Gran Turismo 7, an¨¢lisis PS5. La orquesta sinf¨®nica del automovilismo

Gran Turismo 7 te da la bienvenida con una secuencia en la que se repasa todo un siglo de historia del motor y de la sociedad. C¨®mo hemos llegado hasta aqu¨ª y qu¨¦ papel ha jugado la automoci¨®n en el avance industrial, o c¨®mo los coches pasaron de ser una herramienta apta solo para unos pocos privilegiados a convertirse en un elemento m¨¢s del d¨ªa a d¨ªa. De los pianos con fotograf¨ªas en blanco y negro al rock and roll del tema Moon Over the Castle con todo tipo de veh¨ªculos en circuitos m¨ªticos de la saga protagonista. Historia del motor, pero tambi¨¦n de Gran Turismo. Una larga presentaci¨®n con sabor a bienvenida y, al mismo tiempo, como si fuese esta la ¨²ltima vez. Un homenaje que no es sino un anticipo de lo que nos espera: el Gran Turismo que llev¨¢bamos tantos a?os esperando.

Gran Turismo est¨¢ de vuelta: tan nuevo, tan familiar

Las primeras horas con Gran Turismo 7 son especiales. Primero, porque te das cuenta de que Polyphony Digital ha tomado nota de las demandas de los aficionados durante esta larga ¨²ltima d¨¦cada. El salto a la alta definici¨®n con Gran Turismo 5 permiti¨® a la serie capitaneada por Kazunori Yamauchi dar pasos al frente en muchos aspectos; lecciones positivas y negativas de las que ha aprendido este s¨¦ptimo episodio numerado, empe?ado en hacerte sentir c¨®modo desde el primer minuto. Es un videojuego de autor.

Cuando pasan decenas de horas y notas que llega ese estado mental en el que te sientes absorbido por la experiencia, que est¨¢s ah¨ª y dominas cada curva a placer, lo que en psicolog¨ªa denominan ?flujo? o ?la zona?, te das cuenta de que el estudio nip¨®n ha logrado una vez m¨¢s aquello tan dif¨ªcil, aquello que encumbr¨® el nombre de la serie a lo m¨¢s alto en las generaciones de PlayStation y PlayStation 2 con el segundo y cuarto episodios. Por suerte, este t¨ªtulo satisfar¨¢ no solo a los amantes del motor en general y de Gran Turismo en particular, sino tambi¨¦n a quienes cre¨ªan que este nombre era demasiado intimidante, demasiado simulador. La realidad es que Gran Turismo 7 es extremadamente realista en muchas cosas, demasiado conservador en otras y, dentro de su imperfecci¨®n, accesible sin renunciar a su profundidad tradicional.

Nunca hab¨ªamos sentido un Gran Turismo tan c¨®modo a los mandos, tan optimizado y sensible al movimiento del joystick. Es una cuesti¨®n de sensaciones, claro est¨¢. Percibes mucho de GT Sport, del que hereda modelados, interfaz y escenarios; pero tambi¨¦n esa cadencia de giro de anteriores episodios. Una suma de factores que hacen de Gran Turismo 7 puro placer al volante. Reto superado en uno de los aspectos fundamentales de cualquier videojuego de conducci¨®n.

Como en casa, en ning¨²n sitio: de visita en un gran museo

Gran Turismo 7 se vuelca en hacer que todo lo que va m¨¢s all¨¢ de las carreras sea un entorno agradable, vistoso y legible. Kazunori Yamauchi expres¨® en una de las presentaciones previas al estreno del t¨ªtulo su preocupaci¨®n por ver a las j¨®venes nuevas generaciones desinteresadas por la cultura del autom¨®vil, una afici¨®n por la que el nip¨®n siente devoci¨®n; hasta el punto de que ¨¦l mismo es piloto. Y se nota. El conocimiento adquirido a lo largo de veinticinco a?os se plasma en esta entrega tomando lo mejor de cada una. Desde la presentaci¨®n general hasta la construcci¨®n de los men¨²s; aunque no siempre los ordena de la mejor manera. Minimalismo en la interfaz, en el dise?o de cada icono y la sutileza de cada animaci¨®n: es un videojuego elegante. Equilibrio, en definitiva, para no pasarse de denso a primera vista, ocultando deliberadamente su profundidad para explic¨¢rtela poco a poco. A sorbos. Ese cariz did¨¢ctico est¨¢ por todas partes. Para que no te pierdas, con pocos objetivos simult¨¢neos, pero claros y alcanzables. Su tal¨®n de Aquiles es lo enrevesado que puede resultar en algunos casos, con demasiados pasos a seguir para hacer cosas tan b¨¢sicas como cambiar de coche (te obliga a ir al Garaje) o separando en diferentes puntos del mapa configuraciones que bien podr¨ªan haberse unificado en una sola.

