A trav谷s del Conducto: la historia de Xenoblade Chronicles 1 y 2
A una semana del estreno de Xenoblade Chronicles 3 en Switch, repasamos los argumentos y puntos de encuentro entre las dos entregas anteriores.
Adelantamos en el avance que Xenoblade Chronicles 3 se dedicaba ante todo a contar su propia historia, con nuevos protagonistas y conflictos. Ha sido una constante en la saga de Monolith Soft, que en realidad ya va por su cuarta entrega (si contamos el independiente Xenoblade Chronicles X), pero siempre se ha encargado de que cada lanzamiento funcione como punto de entrada a la serie sin necesidad de hacer los deberes con las entregas anteriores. Dicho esto, como sabr芍n aquellos que jugaron Xenoblade 2 hasta el final, o han prestado atenci車n al material promocional de Xenoblade 3, las entregas numeradas conectan de una forma clara entre s赤.
Incluso el primer Xenoblade, concebido originalmente como juego autoconclusivo, fue retocado en la Definitive Edition para evidenciar cierto cambio en la retrocontinuidad. De eso, y de otras cosas relacionadas con su trama, hablaremos hoy. Bien por si no hab谷is jugado a esas dos entregas y quer谷is tener mejor contexto a la hora de saltar a la tercera (por tanto, habr芍 spoilers); bien por si lo hab谷is hecho, pero ya han pasado algunos a?os y quer谷is refrescar ambas historias sin necesidad de volver a jugar las cerca de cien horas que suman sus desarrollos incluso sin secundarias. As赤 que all芍 vamos: empieza un curso intensivo para ponernos al d赤a con el universo Xenoblade.
El nacimiento de un mundo nuevo
Poco se sabe a ciencia cierta sobre el conflicto que precedi車 al universo de Xenoblade, pero s赤 que tuvo lugar en nuestra Tierra en alg迆n momento del siglo XXI. La explotaci車n del planeta y sus recursos llev車 a una batalla que puso en peligro la existencia misma de la humanidad, situaci車n que empuj車 a Claus, cient赤fico mis芍ntropo y megal車mano, a arriesgar todo y activar un experimento en una estaci車n orbital para crear un nuevo universo. Una segunda oportunidad, un intento desesperado de que la raza humana evolucionase y dejase sus limitaciones atr芍s.
El catalizador de este experimento fue el Conducto, un artefacto de origen y poder inteligible encontrado en la Tierra a principios de ese mismo siglo. Una te車rica puerta a universos infinitos (entre los que seguramente se encuentran Xenogears, Xenosaga y Xenoblade X) que Claus intent車 abrir con la ayuda del procesador Trinity, un s迆per ordenador con tres n迆cleos de gran capacidad llamados Ontos, Logos y Pneuma.
Pero algo sali車 mal. El experimento origin車 un v車rtice que absorbi車 parte del mundo de Claus, exterminando pr芍cticamente toda la vida y dejando la Tierra en ruinas. El propio Claus, no obstante, sobrevivi車, y acab車 siendo parcialmente arrastrado a trav谷s del v車rtice hacia una nueva dimensi車n junto a Ontos. Con ellos tambi谷n fue Galea, cient赤fica que hab赤a intentado detener el experimento sin 谷xito. Pero ninguno pereci車 porque Ontos, usando su poder computacional, reescribi車 la nueva realidad y gener車 un vasto oc谷ano con dos gigantes que albergaron las almas de Claus y Galea.
Ambos cient赤ficos dejaron su existencia previa atr芍s y adoptaron los nombres de Zanza y Meyneth, dioses de un nuevo mundo donde pronto empez車 a florecer vida. En Bionis, el gigante org芍nico de Zanza, surgieron animales y varias razas con rasgos humanos, creados a imagen y semejanza de su creador; mientras que el inter谷s de Meyneth por la tecnolog赤a result車 en Mekonis, gigante de metal poblado por humanoides mec芍nicos que compart赤an esa fascinaci車n por la investigaci車n.
La reconstrucci車n del viejo mundo
Pero Claus, como dijimos, solo fue transportado parcialmente hacia ese nuevo universo. Mientras parte de su conciencia se convert赤a en Zanza, dios de Bionis, mitad de su cuerpo permaneci車 en la Tierra, donde tuvo que enfrentarse a la destrucci車n que hab赤a causado. Incapaz de morir, incapaz de solucionar nada... Al menos hasta que ide車 un nuevo experimento: en la misma estaci車n orbital donde resid赤a el Conducto y su cuerpo mutilado, cre車 una sustancia para regenerar la materia deteriorada de Morytha, las ruinas de la Tierra, y la lanz車 para formar un espeso?mar de nubes.
