Echochrome
- PlataformaPS38.5
- G¨¦neroPuzle
- DesarrolladorSCE Japan Studio
- Lanzamiento01/06/2008
- EditorSony Computer Entertainment
Una nueva generaci¨®n de puzles
Puede que Echochrome pase por un t¨ªtulo inadvertido para el gran p¨²blico, pero la genialidad demostrada bien merece el reconocimiento de todos aquellos que buscan originalidad y nuevas ideas en el mundo de los videojuegos. Descubre uno de los puzles interactivos m¨¢s brillantes de los ¨²ltimos a?os.
Analizar un juego como Echochrome, o tratar de explicarlo, es una tarea considerablemente complicada. La idea b¨¢sica es, como todos los buenos puzles, muy sencilla, llevar a una figura humanoide de un sitio a otro a trav¨¦s de una estructura tridimensional. Profundizando un poco m¨¢s, encontramos que no hay control directo sobre la figura, que avanza inexorablemente en l¨ªnea recta por las superficies a sus pies, por lo que el control se aplica al entorno, o para ser m¨¢s exactos, a la perspectiva que se usa para visualizar el entorno. Aqu¨ª los detalles empiezan algo m¨¢s complejos, pero el verdadero coraz¨®n de este juego reside en un concepto tan brillante como complicado de imaginar: la realidad en el mundo de Echochrome depende de la perspectiva que se usa.
Para entender Echochrome hay que entender sus or¨ªgenes. Oscar Reutersv?rd es un artista que pas¨® el siglo XX investigando lo que se ha acu?ado con el t¨¦rmino de "figuras imposibles", un tipo de figuras tridimensionales que no pueden existir f¨ªsicamenete y s¨®lo pueden ser representadas en dos dimensiones, de forma que enga?en nuestras percepciones para que intenten dar un "sentido" de realidad a las mismas. Al mirar estas figuras, uno sabe que algo va mal, pero a¨²n as¨ª inconscientemente intenta que encajen, por lo que se obtienen interesantes efectos ¨®pticos, e incluso diferentes interpretaciones de la misma figura seg¨²n el punto donde se ponga la atenci¨®n en la misma.
Los objetos imposibles generaron un gran inter¨¦s e influyeron a otros artistas como el bien conocido M.C Escher, que llev¨® este concepto a un nuevo nivel, utiliz¨¢ndolos parar crear paisajes imposibles. Este tema ha generado inter¨¦s en los campos m¨¢s diversos: matem¨¢ticos, militares, art¨ªsticos e incluso sobrenaturales, aprovechando el efecto desconcertante que irremediablemente se crea en nuestros cerebros al mirar estas figuras con un poco de atenci¨®n. El secreto de las figuras imposibles radica en centrar la atenci¨®n en una parte u otra, lo que crea una imagen mental distinta seg¨²n el punto donde se mira; ese es el secreto que alimenta Echochrome, junto a una serie de reglas que da sentido a este magn¨ªfico puzle.
Obedeciendo una serie de cinco reglas, el mundo de figuras geom¨¦tricas de Echochrome cambia sus propiedades seg¨²n el punto en el que la c¨¢mara est¨¦ situada. Si hay un agujero entre dos espacios, puede que no lo haya una vez que rotes la c¨¢mara, o coloques un objeto en tu punto de vista que "tape" ese agujero, si no se ve, no existe. La maleabilidad del mundo usando estas reglas es simplemente impresionante, lo que lleva a que las soluciones no est¨¦n preestablecidas y a que conseguir llevar al personaje de un lado para otro no sea una simple cuesti¨®n de encontrar una soluci¨®n fijada de antemano; hay varias soluciones, as¨ª como muchas posibilidades de fallar y caer al vac¨ªo.
Echochrome no es un juego sencillo, no es Tetris ni hay nada parecido en el mercado. El objetivo es f¨¢cil de entender, pero la complejidad de?algunas de sus soluciones?no puede ser ignorada. El personaje que hay que llevar de un sitio a otro no se limita a andar, tambi¨¦n tiene plataformas que usa para saltar y agujeros en los que puede caer, bien al vac¨ªo o bien a una plataforma "inferior" si se ha realizado correctamente el giro adecuado. La complejidad de los escenarios va creciendo exponencialmente con el desarrollo del juego, lo que sumado a lo dif¨ªcil que resulta pensar la soluci¨®n en las circunstancias que propone el juego, conforma un t¨ªtulo muy adecuado para todos los que buscan un reto mental y?no es un simple pasatiempo.
La creciente complejidad de los escenarios desvela un dise?o realmente fant¨¢stico, con mapas enrevesados, que se enroscan y se expanden hasta convertirse en construcciones colosales en el el contexto del juego. Cada uno de estos mapas es un reto apasionante que adem¨¢s puede ser solucionado de diferentes formas; sin duda que aquellos que se sumerjan m¨¢s profundamente en el juego sabr¨¢n encontrar los "puntos d¨¦biles" del dise?o para encontrar los atajos que parec¨ªan imposibles o inexistentes, lo que dar¨¢ para interesantes demostraciones de destreza.