Ampliar

Como si de una mezcla entre Gran Turismo 2 ¡ªpor su sencillez visual en los men¨²s¡ª y Gran Turismo 4 ¡ªpor su estructura de mapeado¡ª se tratase, GT7 concentra todo en un mapa que de base no est¨¢ repleto de opciones, sino que a lo largo del viaje te va presentando sus diferentes capas. Para ello, el estudio nip¨®n conf¨ªa en el modo GT Caf¨¦ comocoraz¨®n. No es casualidad que est¨¦ justo en el centro de la pantalla: es una declaraci¨®n de intenciones; un modo campa?a camuflado y perfectamente ejecutado.

¡°Volvamos a la cafeter¨ªa¡±; hazte con todos

Este modo, una cafeter¨ªa con violines, saxos y pianos de fondo, nos recibe con mantel, cubiertos y una copa. Aqu¨ª los problemas no existen, solo se respira amor por las cuatro ruedas. Luca, el personaje que nos acompa?a, te da un Libro de men¨², una carta en la que se sustituyen los caf¨¦s y los helados por tres objetivos. Siempre tres, basados en la obtenci¨®n de tres coches que puedes completar en el orden que quieras. Por ejemplo, para no entrar en detalles de una etapa avanzada de la partida, el tercero de ellos es la colecci¨®n de compactos cl¨¢sicos europeos. Tres misiones con tres objetivos y recompensas. Hay dos maneras de afrontar estos desaf¨ªos: comprando el coche o quedando en las m¨¢s altas posiciones de las carreras indicadas. Lo divertido es lo segundo, claramente, y es de esta forma tan org¨¢nica como el juego te engancha sin que te des cuenta tanto a completar todas las pruebas de Circuitos del mundo ¡ªtodas tienen una recompensa diferente en forma de coche¡ª como ese componente coleccionista. Aqu¨ª hemos venido a hacernos con todos, a tener un garaje con m¨¢s de 400 veh¨ªculos de los ¨²ltimos 150 a?os de historia del motor. Como si de un ¨¢lbum de cromos se tratase.

Compites, ganas y completas as¨ª los objetivos de la cafeter¨ªa. Una vez lo tengas todo, vuelves, te sientas y¡­ escuchas. Antes de la siguiente misi¨®n nos espera una breve conversaci¨®n de un par de minutos (que se puede saltar, si bien por lo que dura merece mucho la pena dejarse llevar) con explicaciones de la historia del fabricante, de esa colecci¨®n de veh¨ªculos. An¨¦cdotas, lecciones de motor como los diferentes tipos de tracci¨®n, el origen de una escuder¨ªa o c¨®mo ha evolucionado un modelo concreto. V¨ªdeos, ¨¢lbumes de fotos, explicaciones detalladas. Comodidad, te sientes a gusto en la pista y fuera de ella. Y es que las horas fuera de la pista pueden ser tantas como t¨² quieras. Bien sea personalizando, configurando tu nuevo chasis o sacando fotos en uno de los m¨¢s de 2.500 paisajes disponibles. El modo foto es deslumbrante y accesible, capaz de convertir una captura cualquiera en un candidato a fondo de pantalla.