Este mar de nubes sirvi車 como caldo de cultivo para los cristales primordiales, otro artificio de Claus con c車digo gen谷tico de las especies extintas de la Tierra que dieron lugar a nuevas formas de vida. En el inicio fueron los titanes, criaturas con gran capacidad para crecer; luego, sobre sus lomos, surgieron otros animales m芍s complejos y con el tiempo, gracias a un largo periodo evolutivo, tambi谷n diferentes tipos de humanoides. Como si de continentes vivientes se tratase, estos titanes albergaron sus propios ecosistemas; y con el tiempo, incluso naciones.
Esta evoluci車n, sin embargo, no qued車 al azar. Porque Logos y Pneuma, los n迆cleos del procesador Trinity todav赤a presentes en la estaci車n orbital (cuya torre acab車 cubierta de vegetaci車n y acab車 siendo considerada como un gran 芍rbol por los habitantes del mar de nubes, el ?rbol del Mundo), fueron reprogramados para recibir los datos de los Blades. Criaturas, humanoides o con forma animal seg迆n el caso, que nac赤an a partir de cristales primordiales y viv赤an ligados a los humanos que los despertaban.
Estos Blades eran inmortales, puesto que la tecnolog赤a de los cristales derivaba de una investigaci車n para alargar la vida humana antes del cataclismo; pero sus Pilotos (designaci車n de aquellos capaces de despertar Blades), no. As赤 que una vez mor赤an, el Blade regresaba al cristal, perdiendo todos los recuerdos y transmitiendo sus experiencias a los n迆cleos, que actualizaban la base de datos y mejoraban el c車digo. Era un ciclo perpetuo de letargo y renacimiento que daba lugar a Blades cada m芍s avanzados y, a la larga, tambi谷n a titanes con formas de vida m芍s complejas.
Evoluci車n truncada
Este nuevo mundo sobre las nubes fue llamado Alrest, y prosper車 en paralelo al de Bionis y Mekonis en la otra dimensi車n. Pero esa evoluci車n, como era de esperar, con el tiempo llev車 a sus respectivos humanos a desarrollar pensamientos m芍s profundos. A preocuparse por m芍s que satisfacer sus necesidades primarias. A experimentar incluso ansiedad existencial. Preguntas como ※?por qu谷 estamos aqu赤?§ o ※?cu芍l es el sentido de la vida?§ eran inevitables. Aunque en Bionis, el conflicto empez車 con otra: ※?qu谷 hay m芍s all芍 del oc谷ano?§ Pronto llegar赤a el d赤a en el que los habitantes de Bionis y Mekonis podr赤an partir hacia el cielo y dejar atr芍s a sus creadores.
Para Meyneth, no solo no era un problema, sino un motivo de orgullo. Pero Zanza entr車 en p芍nico. Le aterraba la idea de quedar otra vez solo, y encima privado de 谷ter, la energ赤a vital que usaba para dar vida a sus creaciones y recuperaba a trav谷s de Bionis cuando estas mor赤an. As赤 que ide車 un plan: primero cre車 a los 谷ntidas, una raza que pod赤a revertir a un estado salvaje (las poderosas telethias) cada vez que quisiera acabar con los habitantes de Bionis para empezar un nuevo ciclo; y luego se enzarz車 en combate con Mekonis para detener en seco la evoluci車n de los m芍khinas.
La batalla acab車 con el poder de Zanza encerrado en una prisi車n custodiada por los 谷ntidas; pero estos, conscientes del peligro que corr赤an si alg迆n d赤a su creador se liberaba, tuvieron que urdir su propio plan. Preparar alguna clase de contramedida. Aqu赤 es donde entraron en escena Alvis, manifestaci車n humana del procesador Ontos que empez車 a servir a la familia real 谷ntida en clave de or芍culo; y Melia Antiqua, hija del emperador elegida para alg迆n d赤a gobernar sobre su raza.
Durante generaciones, los emperadores 谷ntidas tuvieron dos consortes: una de su misma raza, y otra huma (nombre de los humanos corrientes de Bionis) con el objetivo de diluir el gen que provocaba la transformaci車n en telethia. Era un plan secreto para casi todo el mundo, incluyendo la mayor parte de la familia real, lo que hizo que la condici車n de princesa mestiza de Melia despertara recelos e incluso un intento asesinato cuando fue proclamada como heredera. Pero llegado el momento de la transformaci車n, solo ella valdr赤a para liderar a los supervivientes de su pueblo.
Claro que los 谷ntidas no fueron los 迆nicos que se revelaron contra su dios. Al otro lado del v車rtice, Claus adopt車 un rol mucho m芍s pasivo que Zanza y dej車 que sus creaciones evolucionaran con libertad, pero eso no impidi車 que los conflictos surgiesen sobre el mar de nubes. Los humanos, siendo humanos, acabaron robando, violando o asesinando a sus iguales por diferentes motivos; y la vida finita de los titanes, adem芍s, termin車 por incentivar la conquista y expansi車n de las naciones para remediar la escasez de recursos y/o tener un nuevo lugar en el que vivir.
