la demanda interna de productos. Cuando lo hayas logrado, ser芍 el momento de dedicarte a llevar a cabo las acciones que te lleven a alcanzar el objetivo indicado.
Al inicio de la partida no dudes en subir los impuestos. Tu popularidad descender芍 pero los recursos econ車micos obtenidos te permitir芍n hacer suficientes cosas para recuperarla y, posteriormente, y cuando la situaci車n est谷 controlada, volver a bajar los tributos.
No recurras al espionaje o el sabotaje. Reporta pocos beneficios, lleva tiempo conseguir agentes bien preparados y es necesario recurrir a fondos reservados. Adem芍s, es bastante posible que descubran a tus esp赤as, con lo que la misi車n resulta in迆til y el dinero invertido en ella infructuoso.
Lo mismo te digo sobre robar tecnolog赤a. Los otros pa赤ses son por lo general m芍s lentos que t迆 haciendo nuevos descubrimientos salvo, quiz芍, al principio. Investiga por ti mismo, es m芍s efectivo. Centra las investigaciones en aquel sector productivo que sea clave para alcanzar el objetivo del escenario, pero no descuides el resto. A m芍s nivel tecnol車gico, m芍s rendimiento de las f芍bricas, por lo que para conseguir igual producci車n ser芍 necesario un menor n迆mero de ellas. De esta manera podr芍s derruir las f芍bricas que sobren, ahorrando el dinero de su mantenimiento y liberando fuerza de trabajo, que puedes destinar a la obtenci車n de otros recursos o la investigaci車n.
Cuando se trata de conseguir una determinada actuaci車n internacional, como por ejemplo el embargo de un pa赤s, tus puntos de diplomacia son la llave. Para conseguir una cantidad abultada, construye una embajada en cada una de las otras naciones, comercia y pacta con ellas, aunque los tratos no sean en principio demasiado ventajosos. Llegado el momento, prop車n la actuaci車n correspondiente y gasta en ella todos tus puntos de diplomacia.
Si careces en tu territorio de una determinada materia prima, busca otras cuya producci車n reduzca la demanda de aquella. Por ejemplo, si no tienes petr車leo construye centrales nucleares e investiga en tecnolog赤a punta, y si no tienes suficientes 車rganos produce inmunodepresores.
Cuando el objetivo consista en derrocar un gobierno, no te andes con sutilezas. Descubrir esc芍ndalos y colaborar con la oposici車n pol赤tica de ese gobierno puede ser lento y costoso. Lo mejor es recurrir a la fuerza. Un buen par de tandas de misiles que destruyan sus centros de producci車n asegurar芍n las revueltas en ese pa赤s, y el gobierno caer芍 mas temprano que tarde.
Y para finalizar, no dejes de construir misiles. Un par de f芍bricas de armamento al menos te har芍n mucho bien. Los misiles sirven para atacar, para defenderse (si los transformas en antimisiles) y, sobre todo, para venderlos. S赤, porque resulta que son el producto m芍s caro de todo el juego y, con frecuencia, el m芍s demandado por tus vecinos. En casi todas las partidas hay alguna escaramuza entre pa赤ses, y los misiles son un bien muy preciado por el que suelen pagar muy bien.
Compar芍ndolo con
Casi todos los juegos con apellido Tycoon (de hecho, en algunos pa赤ses Economic War se llamar芍 Political Tycoon) comparten la gesti車n como punto en com迆n con este t赤tulo. En todos ellos hemos de gestionar alg迆n negocio, ya sea un parque de atracciones, una empresa de ferrocarril o, como el que ahora nos ocupa, el entramado econ車mico-pol赤tico de un Estado. En este 迆ltimo extremo, encuentra similitudes con Tr車pico, con el que tambi谷n comparte el tono sarc芍stico y caricaturesco que impregna el programa. En cualquier caso, no llega a ser tan profundo como otros juegos de este estilo, y mucho menos si tratamos de ponerlo al lado de Civilization. Desde luego, nada que ver con la grandeza de este t赤tulo.
Con alguno de sus hermanos (concebidos y paridos por Monte Cristo), como Airline Tycoon, comparte su sencillez de planteamientos y uso y, como no, lo c車mico de su aspecto.
Lo que est芍 bien
Buenos gr芍ficos, a la altura de lo que cabe exigirle a los t赤tulos de este g谷nero.
F芍cil de usar y de seguir, especialmente recomendable para quienes no sean muy h芍biles en este tipo de juegos pero que no pueden prescindir de ellos.
Sus peque?as dosis de humor y el tono desenfadado y caricaturesco de su aspecto.
Lo que no est芍 tan bien
El modo en que han sido concebidas sus misiones o escenarios. Sin ning迆n tipo de relaci車n o conexi車n entre ellas y sin un argumento que seguir. Ello, como ya he dicho, reduce dr芍sticamente la adicci車n y el grado de inmersi車n en el juego.
El modo multijugador, sin ning迆n aliciente extra que a?adir al modo un jugador.
El audio. Un apartado tan escueto que hay ocasiones en las que no se oye ni un alma.
Enlaces
Manual
Buen manual. M芍s de 60 p芍ginas adornadas con gr芍ficos sacados del programa y escritas con buen humor, que hacen su lectura agradable. Por supuesto, est芍 todo perfectamente explicado y no hay laguna alguna en sus contenidos.
Requerimientos del sistema
Las especificaciones que el fabricante indica son sistema operativo Windows 9x/2000, DirectX 8.0, Pentium 200 Mhz, 32 Mb de RAM, CD-Rom 4x, SVGA con 2 Mb de RAM, Sound Blaster o compatible y 200 Mb en disco.
El juego ha sido probado en un AMD K6-2 400 Mhz, Kyro II 64 Mb y 128 MB de RAM a 1024x768. Su funcionamiento ha sido 車ptimo en todo momento.
Mejorable
Puede tener elementos aceptables y entretener, pero en general es una experiencia que no dejar芍 huella. S車lo recomendable en caso de sequ赤a de este g谷nero de juegos.