Ampliar

La vuelta de la escuela de pilotaje y licencias marca otra reminiscencia a tiempos remotos. Si bien las cinco licencias no son necesarias para jugar salvo en casos concretos de la aventura en GT Caf¨¦, si son una forma estupenda para aprender y divertirte aprendiendo, algo tan complicado en muchos otros contextos. Haber elegido a pilotos profesionales como instructores para alentarte y aconsejarte en cada prueba, explic¨¢ndote conceptos como el fuera-dentro-fuera o la importancia de posicionarte bien en la trazada, son peque?os detalles que abren las puertas a los no iniciados sin llegar a ser cargante ni intrusivo. Con todo, GT Caf¨¦ termina present¨¢ndote todos los modos de juego, que se desbloquean paulatinamente sin perder el foco en los tres elementos que vertebran el ADN de Gran Turismo: competir, coleccionar y fotografiar; sin un orden en particular, a merced del se?or Yamauchi.

Ampliar

Es incomprensible que, a estas alturas, sigamos sin poder acceder al modo foto en cualquier momento de la carrera, quedando as¨ª limitado a su modo repeticiones o el modo de fotograf¨ªa propiamente dicho. Y es una l¨¢stima, porque si en las repeticiones la saga supera a sus competidores en opciones, en el apartado de fotograf¨ªa directamente juega en otra liga. Una vez el juego se ponga a la venta y la comunidad comience a compartir sus creaciones, el ¨¢lbum disponible ser¨¢ tan preciosista como contemplativo. Gran Turismo 7 tambi¨¦n trata de eso, de sentarte y apreciar un dise?o, un ¨¢ngulo o un momento. El Ray-Tracing es aqu¨ª la guinda del pastel: un a?adido de primera categor¨ªa con el que los televisores 4K HDR y tecnolog¨ªa OLED har¨¢n dudar entre qu¨¦ es realidad y qu¨¦ es ficci¨®n.

Tu d¨ªa a d¨ªa como piloto: un bucle de juego refinado y sofisticado

Gran Turismo 7 trata cada coche como una pieza de museo y te dice, de forma directa e indirecta, que los coches se ven, pero no se tocan. Un arma de doble filo, todo sea dicho, como os explicamos m¨¢s adelante.

De nuevo, Polyphony Digital acierta en su estructura, separando en tres concesionarios su cat¨¢logo de coches. Por un lado, Brand Central, el tradicional mercado de primera mano con m¨¢s de 60 fabricantes de los ¨²ltimos veinte a?os de historia. M¨¢s de 300 veh¨ªculos con una selecci¨®n que se ir¨¢ ampliando poco a poco mediante actualizaciones; como ya sucedi¨® con Sport, solo que con una cantidad de lanzamiento a la que no se puede poner ninguna pega. Y nos explicamos.

Ampliar

De nada sirve la cantidad en bruto si la variedad brilla por su ausencia. Ese fue uno de los grandes debes de Sport, muy alejado de las entregas de PlayStation 2. Esta vez se toma lo mejor de la selecci¨®n competitiva de GT6 y se recupera aquello que demandaban los fans de la vieja escuela: los coches de calle. Sin perder la perspectiva, de menos a m¨¢s. Conseguirlo todo puede llevar varios much¨ªsimashoras, porque algunos modelos est¨¢n regidos a invitaci¨®n, otros aparecen de vez en cuando¡­ y otros, sencillamente, cuestan millones de cr¨¦ditos.

Ampliar

Gran Turismo 7 comienza dej¨¢ndote escoger tres coches compactos japoneses urbanos, no preparados para competir. Ese camino entre conducir un Mazda Demio XD Touring a un Ford Mustang GT ¡®15 es gradual, progresivo, con Libros de men¨² que te empujan a conseguir las licencias necesarias para la siguiente competici¨®n. As¨ª, poco a poco ves como se introducen ante ti nuevas opciones, nuevos conceptos; que se presentan a un ritmo equiparable al del aprendizaje del jugador, tanto novel como experimentado. Gran Turismo 7 no imprime prisas.