Tras presenciar el asesinato de su madre a temprana edad, y contemplar de primera mano los horrores de la guerra y otras maldades del hombre como adulto, un misionero de Indol llamado Amalthus experiment車 una fuerte crisis de fe y escal車 el ?rbol del Mundo para ver a su dios. Para encontrar respuestas. Pero no encontr車 a Claus y decidi車 robar los n迆cleos de Logos y Pneuma para llevarlos a Indol. All赤 sintoniz車 con Logos y dio vida a Mahlos, Blade de poder sin igual que hered車 de Amalthus el resentimiento hacia la humanidad y se convirti車 en un arma de guerra.
Con el tiempo, los caminos de Mahlos y Amalthus transcurrir赤an por separado, ya que un ?gida (nombre dado a los Blades del procesador Trinity) no depend赤a de su Piloto. Pero el da?o estaba hecho, y Pneuma tambi谷n fue despertada para hacer frente a su ※hermano§, lo que result車 en una batalla de consecuencias tr芍gicas: los esfuerzos de Mythra s赤 acabaron con la derrota de Mahlos, pero tambi谷n con la muerte de muchos inocentes y la destrucci車n de Torna, el tit芍n en el que transcurri車 su duelo.
Esto llev車 a la?aparici車n de Pyra, un desdoblamiento de personalidad bajo el que Mythra se ocult車 para sobrellevar la culpabilidad. Una versi車n de menor poder y car芍cter m芍s amable que, no obstante, fue sellada bajo el mar de nubes por su Piloto, el torn谷s Addam, hasta el d赤a en el que alguien fuese digno de ella. Pero con los ?gidas fuera de escena, no terminaron los problemas. Todo lo contario: porque fue entonces cuando Amalthus se abri車 paso hacia el mando del Pretorio Indolino, el centro religioso de Alrest, e inici車 una campa?a para controlar todos los Blades.
Las llaves del futuro
Todo esto 〞y muchas otras cosas que debemos dejar de lado por el bien de la brevedad〞 es lo que lleva hacia las aventuras de Shulk y Rex. Y hacia el momento en el que recordamos que originalmente el primer juego no se iba a llamar Xenoblade, sino Monado: Beginnig of the World. Porque Monado no solo es el nombre de la emblem芍tica espada roja que empu?a Shulk, es tambi谷n la capacidad subyacente para reescribir la realidad. El poder con el que Ontos cre車 ese mundo, y con los que Zanza y Meyneth dieron lugar a la vida que habita en 谷l.
A diferencia de los dem芍s personajes (salvo de forma puntual, y con gran coste, el h谷roe de guerra Dunban), Shulk es capaz de controlar Monado porque alberga el alma de Zanza, en reposo desde su derrota, y a la espera de que el muchacho acumulase poder y liberase tambi谷n aquel encerrado por los 谷ntidas. Tras toda una odisea a trav谷s de Bionis y Mekonis, con muchos giros y sorpresas (como la supuesta muerte de su amiga Fiora, que reaparece convertida en m芍khina y con el alma de Meyneth en su interior), Zanza culmina su plan maestro y sale del cuerpo como una mariposa de su capullo, dejando a nuestro protagonista como un simple cascar車n.
En el otro lado, a Rex tampoco le va mucho mejor. Tras ser contratado para la expedici車n que saca a Pyra del fondo del mar de nubes y convertirse de forma accidental en su nuevo Piloto, el joven buceador intenta viajar con la ?gida hacia la cima del ?rbol del Mundo con la esperanza de encontrar un nuevo hogar para todos aquellos en riesgo de quedarse sin tit芍n. Pero su misi車n parece destinada al fracaso: con la ayuda de Jin, uno de los Blades m芍s poderosos, Mahlos consigue raptarla y usarla para regenerar su poder perdido, dej芍ndola tambi谷n como un cascar車n inerte.
Es la hora m芍s baja de ambos universos. El momento en el que Zanza activa la transformaci車n y exterminio de las Telethias, haciendo que Melia deba luchar contra los miembros de su especie mientras el resto del grupo todav赤a intenta asimilar que Shulk ya no est芍 con ellos. Y tambi谷n el momento en el que Pyra y Mythra, por v赤a telep芍tica, confirman a Rex que su intenci車n era regresar junto a Claus para que las dejase morir. Para poner fin al pesar que las aflig赤a desde el hundimiento de Torna.
