Alba: A Wildlife Adventure
Alba: una aventura mediterr¨¢nea, an¨¢lisis
Viajar a la infancia mientras sientes la brisa del mediterr¨¢no en tu mejilla por fin es posible con Alba: una Aventura Mediterr¨¢nea. Analizamos un juego que nos ha sorprendido gracias a su bonita propuesta ecologista.
Hay momentos en nuestra vida, relacionados muchas veces con la infancia, que se mantienen grabados a fuego en nuestra mente para siempre. Y, pese a que en ocasiones no nos resulten realmente especiales mientras los vivimos, aquellos m¨¢s mundanos y cotidianos son los que, a su vez, m¨¢s capacidad tienen para trasladarnos a ¨¦pocas pasadas.
El olor de la arena mientras verane¨¢bamos con nuestros padres y amigos, esa m¨²sica que sonaba en la radio del chiringuito donde sol¨ªamos esperar a que estuviese lista la paella para la familia, o la sensaci¨®n de construir diferentes formas y edificaciones de arena ayud¨¢ndonos de nuestros queridos cubos de pl¨¢stico para traer agua del mar.
A orillas del mediterr¨¢neo
Queremos empezar este an¨¢lisis extrapolando al videojuego que nos ocupa tales sentimientos, ya que es la forma de describir el apartado m¨¢s especial de Alba: una Aventura Mediterr¨¢nea. El t¨ªtulo, ambientado en la isla ficticia Pinar del Mar, recoge elementos de diferentes localizaciones espa?olas (pese a que el n¨²cleo ser¨ªa Valencia, las dunas de sus playas o la albufera, tambi¨¦n hallamos ecos de Andaluc¨ªa, de Roquetes de Mar, de la Ibiza de los 90 o incluso de Pe?¨ªscola) para enarbolar un discurso ecologista, de respeto por el medio ambiente, no desprovisto de una cr¨ªtica directa a la sobre-urbanizaci¨®n y la saturaci¨®n del turismo que ha incidido de forma negativa en muchos territorios mediterr¨¢neos.
Y lo hace como nunca otro juego ha conseguido: es la primera vez que sentimos realmente que hay un cari?o y un amor desmedido por representar esos detalles de nuestro pa¨ªs (grande y peque?os) que caracterizan a muchos de los lugares que hemos recorrido durante la infancia. Y no ¨²nicamente citando visualmente a Sorolla como sucede en RiME (que tambi¨¦n lo hace) sino yendo un paso m¨¢s all¨¢, el que nos lleva hasta el chiringuito con la radio a todo trapo, el de los abuelos que te esperan para poder pasar unos meses con ellos en verano, el de los amigos y conocidos con la camiseta marcada en blanco sobre sus enrojecidos cuerpos por culpa del sol abrasador del mediod¨ªa.
Buena parte de culpa de todo ello la tiene el director creativo del juego, el espa?ol David Fern¨¢ndez Huerta. Su formaci¨®n en Bellas Artes dentro de la Universidad polit¨¦cnica de Valencia permiti¨® que trabajara en el estudio Akaoni, para terminar en Londres siendo pieza fundamental de juegos como Monument Valley 1 y 2 en Ustwo. Ser el Director Creativo de Alba le ha permitido desarrollar toda su pasi¨®n por la cultura mediterr¨¢nea dentro de este acogedor videojuego.
Una experiencia para recordar
Todo ello, a trav¨¦s de una experiencia interactiva sencilla, contemplativa, no desprovista de bastantes cosas por hacer: con nuestro m¨®vil recopilaremos informaci¨®n de la rica fauna del lugar (diferentes ambientaciones dar¨¢n lugar a una biodiversidad bastante atractiva), podremos limpiar los restos que hay tirados por el suelo, reparar diversas construcciones y, en definitiva, conseguir que la isla sea atractiva como espacio natural. Pues el objetivo final del juego que nos ocupa, adem¨¢s de regalarnos una relajante y nost¨¢lgica aventura que ahonda en nuestros sentimientos, es el de evitar la construcci¨®n de un mega-hotel que pone en peligro la tranquilidad del lugar, a la vez que se carga el medio ambiente sin contemplaciones.
Pero ojo, aqu¨ª no todo apunta en una misma direcci¨®n de forma directa: si atendemos a las radios que hay repartidas por la isla, oiremos diferentes versiones de los pueblerinos: mientras que algunos desean preservar la naturaleza, otros ven positiva la construcci¨®n del hotel en aras de que baje el paro en la zona.
Nuestra misi¨®n bajo el rol de Alba ser¨¢ apostar por el medio ambiente, por conseguir poner nuestro granito de arena para que la restauraci¨®n de los humedales permita no solo la preservaci¨®n de las especies de la zona, si no tambi¨¦n conseguir que sea un reclamo tur¨ªstico amable pero sin llegar a l¨ªmites intrusivos.