En el concesionario de segunda mano tenemos coches con varias decenas de miles de kil¨®metros a sus espaldas, una soluci¨®n que permite al juego incluir modelos del siglo pasado, como un Lancia Delta HF Integrale Evoluzione de 1991, a pesar del testimonial papel de la marca italiana en el mercado hoy d¨ªa. Este tipo de adiciones gustar¨¢n a los fans, porque si quieres adaptar el juego a una experiencia m¨¢s pret¨¦rita puedes hacerlo en cualquier modo; tanto los principales como las partidas libres personalizables.

Ampliar

Muchos tienen existencias limitadas, con precios afectados por la especulaci¨®n o la revalorizaci¨®n (como en la vida real) y nos permite a?adirlo a una lista de deseos. Es probable que los precios astron¨®micos de muchos de ellos sean un tr¨¢mite imposible en el momento, aunque quiz¨¢ despu¨¦s puedas darte el capricho. Este cat¨¢logo de coches de segunda mano se renueva a diario. Igual con el concesionario de coches legendarios, donde generalmente nos esperan aquellas piezas de coleccionista con valores superiores a las siete cifras. ?Quieres un Alfa Romeo Giulia TZ2 carozzata da Zagato de 1965? No hay problema, usted solo tiene que abonar tres millones de cr¨¦ditos. Por desgracia, para este cometido millonario habr¨¢ que asumir largas sesiones de grindeo, puesto que las recompensas la mayor¨ªa de competiciones no son suficientes para costear estas reliquias.

Y as¨ª es como se crea el bucle jugable de Gran Turismo 7: compites, ganas dinero, avanzas en GT Caf¨¦, amplias tu colecci¨®n, pones a punto tu coche y¡­ vuelta a empezar. Disponer una memoria SSD en PS5, que eliminan casi por completo los tiempos de carga, agiliza mucho las cosas. Es inmediato. Cuando te quieres dar cuenta son las tantas de la madrugada. Suponemos que esto dice bien de la estructura tan inmersiva y satisfactoria de la experiencia. Siempre entiendes que est¨¦s haciendo algo, que avanzas, que tu tiempo tiene valor. S¨ª creemos que la variedad de pruebas podr¨ªa ser superior, que falta atrevimiento a la hora de innovar; sobre todo con lo visto en otras alternativas del g¨¦nero.

Un RPG sobre ruedas: tuning para todos

Pongamos ahora los pies en la Tienda de modificaciones y GT Auto, dos de los brazos esenciales de la experiencia de juego en Gran Turismo 7. Quiz¨¢ los menos familiarizados vean aqu¨ª un entorno intimidante, pero la realidad es que no es as¨ª. La presentaci¨®n de todas las opciones de personalizaci¨®n del coche se divide en las que afectan al comportamiento del coche, a la jugabilidad ¡ªTienda de modificaciones¡ª y la m¨¢s estrictamente cosm¨¦tica ¡ªGT Auto¡ª. En la primera tenemos piezas de todo tipo; desde silenciadores a cambios en suspensi¨®n, reducciones de peso, pastillas de freno o nuevos tipos de neum¨¢ticos, esenciales para que nuestro coche sea apto para ciertas competiciones. Es tan sencillo que nos parece un acierto la manera en que han resuelto la din¨¢mica de mejora del coche, esta vez resumida en los PR, los puntos de rendimiento.

Ampliar

Todos los valores de peso, potencia, tren de tracci¨®n o la relaci¨®n de peso/potencia est¨¢n ah¨ª, con un grado de profundidad extremos en su apartado correspondiente. Ahora bien, en caso de que ¨²nicamente quieras ce?irte a los puntos de rendimiento requeridos para entrar en una competici¨®n puedes configurarlo de manera muy similar a como hemos hecho toda la vida en un JRPG, equipando nuevas armaduras y accesorios a nuestro personaje. Cambia ese escudo y tus botas por un turbocompresor de revoluci¨®n alta acompa?ado de nuevas pastillas de freno y¡­ lo tienes. Una suma de un pu?ado de puntos de rendimiento para tu coche. No hace falta que te preocupes por nada m¨¢s. Vuelta a la competici¨®n.