Pero una vez alcanzado el fondo, es cuando toca volver hacia arriba. Sumergido en lo m芍s profundo de su subconsciente, Shulk contempla el pasado. Su viaje y sus amistades. Aunque su existencia sirvi車 para sustentar temporalmente el alma de Zanza, los v赤nculos con Fiora, Melia y los dem芍s miembros del grupo fueron reales. El ※cascar車n§ desarroll車 sentimientos y motivaciones propias. Y ahora, su motivaci車n era detener a Zanza. Detener el ciclo de destrucci車n y renacimiento que frenaba la evoluci車n de los humanos. Ontos, bajo la forma de Alvis, se lo recuerda. Y Shulk no solo vuelve a la vida: durante la batalla final, es capaz de invocar su propia Monado.
Pero la tercera Monado no es simplemente el poder de Shulk. Es tambi谷n el de Fiora. Y el de Melia. Y el Dunban, Reyn, Sharla y Riki. El de todos los humas, 谷ntidas, nopones y m芍khinas que quer赤an detener el ciclo. Luchar por un futuro no predestinado por los designios de un dios. La posibilidad de elegir, aunque implique tambi谷n la posibilidad de errar. De ser, en definitiva, humano. Incluso si todos ellos son criaturas nacidas en la simulaci車n de un universo paralelo creado por un ordenador. Es una conclusi車n que escapa a Zanza en ese lado, pero a la que lleg車 Claus hace mucho tiempo en el otro.
La mitad de carne y hueso hab赤a perdido sus 赤nfulas de dios y solo deseaba que sus creaciones decidiesen su propio camino. Pero el camino con libertad tambi谷n puede ser complicado. Y cuando surgen complicaciones, muchos acuden a dios. A una respuesta superior. Amalthus las busc車 escalando al El赤seo y encontrando un arma que malinterpret車 como la intenci車n del Arquitecto de purgar un mundo pecaminoso. Mahlos, no obstante, solo era un reflejo de los deseos de su Piloto. Y la fragmentaci車n de Pneuma en Mythra y Pyra, el resultado de que Addam temiese ese poder divino. Solo cuando Rex acept車 a las dos como personas, y no como armas, Pneuma se materializ車 en su forma completa y le permiti車 blandir su ※Monado§ real.
Ingenuo y a veces demasiado infantil, Rex es la clase de protagonista que normalmente solo un JRPG se atrever赤a a usar. Pero, algunas ejecuciones mejorables con el guion o el doblaje aparte, sirve para representar la clase de fuerza positiva que puede desequilibrar la balanza en una u otra direcci車n cuando llega esa crisis de fe o de identidad. Una crisis como la que comparten Jin y Nia. Ambos devoradores (proceso mediante el que un Blade puede evitar regresar al cristal primordial si consume el coraz車n de su Piloto para mantener el v赤nculo vivo despu谷s de su muerte) y ambos miembros del grupo Torna (en honor al tit芍n ca赤do) al inicio del juego.
Este grupo se dedicaba a recuperar los cristales primordiales controlados por Indol para liberar de sus ataduras a los Blades que renac赤an una y otra vez perdiendo la memoria y la identidad sin ser capaces de establecer una cultura propia. De legar sus experiencias no como c車digo al 谷ter, sino directamente de unos a otros, como los humanos. Para mantener la promesa de no olvidar a Lora, su Piloto y amada, Jin consumi車 su coraz車n y viv赤a en pesar constante, lo que le llev車 a colaborar con Mahlos para destruir el mundo. No tanto por odio como por respuesta a ese absurdo existencial. Nia, en cambio, encontr車 en el optimismo de Rex otra perspectiva v芍lida.
Al final de Xenoblade 2, el equipo no se enfrenta a su dios como en Xenoblade 1, sino a otra v赤ctima del mundo creado por Claus: incluso tras la muerte de Jin y Amalthus, Mahlos sigue luchando porque es el 迆nico prop車sito que ha conocido. Al caer, sus 迆ltimas palabras no son de frustraci車n o rencor, sino un lamento por la vida que pudo haber sido y no fue. La que ahora pueden vivir Pyra, Mythra, Nia y los otros Blades en la nueva Alrest. Una resultante tras la derrota de Zanza a manos del equipo de Shulk y la desaparici車n del Conducto que manten赤a el v車rtice entre universos abierto.
En un mundo ahora s赤 independiente y sin dioses, Ontos escribe a petici車n de Shulk una nueva realidad para que humas, 谷ntidas y dem芍s especies prosperen en armon赤a; mientras que al otro lado Claus, como regalo de despedida antes de su muerte, levanta el mar de nubes y hace que los titanes se fusionen para formar una gran masa de tierra sobre el oc谷ano. El proceso de reconstrucci車n est芍 completo, y de ah赤 en adelante queda solo en manos de sus habitantes la forma que tome el futuro...
...al menos hasta que llegue Xenoblade 3, claro.
- Acci車n
- RPG
Monolith Soft desarrolla este juego de rol para Wii siguiendo la estela de Xenogears y Xenoblade.