Sonic Colours: Ultimate 3.0, an¨¢lisis. ?Vale la pena por fin en Nintendo Switch?

Sonic Colours: Ultimate sali¨® en septiembre como un remaster de uno de los Sonic 3D m¨¢s competentes de los ¨²ltimos tiempos, pero no todo fue como se esperaba. Mientras las versiones para plataformas sobremesa y PC manten¨ªan el tipo, en Switch una serie de glitches, problemas t¨¦cnicos y dem¨¢s convirtieron la experiencia en algo nada recomendable. La sensaci¨®n de juego roto invadi¨® redes y foros, y la idea de tener un buen Sonic para jugar en modo h¨ªbrido se desvanec¨ªa. En su momento no tuvimos acceso a dicha versi¨®n, pero ahoar que SEGA se ha puesto manos a la obra para cambiar eso, y tras semanas de parches y cambios, la versi¨®n 3.0 disponible desde este mes de diciembre consigue lo deseado: Sonic Colours Ultimate es un recomendable juego de plataformas del erizo azul tambi¨¦n en Switch.

Para qui¨¦n no lo conozca, estamos ante un juego que sali¨® originalmente en Wii en 2010 y que, a diferencia de otras propuestas tridimensionales del erizo, convenci¨® por su solidez y variedad de situaciones. Si omitimos los Adventure, a Sonic no siempre le ha ido bien en esta faceta alejada de las 2D, pero Colours era y es un buen acercamiento a lo que se puede conseguir.

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De hecho, en Colours vamos a jugar muchos m¨¢s tramos en un plano de avance lateral a lo 2D mientras combinamos carreras con la c¨¢mara detr¨¢s de Sonic en 3D y otras secuencias m¨¢s espectaculares con una vista m¨¢s alejada. Pero donde m¨¢s vamos a controlar al erizo y donde m¨¢s vamos a tener sensaci¨®n de exploraci¨®n ¨Cnecesario para los jugadores que busquen el 100%- ser¨¢ en formato 2D de toda la vida. Este es uno de los motivos por los que el juego funciona: deja el espect¨¢culo de momentos veloces para tramos concretos tridimensionales pero la base jugable mira hacia los juegos cl¨¢sicos.

As¨ª las cosas, vamos a movernos en un universo de fantas¨ªa en el que tenemos distintos mundos que se desbloquean a medida que avanzamos mientras superamos las fases, con su respectivo jefe final en cada uno de ellos, de dichos planetas. Uno de los elementos diferenciales de este t¨ªtulo son los wisps, una especie de aliens que nos dan poderes para poder avanzar y explorar con m¨¢s detenimiento cada fase. Alguno nos permitir¨¢ salir disparados como si fu¨¦ramos un rayo l¨¢ser que rebota, otro nos permite excavar m¨¢s all¨¢ de los l¨ªmites del escenario, uno nos convierte en bloques y destruye otros, otro nos convierte una bestia que rompe con todo tipo de elementos del escenario¡­ Ellos, sumados al nuevo wisp Jade, nos aportan mec¨¢nicas diferentes a las cl¨¢sicas de Sonic y que ya conocemos.

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Lo mejor de ello es que es un t¨ªtulo pensado para rejugarse varias veces. En los niveles veremos la primera vez que habr¨¢ wisps que no est¨¢n disponibles, y eso significa que en posteriores rejugadas podremos hacer uso de ellos para conseguir encontrar todos los extras que hay en forma de anillos rojos (necesarios para las fases de las esmeraldas del chaos y para conseguir un Super Sonic tedioso de desbloquear), medallas grandes, anillos, aliens encapsulados¡­ todo ello, junto a novedades como las carreras con Metal Sonic, confirma que hay juego para rato m¨¢s all¨¢ de la primera vez que lo terminamos.

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Una versi¨®n s¨®lida a nivel t¨¦cnico

Pero lo m¨¢s importante aqu¨ª era saber si la versi¨®n de Nintendo Switch estaba ya preparada para ser recomendada como las anteriores, y por eso hemos jugado a todas las fases del t¨ªtulo hasta terminarlo para ver c¨®mo responde Sonic en planos 2D, en momentos 3D o contra los jefes, donde los glitches destacaban por desgracia en su salida. Nuestra experiencia ha sido totalmente ¨®ptima, sin ning¨²n tipo de problema de este tipo. No hemos visto ni glitches, ni bugs ni nada de lo que se public¨® durante las primeras semanas, por lo que se ha conseguido estabilizar y optimizar el juego tal y como deber¨ªa haber salido en su momento.

Estamos ante una versi¨®n solvente que bajo nuestro punto de vista brilla especialmente bien en modo port¨¢til si tenemos una Switch Oled, donde la cantidad de detalles y colores de esta entrega lucen de maravilla. En modo dock el juego sigue vi¨¦ndose bien, pero es cierto que la resoluci¨®n de 900p se nota y palidece respecto a otras versiones del juego. Seguramente el principal ¡®pero¡¯ que le ponemos a nivel t¨¦cnico es que el t¨ªtulo funcione a 30 frames por segundo y no hayan podido optimizarlo hasta los 60fps de otras versiones. En todo caso, el framerate es estable y no vamos a tener problemas con ello.

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A todo esto se han a?adido algunas mejoras para esta versi¨®n 3.0, como puede ser el poder cambiar entre la m¨²sica original y una de remasterizada, activar y desactivar el efecto de desenfoque cuando vamos a toda velocidad, activar y desactivar la navegaci¨®n con Tails, mejorar a nivel visual el control del Cyan Wisp y poder reproducir los v¨ªdeos a pantalla completa desde el sat¨¦lite de opciones, adem¨¢s de otras mejoras en algunos elementos menores, as¨ª como nuevos elementos cosm¨¦ticos para Sonic en la tienda.

M¨¢s all¨¢ de las mejoras de estabilidad y a?adidos, lo cierto es que Sonic Colours sigue manteniendo sus virtudes pero tambi¨¦n algunos defectos que ya ven¨ªan heredados de la entrega original de Wii. Nos encontramos con un t¨ªtulo que rinde bien en casi todos los planos que nos propone, que es variado en lo que mundos se refiere, pero que tiene alg¨²n que otro problema con la precisi¨®n del control, sobre todo en momentos de m¨¢s pausa y exploraci¨®n; as¨ª como batallas con los jefes finales que no son precisamente las m¨¢s inspiradas. Adem¨¢s, los tiempos de carga siguen siendo algo largos a pesar del salto de hardware respecto Wii. Pero en general, es uno de esos Sonic que juega en la categor¨ªa de los buenos, y eso hay que recalcarlo.