Road 96, an¨¢lisis PS5. La belleza siempre est¨¢ en el viaje

Cuando sali¨® el a?o pasado, Road 96 era un juego ambientado en la mitad de los a?os 90 que miraba a conflictos reales como los de esa ¨¦poca en el centro y este de Europa, como Kosovo, la crisis de los Balcanes y las oleadas de refugiados queriendo escapar. Tambi¨¦n hace pensar en las crisis migratorias que hemos visto en los ¨²ltimos dos a?os. Pero el port a las consolas PlayStation y Xbox estrenado justo esta semana hacen que miremos Road 96 con los ojos de la actualidad.

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Y es imposible no ver a los refugiados ucranianos, de otros pa¨ªses o, por qu¨¦ no decirlo, rusos que tampoco conf¨ªan ya en su l¨ªder en esas historias de chicos j¨®venes que buscan c¨®mo huir de un pa¨ªs roto y s¨®lo quieren alcanzar una frontera que los saque de ah¨ª. Jugar hoy Road 96 se antoja m¨¢s realista a¨²n, y por eso los sentimientos se sacuden m¨¢s.

¡®On the road again¡¯

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Planteado como un viaje m¨¢s emocional que jugable, la obra de DixiArt sorprende por optar por un t¨ªtulo a la vez con mucho peso narrativo y elementos procedurales, lo que hacen que cada viaje sea diferente seg¨²n nuestras elecciones en cuanto a di¨¢logos con personajes, transporte usado, etc.

El juego se compone de 8 cap¨ªtulos, cada uno con un chico adolescente que busca lo mismo: escapar de Petria, una naci¨®n digna de la Uni¨®n Sovi¨¦tica de la ¨¦poca del Tel¨®n de Acero -o de la actual, que tampoco hay que remontarse tan atr¨¢s-, combinada con paisajes del centro de Estados Unidos y personajes de una secuela pol¨ªtica de Giro al Infierno de Oliver Stone.

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En el an¨¢lisis de su versi¨®n Switch entramos en detalle sobre lo que Road 96 ofrece: un Road Game en el que tu objetivo vital es llegar a la frontera monta?osa de Petria -y a una aduana fortificada que parece sacada de una distopia retro-futurista sovi¨¦tica-, y cruzarla de la forma que sea: escondi¨¦ndote en un cami¨®n, atrevi¨¦ndote a escalar y bajar una monta?a, etc.

Y de camino a la frontera, en cada cap¨ªtulo encarnas a un adolescente diferente que est¨¢ siendo buscado, y tienes varias opciones para llegar, ya sea haciendo auto-stop, robando un coche -si logras hacerte con las llaves-, llamando a un taxi, o simplemente andando.

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Y por el camino ir¨¢s encontr¨¢ndote a alguno de los 7 personajes principales con los que interactuar¨¢s y conocer¨¢s sus (complejas y bien escritas) historias. De ti depende pararte a indagar en sus historias, o m¨¢s bien pasar y tratar de llegar por ti mismo/a a la frontera, mientras te acuerdas de descansar y comer -si la barra de vida llega a cero, ser¨¢s detenido por la Polic¨ªa-, de sacar un poco de dinero, etc.

Road Game

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Road 96 es uno de los juegos que mejor esgrime la baza de la belleza contemplativa de sus escenarios en la ficticia Petria, y brilla no s¨®lo en las conversaciones que mantienes con los NPC, sino en los peque?os detalles: por ejemplo, d¨¢ndote una opci¨®n para que simplemente mires el cielo estrellado de noche, observes el paisaje de la carretera, o coloc¨¢ndote una silla de playa en una pasarela para que te sientes a ver la belleza de una catarata.

Tambi¨¦n te hace tomar decisiones como ayudar a los dem¨¢s, pasar de ellos, encontrarte refugios de otros como tu que huyen y decidir si les dejas dinero escondido o no¡­ Nunca te aburres, ya que los minijuegos son una constante, ya sea jugando a adivinar una bola en una ¡®rave¡¯ en mitad del desierto, o disparando una pistola de clavos a piratas de la carretera, tocando un tromb¨®n, jugando videojuegos muy retros -Pong, una especie de Tanques en una Atari 2600-, o esquivando el tr¨¢fico en un Sidecar.

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Road 96 es un juego que no s¨®lo se queda en un walking simulator -aunque tenga momentos de este sub-g¨¦nero-, sino que construye un complejo entramado de relaciones, ya que cada cap¨ªtulo empieza en una zona diferente del pa¨ªs, por lo que atraviesas distintos territorios de camino a la frontera, pero encontr¨¢ndose esos 7 personajes en distintos momentos de sus vidas. Y cada vez que consigues que el chaval que llevas cada momento cruce la frontera fuera de Petria, logras una habilidad nueva que te abre m¨¢s opciones -por ejemplo no s¨®lo decidir si coger un bus o hacer auto-stop, sino intentar robar un cami¨®n.

Hay algo de Tarantino en ciertos momentos y di¨¢logos, pero sobre todo hay m¨¢s de los Hermanos Coen en Road 96, de personajes que no desentonar¨ªan en films como O, Brother!, Arizona Baby o El Gran Lebowskyi. O tambi¨¦n en el Asesinos Natos y Giro al Infierno de Oliver Stone. O Coraz¨®n Salvaje de David Lynch. Incluso ese juego de cruzar historias de personajes dispares en el que Gonzalez I?¨¢rritu (Amores Perros, Babel) es experto El t¨ªtulo bebe de muchas Road Movies y logra a la vez componer la suya propia. Y pocas veces veremos tan, pero tan bien aplicado el concepto de ¡®road movie¡¯, en una experiencia jugable, con el ¨¦nfasis en la libertad, en el viaje y los escenarios solitarios.

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Visualmente, est¨¢ claro que PlayStation 5 -la consola sobre la que hemos hecho el an¨¢lisis- le sienta bien a Road 96, ya que el juego corre a 60fps sin bajada de frames, ni tearing -en Switch s¨ª ten¨ªa, sobre todo en modo port¨¢til-, ni stuttering. Y aunque sus texturas son muy sencillas y la animaci¨®n de los personajes b¨¢sica -parece un juego de Telltale en ese apartado-, ese toque Cel-Shading le da una personalidad a los gr¨¢ficos, aparte de ser uno de los juegos m¨¢s hermosos y variados del a?o en escenarios. De hecho, incluso tiene un ligero soporte al mando DualSense, usando la vibraci¨®n y los gatillos pero no demasiado.

La BSO es como los personajes: un collage de estilos, aunque predomina el New Age y el Synth Pop, con temas Indies tan bonitos como los de primer Life is Strange. Tan acertado musicalmente como sus voces de doblaje, que les dan personalidad y profundidad a cada uno de los personajes que vas a conocer. Y para no perdernos, tenemos todos los textos y di¨¢logos localizados en texto al castellano.