Star Ocean: The Divine Force - Cosas de hoy, muchas de ayer
Probamos la versi車n final del nuevo Star Ocean, que se presenta con un sistema de combate interesante pero un producto anclado en el pasado.
Uno de los anuncios que nos pill車 a contrapi谷 el a?o pasado fue el de tener en marcha un nuevo Star Ocean. Tampoco deber赤a parecernos tan raro, las grandes sagas del rol japon谷s han vuelto o lo est芍n haciendo mientras se adaptan a los nuevos tiempos, y esta, aunque en un escal車n inferior, hab赤a tenido cierta solera por su combate en tiempo real y la recepci車n de algunas de sus 迆ltimas entregas, como Last Hope, no encajaron del todo mal. As赤 que The Divine Force llega con ganas, aunque es verdad que el JRPG ha cambiado mucho. Y Star Ocean no tanto.
En la demo que pudimos probar, que formaba ya parte del juego final, nos metieron de lleno en la exploraci車n de un vasto mundo en el que deb赤amos recuperar un objeto de suma importancia. No pudimos ver ni la introducci車n ni el contexto de los personajes, pero ah赤 est芍bamos, preparados para llegar al icono del mapa que indicaba el objetivo principal.
No nos enga?aremos, la puesta en escena nos dej車 bastante fr赤os. El t赤tulo se ve muy justo a nivel t谷cnico en casi todo lo que propone, tanto por el trabajo de modelados de personajes como tambi谷n algunas animaciones, as赤 como la calidad de las texturas y los efectos. Todo parece estar en un estado claramente inferior a los estandartes de las m芍quinas actuales (jugamos en PS5), y aunque no descubrimos nada nuevo porque lo visto en v赤deos ya apuntaba aqu赤, la sensaci車n fue algo amarga. Es cierto, eso s赤, que a nivel de escala nos sorprendi車, con un mundo gigantesco y de vista larga, por lo que espacio por recorrer tendremos.
El primer nivel nos permit赤a controlar tres personajes con los que nos pod赤amos intercambiar en cualquier momento mientras avanz芍bamos por la zona y nos encontr芍bamos enemigos. Aunque no estamos ante combates aleatorios, s赤 que es verdad que esquivar esos enfrentamientos parece complicado porque te detectan con facilidad. A pesar de esto, era una primera piedra de toque para ver el combate. Cada uno de los protagonistas tiene tres ataques principales que podemos lanzar con cada bot車n asignado, mientras estos gastan puntos AP que se regeneran poco a poco, por lo que aunque es en tiempo real, no estamos en un sistema libre donde podamos machacar sin parar nuestras habilidades.
Con la cruceta pod赤amos cambiar de personaje -si no, siguen atacando de forma autom芍tica- para probar otros ataques, casi todo cuerpo a cuerpo. La gracia del juego es que puedes enlazar algunos combos con varios ataques. Acabar con enemigos, ganar recompensas y experiencia y seguir avanzando. Algo interesante es que los personajes iban avisando y comentando cosas in situ, que sirven para estar alerta por si no hemos visto que nos asaltan en alg迆n momento o hay peligro cerca.
Sobre el sistema de AP, cada habilidad gasta una serie de puntos, as赤 que las m芍s potentes cuestan m芍s que las d谷biles, dejando cierto margen para la gesti車n de recursos aunque de forma muy liviana: es todo bastante 芍gil y no nos encontraremos parados por falta de ataques (y menos pudiendo cambiar de personaje).
DUMA, un robot para todo
Nuestro avance nos permiti車 despachar a varios enemigos m芍s de los cu芍les no recordamos si ten赤an alguna acci車n destacada que contrarrestar, hasta subir unas enormes escaleras y enfrentarnos a un enorme jefe final. Antes de ello, descubrimos el potencial de DUMA, un robot que cambia las batallas de forma cr赤tica ya que con R1 podemos lanzar acciones especiales y poderosas. Esto consume la barra azul VA, que se va regenerando a medida que atacamos a enemigos. Con esta habilidad podremos elevarnos y atacar a distancia con una embestida hacia le objetivo, entre otras acciones espectaculares.
Contra el jefe final vimos que ten赤a distintos puntos de ataque para inutilizar ciertas partes del mismo. En el caso que nos ocupa, la cabeza era el punto d谷bil del robot gigante, por lo que centramos todos nuestros esfuerzos a lanzar habilidades y golpes en ese punto. Cay車 muy f芍cil, casi sin darnos cuenta. Una vez terminado, nos dimos cuenta que el DUMA nos permit赤a tambi谷n explorar mejor las zonas abiertas, ya que se pod赤a usar para impulsarnos o saltar a gran distancia para llegar a lugares elevados, adem芍s de escanear para encontrar elementos interesantes a nuestro alrededor.
Momento de calma en la aldea
La otra parte que pudimos probar destaca por nuestra llegada a la aldea. Despu谷s de travesar una zona boscosa de corte oto?al y acabar con varios enemigos, llegamos a un pueblo en el que los personajes pudieron descansar. Lo m芍s destacado de este momento es que hay comida para potenciar efectos y si hablamos con nuestros aliados, abrimos acciones privadas que van a construir nuevas relaciones y afinidades entre los protagonistas del juego. Eso es lo que hicimos con la princesa Laeticia, con la que estuvimos hablando sobre hechos acontecidos anteriormente, sus miedos y su agradecimiento. Es pronto para saber como afectan estas escenas al desarrollo del juego y hasta qu谷 punto son opcionales. Tambi谷n vimos bastantes misiones secundarias a las que pod赤amos atender, como un ni?o que hab赤a perdido a su conejo (gigante).
Star Ocean: The Divine Force es un juego de contrastes, en el que hemos visto buenas ideas en el combate, algunos golpes escondidos con el tema de las acciones privadas a nivel narrativo y mundos con espacio para recorrer. Por otro lado, t谷cnicamente est芍 lejos de ser lo ideal y la hora que estuvimos jugando tampoco nos sorprendi車 en exceso, as赤 que tocar芍 ver por donde van los tiros de la versi車n final. El panorama JRPG ha cambiado mucho estos 迆ltimos tiempos y ser芍 importante ver donde ubicamos el retorno de una saga cl芍sica como esta.
- RPG
- Acci車n
Star Ocean: The Divine Force es un RPG de acci車n a cargo de Tri-Ace y Square Enix para PC, PlayStation 4, Xbox One, PlayStation 5 y Xbox Series. La Federaci車n Pangal芍ctica. Desde sus inicios en el sistema Sol, esta organizaci車n ha tratado de llevar la paz y la tranquilidad a los pueblos de la galaxia. A medida que su alcance se ha ido expandiendo por el universo, muchos h谷roes han servido bajo su bandera; salvadores de planetas en apuros.