A partir de aqu¨ª, m¨®vil en mano, nos encargaremos de documentar la fauna mediante un sencillo sistema de escaneo a trav¨¦s de fotograf¨ªas, lograremos ayudar a los habitantes de la isla para que nuestra recogida de firmas fructifique, y adem¨¢s recogeremos residuos que hay repartidos por las calles, investigaremos los intereses ocultos que se esconden tras la construcci¨®n del gran Hotel, y poco a poco iremos conociendo tanto cada rinconcito de Pinar del Mar, que nos sentiremos como en nuestra segunda casa. Ayuda el hecho de ver plantas aut¨®ctonas como el Baladre, o elementos tan nuestros como las Vespino o los chalets realizados con grandes bloques de hormig¨®n (verdaderas pesadillas para los ¡°especialistas¡± en reformas de los programas americanos que todos conocemos).
Todo se desarrolla mediante sencillas acciones que implican la pulsaci¨®n de un ¨²nico bot¨®n o asentir o disentir mediante el stick anal¨®gico, pese a que son lo suficientemente variadas y amables para que no sintamos en ning¨²n momentos la sensaci¨®n de monoton¨ªa. Las peque?as dimensiones de la isla ayudan a que todo se desarrolle de forma muy fluida, a la vez que permite un cari?o digno de elogio en el dise?o de cada una de sus localizaciones: desde la huerta valenciana hasta el chiringuito de playa, pasando por la zona m¨¢s urbanizada o los grandes humedales.
La belleza de lo cotidiano
El apartado gr¨¢fico del juego, de sencillo dise?o y minimalista representaci¨®n, ayuda a reflejar la luz mediterr¨¢nea con dulzura, ba?¨¢ndolo todo de una sensaci¨®n de cercan¨ªa muy acogedora y dotando a las estancias de un realismo poco esperado en este tipo de apartado gr¨¢fico. Por otra parte, el factor sonoro nos deja un detallado ambiente ac¨²stico, donde se entremezclan el realista sonido de los animales (crucial en muchos momentos para escanear esa especie rara que no conseguimos fotografiar) con la delicada m¨²sica ambiental. Menci¨®n especial para el grupo de Granada Napole¨®n Solo, que protagoniza alguna de las sinton¨ªas que podremos escuchar en la radio.
De una duraci¨®n corta (unas 2 o 3 horas seg¨²n tu estilo de juego), Alba nos ofrece una experiencia que, en algunos casos, nos deja con ganas de m¨¢s. El t¨ªtulo hubiese ganado bastante si incluyera algunas din¨¢micas interactivas algo m¨¢s elaboradas, como por ejemplo segmentos donde ir a la playa con los abuelos y poder construir tu propio castillo de arena (ayud¨¢ndote de un peque?o cubo para traer agua del mar), pedir helados o alimentos de los diferentes comercios de la zona, o peque?os minijuegos para amenizar esas tardes en Pinar del Mar. Sea como fuere, sus valores, el mensaje que transmite y lo ¨²til que puede ser tanto para peques como para mayores, hacen de este videojuego una aventura sencilla m¨¢s que recomendable.
Conclusi¨®n
Amor por el mediterr¨¢neo, respeto por la naturaleza que nos rodea, y una propuesta interactiva sencilla para disfrutar tanto solo como en familia. Alba: Una Aventura Mediterr¨¢nea gustar¨¢ a los entusiastas de las aventuras sencillas y acogedoras, mientras recorren Pinar del Mar bajo el rol de Alba siguiendo un objetivo: intentar recoger la firmas necesarias para evitar la construcci¨®n de un Hotel que arruinar¨ªa el ecosistema aut¨®ctono, poniendo en peligro la preservaci¨®n de multitud de especies. Es posible que sea demasiado sencillo y que sus peque?os errores jugables enturbien el resultado final. En cualquier caso, nos ha sorprendido mucho m¨¢s de lo que hubi¨¦semos imaginado.
Lo mejor
- Su mensaje ecologista y la forma que tiene de transmitirlo, todo un ejemplo
- Sentirte como si estuvieses en casa, su ambientaci¨®n no tiene precio
- Aventura sencilla para toda la familia
- A nivel visual es realmente precioso, gracia a un estilo minimalista muy bello
- Siempre juegas con una sonrisa dibujada en la cara
Lo peor
- Echamos de menos algunas din¨¢micas interactivas que hubiesen mejorado la experiencia
- No poder moverte enfocando con el m¨®vil. Hubiese sido muy ¨²til
- Algunos fallos en la transici¨®n entre animaciones
Muy Bueno
Juego de notable acabado que disfrutaremos y recordaremos. Una buena compra, muy recomendable para amantes del g¨¦nero. Est¨¢ bien cuidado a todos los niveles. C¨®mpralo.