Precisamente es esa flexibilidad la espada de doble filo que tiene Echochrome. Al haber cosas como grandes saltos y agujeros, la precisi¨®n en esos momentos no est¨¢ garantizada. Un buen salto puede encaramarte en el lugar que necesites, pero tambi¨¦n puede hacer que el mu?eco caiga al vac¨ªo si la plataforma no est¨¢ correctamente alineada, lo que no siempre est¨¢ del todo claro para el jugador. Hay que aprender bien a medir la profundidad del escenario, sabiendo alinear correctamente la perspectiva para conseguir la posici¨®n deseada. Tambi¨¦n es necesario ser preciso, peque?as imperfecciones a la hora de "tapar" agujeros pueden hacer que el mu?eco caiga, por lo que esa dificultad a?adida se deja notar, dejando bien a las claras que estamos ante un t¨ªtulo exigente, que requiere de verdadera concentraci¨®n, habilidad y a veces un poco de suerte para completar algunos de sus escenarios m¨¢s enrevesados.
Entender las cinco leyes b¨¢sicas que gobiernan el mundo de Echochrome es fundamental para tener esperanzas de superarlo, pero aunque el tutorial hace un buen trabajo explic¨¢ndolas -a veces quiz¨¢s con un poco de exceso de celo- lo realmente complicado es asumirlas y aplicarlas de forma natural, algo que s¨®lo se consigue con pr¨¢ctica y paciencia. El juego ofrece las herramientas necesarias para poder meditar bien cada paso, ya que por un lado ofrece "ecos" del mu?eco en los puntos del escenario por los que tiene que pasar -¨²til para proporcionar objetivos inmediatos- y luego est¨¢ la impagable opci¨®n de pedir al mu?eco que se pare, lo que es poco menos que imprescindible para preparar bien tus movimientos. Es un juego de combusti¨®n lenta, que requiere un esfuerzo mental considerable y eso es precisamente lo que, junto con su originalidad, lo distingue de otros t¨ªtulos.
Quiz¨¢s el principal problema de este t¨ªtulo es cierta falta de simplicidad en su mec¨¢nica que s¨ª tienen otros puzles. Al contar con un espacio tridimensional y movimiento total de c¨¢mara, las opciones disponibles son incontables y muchos entornos no presentan soluciones que puedan resultar obvias. Afortunadamente, para los momentos particularmente frustrantes siempre est¨¢ la posibilidad de pasar de fase y probar otra, o bien adentrarse en el modo Galer¨ªa para seleccionar una de las 56 clases distintas disponibles para conseguir establecer la mejor marca posible. Es una buena decisi¨®n que anima a seguir explorando el juego sin quedarse frustrado en un punto especialmente complicado. Tambi¨¦n est¨¢ el modo Portfolio, en las que se aglutina una colecci¨®n de mapas, organizados por su dificultad.
Pero esas fases no son las ¨²nicas disponibles, ya que seguramente una de las caracter¨ªsticas m¨¢s loables de este t¨ªtulo sea su completo y flexible editor de mapas, con el que los jugadores pueden hacer sus propias construcciones y compartirlas a trav¨¦s de PSN. No satisfechos con crear e incluir una gran variedad de estructuras de impecable dise?o, los desarrolladores seguir¨¢n cuidando a su creaci¨®n, recopilando regularmente algunos de los mejores mapas creados por los usuarios, poni¨¦ndolos en una rotaci¨®n con los mejores mapas que lleguen. Una gran idea llena de potencial que puede alargar la vida de este t¨ªtulo durante mucho tiempo y que adem¨¢s ha sido incorporada con todas sus consecuencias, dejando amplias posibilidades de ver en el futuro dise?os brillantes o simplemente alocados.
Hasta la presentaci¨®n audiovisual es fant¨¢stica, con una elegancia que no hace m¨¢s que acentuar su particular mec¨¢nica de juego. No hay escenarios, ni neones, ni ruidos, nada de nada; la presentaci¨®n es minimalista pero muy efectiva y la m¨²sica de viol¨ªn acompa?a a la perfecci¨®n ese ambiente, contribuyendo a crear un experiencia relajada. Hay cierto toque surrealista en el modo en el que este t¨ªtulo est¨¢ presentado y el sonido de es instrumento es realmente perfecto para acompa?ar esta propuesta, capaz de absolver f¨¢cilmente al jugador una vez que ¨¦ste consiga familiarizarse completamente con las mec¨¢nicas del juego y c¨®mo usarlas en su favor.
Muy Bueno
Juego de notable acabado que disfrutaremos y recordaremos. Una buena compra, muy recomendable para amantes del g¨¦nero. Est¨¢ bien cuidado a todos los niveles. C¨®mpralo.