Aunque quiz¨¢ no est¨¦ de m¨¢s poner a punto r¨¢pidamente tu coche en GT Auto, donde adem¨¢s de ver el m¨²sculo visual del Ray Tracing podemos pasar a nuestro pupilo por el t¨²nel de lavado, cambiarle el aceite o restaurar seg¨²n que partes; algo especialmente necesario en aquellos coches de segunda mano con muchas historias a sus espaldas. Tambi¨¦n podemos aprovechar para cambiarle la pintura, el aler¨®n o, en definitiva, personalizar cada coche con una cantidad de opciones absolutamente vasta. Dependiendo del modelo, el n¨²mero de ruedas supera el centenar; por poner solo un ejemplo. Es posible guardar estilos, compartirlos o buscar otros creados por la comunidad. Las opciones son interminables. Una vez se ponga a la venta el juego y la gente d¨¦ rienda suelta a su creatividad veremos un cat¨¢logo paralelo de dise?os para coches, cascos y monos de competici¨®n realmente sobrecogedor. No obstante, es dif¨ªcil de comprender que no haya actualmente una tienda est¨¢ndar en la que invertir cr¨¦ditos en equipamientos reales. Solo podemos conseguir cascos y monos como recompensa, lo cual limita enormemente las opciones de personalizaci¨®n del piloto ofrecidas por el propio juego. El t¨ªtulo quiere que sea la comunidad la que d¨¦ ese toque de profundidad est¨¦tica tan arraigada a los videojuegos actuales, tan conectados y adheridos a la idea del avatar.

En cualquier caso, el sistema de econom¨ªa est¨¢ bien medido, salvo si queremos coches legendarios. Despu¨¦s de unas 45 horas de partida, podemos decir que Gran Turismo 7 equilibra correctamente la relaci¨®n de premios en met¨¢lico con el coste de las cosas; salvo en el endgame, donde la tarea de adquisici¨®n de reliquias legendarias es algo pesada y obliga a grindear carreras. Por regla general, el dinero sobrante es suficiente para que puedas comprar un par de coches antes de entrar a la siguiente competici¨®n o para que personalices a tu gusto tu nueva adquisici¨®n; sin pasarse, pero sin esas limitaciones en reservas que pod¨ªamos encontrar en las obras previas.

Ampliar

Una recreaci¨®n de circuitos ejemplar: los peque?os detalles

Nos esperan un total de 34 ubicaciones donde se mezclan circuitos reales y trazados originales de Gran Turismo como Trial Mountain, Deep Forest y High Speed Ring, que regresan con un lavado de cara digno de menci¨®n. M¨¢s los reales Spa-Francorchamps, Interlagos, Daytona, Monza, Laguna Seca, Suzuka¡­ y los que est¨¢n por llegar en futuras actualizaciones. Por ahora, 97 trazados distintos con un sabor reconfortante.

El esfuerzo de Polyphony Digital por mejorar las f¨ªsicas de los veh¨ªculos se nota desde el primer momento que saltamos al asfalto y afecta a nuestra relaci¨®n con los circuitos. Va todo unido. El estudio japon¨¦s ha evolucionado la simulaci¨®n tanto del comportamiento de los coches como de la aerodin¨¢mica y los neum¨¢ticos de la mano de fabricantes como Michelin o pilotos profesionales del FIA GT Championships. La pregunta es, ?se sienten estos cambios? La verdad es que s¨ª, especialmente en los cambios de carga aerodin¨¢mica por cambios de altura, inclinaci¨®n de la pista, el impacto de la velocidad del viento o las turbulencias. Con clima adverso notas que pierdes el control del volante.

Ampliar

Por contrapartida, Polyphony Digital sigue sin encontrar el punto al motor de colisiones. Gran Turismo 7 es, de largo, el videojuego de conducci¨®n simcade con mejor recreaci¨®n atmosf¨¦rica, unas f¨ªsicas realmente conseguidas en la inercia del movimiento del coche de un lado a otro, el grado de inclinaci¨®n del veh¨ªculo o la tracci¨®n, muy realista y cre¨ªble.

Sin embargo, la magia desaparece en el momento en que dejamos de conducir limpio y se produce un impacto. Al igual que sucede en otros juegos de conducci¨®n declaradamente arcade ¡ªa los que no se puede reprochar que las colisiones se pasen por alto¡ª, para un t¨ªtulo que quiere presentarse como simulador cuesta tolerar que las colisiones sean tan poco visibles y artificiales. Hay mejora respecto a GT6 y GT Sport, ojo, sobre todo por la inercia posicional, pero las consecuencias de esos impactos son nimias; como tambi¨¦n las penalizaciones. Poder saltarse una chicane sin recibir una sanci¨®n es incoherente en un Gran Turismo, que se empe?a en ser excesivamente conservador en este tipo de aspectos. Por tanto, sorprende que sean tan innovador y abundante en detalles de calidad de vida en algunas cosas y tan arcaico en otras.

Ampliar

Hablemos del DualSense

Uno de los motivos por los que Gran Turismo 7 se siente tan bien a los mandos en PS5 es el DualSense. Polyphony Digital ha logrado justificar la introducci¨®n de todo ese despliegue de tecnolog¨ªa prometidos por Mark Cerny all¨¢ por 2020, cuando la nueva consola de Sony se present¨® en sociedad. He aqu¨ª un ejemplo de c¨®mo hacer las cosas; porque tanto la respuesta h¨¢ptica como la vibraci¨®n avanzada y los gatillos adaptativos parecen estar ideados para aprovecharse en un videojuego de conducci¨®n. Siendo claros, los gatillos L2 y R2 hacen las veces de pedales. A tal efecto, el mando simula tanto la caja de cambios como la resistencia que se produce en un coche real. Si aceleras a fondo, pisar el freno responde en base a diferentes resistencias; si no, puedes romper el motor. Hay una diferencia sideral entre no tener ese force feedback en el freno a sentir en tus propios dedos que el coche te diga cu¨¢nto sufre y cu¨¢nto est¨¢ dispuesto a acelerar o frenar antes de un posible vuelque.

Todo esto acompa?ado de una vibraci¨®n muy sensorial que se transmite tanto a gatillos como las agarraderas, la segunda sorpresa del DualSense. Imaginemos que el agarre del mando es el motor del veh¨ªculo, a escasos cent¨ªmetros del suelo. Dependiendo del terreno, bien sea barro, asfalto, un piano o un charco, la vibraci¨®n es distinta, posicional y gradual. Evidentemente, por mucho que os contemos entre l¨ªneas, este tipo de experiencias hay que sentirlas emp¨ªricamente. El uso de la respuesta h¨¢ptica no te cambia la vida (se puede modular la intensidad de la vibraci¨®n), pero s¨ª marca la diferencia y favorece a la inmersi¨®n. Mejora la experiencia, la aproxima al id¨®neo control de un volante con pedales y, con todo, suma. Sublime a este respecto.

Ampliar

Te das cuenta en el instante en que comienzas una carrera: se siente c¨®modo. Cada peque?a inclinaci¨®n de la palanca, c¨®mo reacciona el coche ante los ¨¢ngulos de inclinaci¨®n, la inercia del movimiento de un lado a otro¡­ Nada tiene que ver una tracci¨®n delantera con una trasera; o el tipo de fabricante. Cada carrera es una sorpresa gracias a la climatolog¨ªa din¨¢mica, que puede cambiar el transcurso de la carrera si se pone a llover, si se seca la pista o si hay demasiado tr¨¢fico. Nos hemos visto en situaciones en las que no ve¨ªamos nada por culpa del agua que golpeaba desde el coche delantero, o en un anochecer con curvas en ¨¢ngulo muerto. Esa recreaci¨®n, sumado a la comodidad al volante, hacen que la experiencia en carrera sea encomiable.

Ampliar

Simulaci¨®n de clima e iluminaci¨®n: para frotarse los ojos

Gran Turismo 7 est¨¢ a la vanguardia tecnol¨®gica, si bien no es el techo t¨¦cnico de PlayStation 5. Polyphony Digital ofrece dos modos gr¨¢ficos en la nueva generaci¨®n de Sony: priorizar FPS o priorizar el trazado de rayos. Esto es importante: en el primero tambi¨¦n hay Ray-Tracing, solo que en menos modos, dando as¨ª con un equilibrio para renunciar a lo m¨ªnimo posible.

El modo rendimiento es el que m¨¢s recomendamos en pr¨¢cticamente cualquier circunstancia. Aqu¨ª los 60 FPS son norma durante la jugabilidad, sin ning¨²n tipo de ca¨ªda. Si escogemos priorizar los FPS, se utilizar¨¢ la mayor tasa de fotogramas posible durante todo el juego. Otros efectos, incluido el trazado de rayos, se desactivan o simplifican. Sin embargo, el trazado de rayos s¨ª est¨¢ activo en ciertas escenas 3D y en el modo foto. Si escogemos el modo que prioriza el trazado de rayos, el RT se activa en las repeticiones de las carreras y en las escenas 3D. A cambio, el trazado de rayos se desactiva en las secciones en las que los tiempos de respuesta sean importantes, seg¨²n explica el propio juego.

Ampliar

A nivel audiovisual es impecable, con una iluminaci¨®n muy avanzada y bien posicionada incluso con el trazado de rayos desactivado. La luz empapa el chasis de los modelos tridimensionales de los coches con gran acierto. Polyphony ha recopilado datos meteorol¨®gicos reales de cada ubicaci¨®n para recrear las nubes o las condiciones atmosf¨¦ricas con exactitud. Los cielos, especialmente de noche, sorprenden a la vista. Algo parecido sucede con el excelente trabajo realizado con la conducci¨®n en lluvia, que afecta din¨¢micamente al asfalto y se seca a lo largo de la carrera en aquellas trazadas m¨¢s transitadas. Disponer de un radar de lluvia en carrera es una gran idea; especialmente de cara al modo en l¨ªnea, pues facilitar¨¢ la estrategia y la anticipaci¨®n.

En el plano tecnol¨®gico, contar con climatolog¨ªa variable y una memoria SSD empe?ada en pulverizar los tiempos de carga son puntos atractivos sobre el papel; m¨¢s a¨²n durante una partida. Por fin, Polyphony Digital ha encontrado la manera de hacer que la lluvia afecte al control, que pisar un charco rompa por completo la estabilidad o que la mezcla del agua con la noche se traduzca en un maravilloso caos. No podemos decir lo mismo con los Rally, por desgracia (una vez m¨¢s), donde estudios como Codemasters le tienen mejor medido el pulso al barro y los cambios de nivel. Polyphony se defiende en este tipo de superficies sobre tierra, pero donde mejor se expresa en el asfalto.

Ampliar

Life's Coming in Slow

El repertorio de melod¨ªas sonoras es un aspecto estrictamente cosm¨¦tico que se han tomado muy en serio. En lo musical encontramos m¨¢s de 75 artistas en una biblioteca sonora con m¨¢s de 300 temas en g¨¦neros como jazz, hip-hop, electro, lounge y m¨²sica cl¨¢sica. Una playlist sin flecos; santo y se?a de Gran Turismo. En otro lado tenemos el dise?o de sonido, que si bien saca partido del Audio 3D Tempest para posicionar tridimensionalmente la direcci¨®n de los sonidos, en honor a la verdad esper¨¢bamos m¨¢s a este respecto; no porque no est¨¦ a la altura, sino porque su resultado se conforma con el notable.

Ampliar

Tal es la importancia de la m¨²sica en esta entrega que hay un modo recreativo llamado Rally de m¨²sica, en el que la conducci¨®n va de la mano con el ritmo de las melod¨ªas. El objetivo es no quedarnos sin compases, que van agot¨¢ndose en funci¨®n del ritmo de la canci¨®n. Un time attack, vaya, solo que con temas muy reconocibles de toda la saga y sustituyendo los segundos por compases.

Scapes es otra de las se?as de identidad de la saga. Un videojuego en s¨ª mismo con una red social en la que la fascinaci¨®n es norma. Como si de un documental se tratase, tenemos m¨¢s de 2500 lugares que podemos utilizar como escenario para tomar fotos en diferentes perspectivas. El uso del HDR muestra aqu¨ª su mejor cara, dejando claro que la luz y el color pueden conjugarse de mil maneras. Hablar de fotorrealismo no es exagerado en este caso. Crea, comparte y disfruta. Gran Turismo 7 tambi¨¦n se presta al mero placer de observar.

Ampliar

Simulador o arcade; accesibilidad y opciones

Nada m¨¢s comenzar el juego se nos pedir¨¢ que escojamos las opciones de accesibilidad que deseemos. Desde un selector de dificultad ¡ªf¨¢cil, normal o dif¨ªcil, con efecto directo en la velocidad de la IA¡ª hasta las concesiones que te proporciona el propio t¨ªtulo. Si quieres que sea m¨¢s arcade, basta con que vayas a los ajustes de asistencia y configures el apoyo de aspectos como el control de tracci¨®n, ABS, gesti¨®n de estabilidad (ASM), ayuda al contravolantear, indicadores de zona de freno¡­ Adem¨¢s, no se limita a activarlo o desactivarlo, sino que te deja en muchas de ellas personalizar el grado de ayuda.

Ampliar

Eso s¨ª, en Gran Turismo no existen las opciones de rebobinado: tienes ayudas, pero el tiempo no para, un error en la ¨²ltima vuelta puede dejarte fuera de combate tras tantos minutos en la pista. Irreversible. As¨ª ha sido siempre y no hay visos de cambio. Todo esto, sumado a los tres niveles de dificultad de la IA, dan como resultado un t¨ªtulo o muy permisivo o soberanamente exigente. Y he aqu¨ª uno de los puntos negativos de esta entrega: una IA m¨¢s r¨¢pida (dif¨ªcil) no quiere decir que sea una IA m¨¢s astuta. El comportamiento de la inteligencia artificial presenta mucho margen de optimizaci¨®n, se limita a ser competente. Si bien mejora respecto a GT Sport, sigue sin ser tan competitiva como deber¨ªa. El grado de agresividad es m¨ªnimo, con miedo a la proximidad y sin aprovechar las oportunidades de rebufo salvo contadas ocasiones. Jugar en modo dif¨ªcil es un reto, absolutamente, pero no por las t¨¦cnicas de conducci¨®n de la CPU sino por su capacidad para encontrar la trazada ideal e ir siempre a velocidad punta. Margen de mejora.

Las modalidades multijugador de Gran Turismo 7 se dividen en dos grandes bloques: el multijugador local a pantalla dividida, cuya vuelta celebramos por las comodidades que supone al jugar con amigos en casa; y el modo online propiamente dicho. Asimismo, las opciones en l¨ªnea nos dejan con Sport y Sala. El primero es, b¨¢sicamente, Gran Turismo Sport, cuyos modos y opciones se migran directamente para comenzar aqu¨ª una nueva generaci¨®n competitiva, con sesiones clasificatorias y campeonatos. Sala es el informal, es desenfadado, donde creamos una sala o nos unimos a una ya creada con las opciones que queramos: pista, duraci¨®n, partida p¨²blica o privada con amigos¡­ Hay un detalle que nos ha gustado especialmente en las sesiones de prueba del modo online de Sala: si pausamos la partida en medio de una carrera se activa un piloto autom¨¢tico. Muy interesante de cara a imprevistos, como una llamada en el momento menos pensado. Ese piloto autom¨¢tico no har¨¢ una vuelta r¨¢pida, pero s¨ª evitar¨¢ que seamos expulsados o abracemos un muro. Tanto el matchmaking como el net code han funcionado correctamente, dentro de las limitaciones de jugar antes del lanzamiento del juego.

Ampliar

Hemos disfrutado como hac¨ªa a?os con Gran Turismo 7. Nos hemos visto absorbidos por la forma que tiene el t¨ªtulo de hacernos sentir c¨®modos, de querer seguir jugando y avanzando en una aventura. Son muchas las posibilidades de esta obra, que esperamos se siga ampliando con el paso de los meses y a?os para que dure toda la generaci¨®n. Ese es el trato que se merece el juego y lo que desea la comunidad. Un punto de encuentro duradero, que evolucione y se aproxime a convertirse en el Gran Turismo definitivo.